Netflix trata de pescar el siguiente ¡®Juego del calamar¡¯ en aguas surcoreanas

¡°Hay que hacer historias que, ante todo, sean localmente relevantes, si intentas crear algo imaginando lo que quiere el p¨²blico de otros pa¨ªses, es raro que aciertes y dif¨ªcil que seas aut¨¦ntico, fiel a tu genuina creatividad¡±, dice Don Kang, vicepresidente de contenidos de Netflix en Corea del Sur. ¡°Nuestro foco es siempre local; si las historias viajan, y lo hacen, demuestra que compartimos algo universal¡±.

¡°Local first¡±, lo local primero, insiste parad¨®jicamente el ejecutivo ante una treintena de periodistas que Netflix ha invitado a sus oficinas de Se¨²l desde todos los rincones del mundo. Est¨¢ The New York Times y Corriere della Sera. Hollywood Reporter y El Tiempo de Colombia. Periodistas e influencers de la regi¨®n (Filipinas, Singapur, Jap¨®n, Tailandia, Indonesia...) y de m¨¢s all¨¢: de una corresponsal de France Presse a una youtuber del Tampico (M¨¦xico). La abundancia de medios latinoamericanos presentes tiene su raz¨®n de ser. ¡°M¨¢s del 60% de los suscriptores globales de Netflix vieron alg¨²n t¨ªtulo coreano el a?o pasado¡±, dice Kang, ¡°un 85% en el caso de los latinoamericanos¡±. Unos y otros se hacen selfis con la cabeza gigante de Younghee que preside la oficina, la ni?a robot que controlaba qui¨¦n era aniquilado en la sangrienta versi¨®n del un, dos, tres al escondite ingl¨¦s de El juego del calamar.

La alargada sombra de la serie m¨¢s vista de Netflix sobrevuela el evento: durante dos d¨ªas, el ecl¨¦ctico grupo visitar¨¢ sets y entrevistar¨¢ a los responsables de 3 de los 34 t¨ªtulos coreanos que la plataforma emitir¨¢ en 2023. Es su mayor oferta hasta el momento de contenido coreano, alimentada por una inversi¨®n de cerca de 750 millones de euros entre 2016 y 2021.

?Se siente la presi¨®n para repetir el fen¨®meno? ¡°?Qu¨¦ presi¨®n? ?Si ha sido un paseo en barco!¡±, bromea Kang, que admite que el apremio para lograr el siguiente Juego del calamar existe, ¡°pero en un entorno favorable para recibirlo¡± dado que ¡°la industria coreana nunca ha tenido tanta inercia¡±. Ni siquiera es una presi¨®n nueva, explica el ejecutivo, que antes trabaj¨® para el gigante medi¨¢tico CJ Enternainment: ¡°Incluso antes de Netflix el contenido coreano ten¨ªa much¨ªsimo tir¨®n en la regi¨®n Asia-Pac¨ªfico y era un nicho estable fuera, El Juego del calamar abri¨® el horizonte, sin duda, pero estamos acostumbrados. Hace a?os que la gente se preocupa por cu¨¢ndo va a decaer la hallyu [la ola coreana]. ¡®?Oh, seremos capaces de replicar nuestro ¨²ltimo ¨¦xito otra vez?¡¯, se preguntan¡±.

Kang no teme: ¡°Hay talento de sobra¡±. El t¨¦rmino hallyu se refiere a la conquista cultural de un pa¨ªs de apenas 51 millones de habitantes, y fue descrito por primera vez a finales de los noventa por la prensa china. En 2012 arras¨® occidente con la canci¨®n Gangman Style de PSY y, desde entonces, no para de exportar fen¨®menos musicales como BTS o Black Pink y audiovisuales como Par¨¢sitos. En Netflix, el a?o pasado, series tan dispares como Estamos muertos o Woo, una abogada extraordinaria se colocaron entre lo m¨¢s visto en m¨¢s de 90 pa¨ªses.

