Dos refugiados rohingya, los nuevos mu?ecos de Barrio S¨¦samo
Los hermanos Noor y Aziz aparecer¨¢n con Elmo y los dem¨¢s famosos ¡®Muppets¡¯ en programas educativos sobre matem¨¢ticas, ciencia, salud y otros temas que se mostrar¨¢n en los campamentos
Los gemelos Noor y Aziz tienen seis a?os, son musulmanes rohingya que escaparon de la limpieza ¨¦tnica en su Myanmar natal para guarecerse en el vecino Bangladesh, y viven en un campo de refugiados. M¨¢s de la mitad de asentados son ni?os, pero estos hermanos difieren de los dem¨¢s: est¨¢n hechos de gomaespuma y, junto a Elmo y al resto de famosos Muppets, impartir¨¢n los programas educativos que se retransmitan en estos mismos campamentos. Amenizar¨¢n a los afectados con ense?anzas sobre matem¨¢ticas, salud, ciencia, entre otros temas, seg¨²n indic¨® el jueves Sesame Workshop, la organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro que dirige el programa de televisi¨®n Barrio S¨¦samo y que opera en m¨¢s de 150 pa¨ªses.
Sherrie Westin, la presidenta de impacto social de la ONG, viaj¨® a los campos de refugiados de rohingya varias veces para ayudar a crear a los hermanos y dedujo que los menores de este grupo ¡°est¨¢n entre los m¨¢s marginados de la tierra¡±. ¡°Para la mayor¨ªa de ellos esta ser¨¢ la primera vez que los personajes en los medios de comunicaci¨®n sean parecidos a ellos, suenen como ellos, y realmente reflejen su rica cultura¡±, a?adi¨®.
De hecho, Noor y Aziz hablar¨¢n el rohingya, el idioma que las autoridades de Myanmar se han negado a reconocer como una etnia leg¨ªtima. Sesame Workshop tambi¨¦n ha creado un nuevo programa de estudios en rohingya en asociaci¨®n con la Fundaci¨®n Lego, el Comit¨¦ Internacional de Rescate y BRAC, una organizaci¨®n ben¨¦fica fundada en Bangladesh.
En una encuesta de M¨¦dicos sin Fronteras, publicada a ra¨ªz de la huida en 2017 de m¨¢s de 750.000 rohingya en unos pocos meses, se determin¨® que por lo menos 730 ni?os menores de cinco a?os fueron asesinados entre final de agosto y de septiembre de ese a?o. Los supervivientes tuvieron que lidiar con traumas despu¨¦s de que las fuerzas de seguridad de Myanmar los obligaran a salir de sus aldeas, asesinaran a sus padres o violaran a sus madres. Las ni?as, que a menudo no van a la escuela, tienden a casarse antes de ser adultas para ayudar econ¨®micamente a sus familias. Este a?o, cientos ellas pasaron meses en el mar en barcos pesqueros sobrecargados tratando de llegar a Malasia, donde se les hab¨ªa prometido como novias infantiles a los hombres rohingya que trabajaban indocumentados. Docenas murieron durante el viaje.
Esa violencia que atrapa a los ni?os se entrev¨¦ en la personalidad de Noor y Aziz. La primera siente pavor ante los ruidos estruendosos, le recuerdan a los disparos que conmocionan a muchos de los rohingya en sus recuerdos. Pero tambi¨¦n mantiene un soplo de esperanza: transmite confianza en s¨ª misma y motivaci¨®n por aprender. El equipo decidi¨® representarlos espec¨ªficamente como gemelos para que pudieran jugar juntos como una ni?a y un ni?o, ya que otros hermanos en esta comunidad musulmana tradicional no pueden hacerlo tan f¨¢cilmente. Su hermano, Aziz, est¨¢ impregnado de la tradici¨®n rohingya de contar historias y colabora con su familia en las tareas dom¨¦sticas.
El Sesame Workshop trata de difundir la diversidad y la justicia social. Por ello, Barrio S¨¦samo surgi¨® en 1969 con la intenci¨®n de mitigar la diferencia educativa de clases sociales. Desde entonces, ha tratado toda variedad de temas escabrosos, aquellos relevantes que perturban a los padres y dejan en evidencia sus pudores y miedos: el 11-S, la muerte de un ser querido, el divorcio, la c¨¢rcel o tragedias familiares como la de Karli, una ni?a de seis a?os que vive en una casa de acogida mientras su madre se recupera de una adicci¨®n a los opioides.
Barrio S¨¦samo fue el primer programa infantil en tener un elenco predominantemente de color, visibiliz¨® a personajes de mujeres solteras e independientes e incluy¨® a una ni?a autista, Julia. ¡°Queremos que los padres y los ni?os no sientan el autismo como algo inc¨®modo¡±, explic¨® Westin. A?adi¨® que Julia ser¨ªa que hace las cosas de manera distinta para que un ni?o de cinco a?os sepa que, si otro no le hace contacto visual, no es siempre porque no quiera jugar con ¨¦l.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.