El misterio de ¡®El Ministerio del Tiempo¡¯: honor y reputaci¨®n
Cuando se cumplen nueve a?os de su estreno, la serie vuelve a ser noticia. Su creador reflexiona sobre la pasi¨®n incombustible de sus seguidores
Justo cuando se cumplen nueve a?os de su estreno en TVE, El Ministerio del Tiempo vuelve a ser noticia. Lo es porque la BBC (sin la cual dudo que yo fuera guionista, tanto le debo) lanza un proyecto con id¨¦ntico nombre y similar sinopsis al que en su d¨ªa creamos mi hermano Pablo y yo. Ocurre cuando la serie lleva m¨¢s de tres a?os sin emitir. Y, sin embargo, las redes arden. Sus seguidores (los minist¨¦ricos) la defienden apasionadamente, como siempre. Los medios de comunicaci¨®n se vuelcan con la noticia. Y con una solidaridad y unanimidad emocionante, los profesionales del audiovisual y de la cultura (incluyendo un icono como el Museo del Prado) muestran su apoyo incondicional.
Hoy se cumplen 9 a?os del estreno del @MdT_TVE, una serie ejemplar que hizo mucho por acercar y popularizar la cultura y que celebr¨® en sus cap¨ªtulos algunos de los principales hitos de nuestra historia, con protagonistas inolvidables como Vel¨¢zquez #GraciasMinisterioDelTiempo pic.twitter.com/i1OrKzSuSa
— Museo del Prado (@museodelprado) February 24, 2024
?C¨®mo es posible que una serie que lleva tres a?os sin emitir siga siendo noticia? No tengo una respuesta clara: la serie y lo que la rodea me lleva sorprendiendo desde su estreno. En el cap¨ªtulo dos, un funcionario del Ministerio se cruzaba con Alonso de Entrerr¨ªos maldiciendo que ten¨ªa que viajar hasta Atapuerca. A los cinco minutos, en redes, la Fundaci¨®n Atapuerca nos invitaba a conocer el lugar. En el cap¨ªtulo tres, un experto en esas lides me ense?¨® que ten¨ªamos subt¨ªtulos piratas en ruso, italiano, chino, ingl¨¦s¡ En el cinco, recibo mensajes de erasmus espa?oles en Rusia cont¨¢ndome que Irene Larra es un icono del movimiento LGTB¡
La Biblioteca Nacional llama para que le anticipe las tramas de la temporada para documentar cada cap¨ªtulo con im¨¢genes de sus fondos y tuitear, como una minist¨¦rica m¨¢s, cada cap¨ªtulo. La imagen real de Lorca, Lope de Vega o Vel¨¢zquez muchas veces es la de quienes los interpretan en la serie (?ngel Ruiz, V¨ªctor Clavijo y Juli¨¢n Villagr¨¢n).
Pese a no liderar nunca las audiencias lineales, paradojas de la industria, la serie es trending topic (mundial) cada cap¨ªtulo y su nombre se usa en cr¨®nicas period¨ªsticas, de forma popular.
Los cap¨ªtulos se usan en colegios e institutos. Tambi¨¦n se utilizan en la ense?anza del castellano a extranjeros: hace un par de a?os, en la Universidad de Salamanca se ley¨® la tesis ¡°La aplicacio?n de los medios audiovisuales subtitulados en la ensen?anza de espan?ol a sinohablante: el caso de El Ministerio del Tiempo¡± Su autora, Lin Jia, me la env¨ªo amablemente.
Adem¨¢s, el reconocimiento de medios y profesionales nos concedi¨® la posibilidad de ganar casi todos los premios posibles, incluidos un Platino y dos Ondas consecutivos. Incluso en una encuesta realizada (en 2017) a cr¨ªtica nos eligi¨® ¡ªestas encuestas no suelen ser justas¡ª mejor serie espa?ola de la Historia.
?C¨®mo una serie que no renueva y que muchos dicen que no tiene audiencia consigue todo esto? ?C¨®mo es plagiada por la NBC (Timeless) con guionistas de la talla de Kripke y Ryan? ?C¨®mo la BBC anuncia una serie con el mismo nombre y las mismas premisas? ?C¨®mo hay minist¨¦ricos en todo el mundo?
Como se ve, la historia de la serie es una sucesi¨®n (casi siempre feliz) de paradojas y misterios. A¨²n as¨ª, creo que su creaci¨®n se basa en una serie de conceptos que no quiero que se olviden. El primero es la libertad creativa: Pablo y yo escribimos El Ministerio del Tiempo como la serie que nos hubiera gustado ver, aunque no la vendi¨¦ramos. Sin influencias. Sin algoritmos. Y con la exigencia innegociable de ser showrunners de la misma. Y TVE nos dio plena libertad. As¨ª surgi¨® una serie pop que mezclaba lo fant¨¢stico con la aventura¡ Y con nuestra Historia. Porque como en Isabel, V¨ªctor Ros o, pr¨®ximamente, en Ena la idea es hablar de nosotros, nuestros ¨¦xitos y nuestros fracasos.
Creyendo que tan Historia es Felipe II como Emilio Herrera. Lorca como Luis Aragon¨¦s. Las Sinsombrero como Isabel. Y respetando a nuestros mayores: Jardiel, Chicho, Armi?¨¢n, Berlanga, Ib¨¢?ez¡ Creyendo que ya es hora de acabar con el tema de las dos Espa?as, porque hay m¨¢s. Que ser espa?ol es un concepto m¨¢s amplio que una ideolog¨ªa y que hay que sospechar de las ideolog¨ªas que conceden certificados de patriotismo o de bondad.
El momento tambi¨¦n es un factor importante. El Ministerio del Tiempo surge cuando todos los que llev¨¢bamos muchos a?os haciendo series, luchamos por un cambio, hartos de f¨®rmulas agotadas, con creadores como ¡ªentre otros¡ª Ram¨®n Campos, ?lex Pina y luego Los Javis¡, que hemos crecido en casa con la televisi¨®n siempre puesta. Y la amamos y nunca la miraremos por encima del hombro. Nunca diremos que una serie ¡°es una pel¨ªcula m¨¢s larga¡±.
Por ¨²ltimo, el respeto al espectador que es lo m¨¢s inteligente (se diga lo que se diga) de esta industria. Lo que ocurre es que, cuando ve productos est¨²pidos, huye de la pantalla. Necesit¨¢bamos una comunicaci¨®n directa con ¨¦l (?con qui¨¦n si no?). El Ministerio del Tiempo ha sido pionera en comunicaci¨®n transmedia. As¨ª conseguimos que cada emisi¨®n fuera una fiesta, lo que habla de la necesidad de una televisi¨®n en abierto de calidad, como se hace en la ficci¨®n europea. Y eso conlleva la necesidad de una televisi¨®n p¨²blica potente.
Y la fiesta contin¨²a. Porque, aunque la serie no se emita, detr¨¢s de ella hay una comunidad que no se olvida del lema de Alonso de Entrerr¨ªos, clave de la serie: Honor y reputaci¨®n.
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