Empleo como mulero bancario: lo que pueden esconder las supuestas ofertas de trabajo que llegan por mensajes de Twitter

¡°?Est¨¢s buscando un trabajo a tiempo parcial?¡±, ¡°?Necesitas trabajar en l¨ªnea?¡±. As¨ª comienzan algunos de los mensajes directos que han recibido durante las ¨²ltimas semanas algunos usuarios de Twitter, los que tienen activada la funci¨®n de recibir comunicaciones. En determinados d¨ªas, uno puede encontrarse con cuatro o cinco ventanas que le ofrecen un empleo en remoto o a media jornada. Eso s¨ª, los mensajes se encuentran en ingl¨¦s y no est¨¢n dirigidos a una persona, sino a grupos enteros que los remitentes crean; eso es lo que puede ayudar a desencadenar las sospechas.

El remitente anima al usuario a escribirle a trav¨¦s de una aplicaci¨®n de mensajer¨ªa para informarle con mayor profundidad de la oferta y le insiste en que no es relevante ni su g¨¦nero ni su edad. En algunos casos, se habla de ¡°servicios de crecimiento de ventas¡± para algunas empresas de comercio en l¨ªnea; sin embargo, seg¨²n explica Josep Albors, director de investigaci¨®n y concienciaci¨®n de la compa?¨ªa de seguridad inform¨¢tica ESET en Espa?a, la estrategia parece ¡°similar al reclutamiento de muleros que lleva vi¨¦ndose m¨¢s de 10 a?os¡±. Al principio, los ciberdelincuentes trataban de captar a trav¨¦s del correo electr¨®nico, despu¨¦s, del SMS y, ahora, en las redes sociales.

Un mulero se encarga de recibir el dinero que facilitan las v¨ªctimas de actividades de cibercrimen o que proviene de robos de cuentas bancarias, y despu¨¦s se lo env¨ªa a los delincuentes, que normalmente est¨¢n fuera de Espa?a, seg¨²n Albors, que insiste en que el mulero puede ser o no consciente de que est¨¢ cometiendo un delito. ¡°T¨² est¨¢s recibiendo dinero que no sabes de d¨®nde es y lo est¨¢s reenviando a otras cuentas que los delincuentes te proporcionan, pensando que es todo de forma legal y qued¨¢ndote con una comisi¨®n¡±, explica el experto. Muchas veces, los delincuentes camuflan la actividad como si se tratara de una empresa leg¨ªtima.

De cualquier manera, el que siempre va a salir perjudicado (adem¨¢s de la propia v¨ªctima del cibercrimen) es el mulero, que utiliza su cuenta bancaria para realizar las transferencias y es el primero al que puede localizar la autoridad policial o la fiscal. ¡°Es bastante dif¨ªcil llegar a los que est¨¢n detr¨¢s de todo porque las cuentas en las que reciben el dinero cambian constantemente, las vac¨ªan y las cierran, y, adem¨¢s, la mayor¨ªa de las veces est¨¢n fuera de Espa?a. No es tan f¨¢cil como detener al mulero¡±, insiste Albors.

Otra posibilidad es que los ciberdelincuentes est¨¦n tratando de ¡°captar a las personas prometi¨¦ndoles unos beneficios muy altos si invierten su dinero en criptomonedas y siguen sus consejos, cuando lo que est¨¢n haciendo es una estafa piramidal¡±, comenta el investigador. De una u otra forma, pueden estar buscando a usuarios que est¨¢n en situaciones econ¨®micas delicadas y que no van a hacer muchas preguntas.

Sin embargo, muchas veces, estas campa?as de spam se dirigen al mayor n¨²mero posible de usuarios, independientemente del pa¨ªs en el que est¨¦n, de su perfil o de su situaci¨®n econ¨®mica: ¡°Como los ciberdelincuentes juegan con el inc¨®gnito, no les da miedo que todo el mundo lo reciba. Hacen pesca de arrastre, se lo env¨ªan a todos los usuarios que pueden y el que pique ha picado¡±, aclara Albors.

Aunque este tipo de campa?as se da en cualquier plataforma, tanto en redes sociales como en los servicios de correo electr¨®nico o incluso en los SMS, en este caso es Twitter la que ha visto una proliferaci¨®n de estas supuestas ofertas de empleo. La plataforma asegura: ¡°Luchamos contra el spam y la automatizaci¨®n maliciosa de forma estrat¨¦gica y a escala con herramientas de aprendizaje autom¨¢tico y revisamos y actualizamos regularmente nuestras reglas para asegurarnos de que se aplican seg¨²n lo previsto. En el ¨²ltimo a?o, hemos actuado sobre millones de tuits y de cuentas¡±.

Si el usuario recibe un mensaje directo sospechoso, Twitter recomienda denunciarlo en la propia plataforma (manteniendo pulsado el mensaje en el m¨®vil o pulsando en los tres puntos que aparecen junto al mensaje en la web), no descargar ning¨²n archivo adjunto ni hacer clic en los enlaces y eliminarlo de la bandeja de entrada inmediatamente. Para protegerse m¨¢s a¨²n, aconseja actualizar la configuraci¨®n para gestionar qui¨¦n puede enviarle mensajes de texto y recuerda que es el usuario el que tiene el control y puede elegir no aceptar mensajes directos de cualquier usuario al que no siga.

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