Entre la variedad de k-dramas (como se conocen las series del pa¨ªs) que se estrenar¨¢n este a?o, Netflix subraya ante la prensa extranjera la dist¨®pica El caballero negro, ¡ªambientada en un futuro pr¨®ximo en el que hay que llevar respiradores dada la asfixiante poluci¨®n y basada en un exitoso webtoon (el popular formato para m¨®vil de los c¨®mics coreanos)¡ª y El monstruo de la vieja Se¨²l, un giro del prol¨ªfico g¨¦nero de monstruos que tiene lugar en los turbulentos y glamurosos a?os cuarenta, durante los estertores de la dominaci¨®n japonesa del pa¨ªs. ¡°Queremos equilibrar el tono de las producciones para cubrir todo el espectro emocional, ya que en el pasado hemos ofrecido muchas series de horror y ciencia ficci¨®n y uno no siempre tiene el d¨ªa para ver cuerpos desmembrados¡±, dice Kang, mencionando tambi¨¦n la rom¨¢ntica ?Doona!, en la que un universitario convive con una antigua estrella del k-pop, interpretada por la actriz e idol musical Bae Suzy.

En la pista de salida tambi¨¦n hay esperadas segundas temporadas como las de Sweet Home o La gloria. No forma parte de la presentaci¨®n, pero es imposible que la prensa invitada a ver qu¨¦ serie podr¨ªa repetir el ¨¦xito de El Juego del calamar no pregunte por la segunda temporada de esta. Kang adelanta que el director Hwang Dong-hyuk ya ha escrito el guion y se encuentra ¡°en preproducci¨®n¡±, pero no ofrece fechas: ¡°Tiene que salir bien, as¨ª que puede llevar alg¨²n tiempo¡±. ¡°La segunda temporada ha de ser aut¨¦ntica, no queremos copiar y pegar la misma historia solo porque triunfase comercialmente alrededor del mundo¡±, a?ade sobre una serie que, de hecho, tuvo ¨¦xito en Corea, pero se convirti¨® en un fen¨®meno tras salir fuera de sus fronteras.

M¨¢s all¨¢ de las series

¡°Asia es el mercado que m¨¢s crece y que m¨¢s deprisa lo hace, en gran parte impulsado por el contenido coreano¡±, explica Amy Kunrojpanya, vicepresidenta de relaciones p¨²blicas de la regi¨®n. Tambi¨¦n es un mercado joven para Netflix, que lleva 25 a?os funcionando en Estados Unidos, 15 en Latinoam¨¦rica, 12 en Europa y solo unos 5 en Jap¨®n, Corea o India.

El empuje surcoreano ha llevado a invertir en productos m¨¢s all¨¢ del k-drama. Ejemplo de ello es la pel¨ªcula Boksoon debe morir, de la que se ofrece un trepidante adelanto durante el evento corporativo para los medios internacionales antes de su estreno la semana que viene en el Festival de Berl¨ªn (fuera de competici¨®n, Netflix la emitir¨¢ a partir del 31 de marzo). Protagonizada por la superestrella local Jeon Do-yeon (premiada en Cannes en 2007 por su interpretaci¨®n en Secret Sunshine), narra la compleja conciliaci¨®n de una asesina a sueldo y madre de una adolescente. ¡°Lo mejor de trabajar con Netflix ha sido la libertad creativa que me han dado y tambi¨¦n el hecho de estar aqu¨ª sentado con vosotros, miembros de la prensa internacional¡±, dice su director, Byun Sung-hyun, a los presentes. ¡°Pensar que la pel¨ªcula se emitir¨¢ en 190 pa¨ªses alrededor del mundo y llegar¨¢ a tanta gente es lo mejor¡±.

¡°Incluso los programas de no ficci¨®n, que siempre se hab¨ªan resistido a viajar en la televisi¨®n lineal, lo est¨¢n haciendo en Netflix¡±, presume el vicepresidente Kang mencionando estrenos ¡°cada vez m¨¢s locos¡±, como los realities de supervivencia Habilidad f¨ªsica: 100 o El plan del diablo, cuyos tr¨¢ileres recuerdan de forma inquietante a un Juego del calamar en la vida real, es decir, sin muertos. ¡°Algunos c¨®digos de la no ficci¨®n son m¨¢s dif¨ªciles de entender en el extranjero, pero yo siempre supe que la demanda estaba ah¨ª y el problema era que no exist¨ªa la plataforma adecuada¡±, dice Kang. ¡°As¨ª que no estoy sorprendido por su ¨¦xito¡±, afirma con flema coreana. ¡°Simplemente, estoy contento¡±.

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