La temporada de huracanes en Estados Unidos: ?qu¨¦ seguir¨¢ despu¨¦s de ¡®Helene¡¯?

Diversos factores medioambientales sugieren que la temporada de huracanes en el Atl¨¢ntico en 2024 tendr¨¢ un impacto considerable que se mantendr¨¢ hasta inicios de noviembre. Tras la llegada a tierra del hurac¨¢n Helene en Florida, la Administraci¨®n Nacional Oce¨¢nica y Atmosf¨¦rica (NOAA) resalt¨® que las condiciones son propicias para que contin¨²e la actividad cicl¨®nica. Con temperaturas de la superficie del mar cercanas al r¨¦cord y la posibilidad de que se desarrolle un patr¨®n meteorol¨®gico de La Ni?a, la situaci¨®n se ha intensificado.

Este a?o se prev¨¦n entre 17 y 24 tormentas tropicales. Entre 8 y 13 de ellas se convertir¨¢n en huracanes, de los cuales entre 4 y 7 podr¨ªan crecer hasta convertirse huracanes de gran intensidad.

La temporada de huracanes hasta ahora

La temporada de huracanes suele ir del 1 de junio al 30 de noviembre. Hist¨®ricamente, los impactos m¨¢s significativos de los huracanes y las tormentas tropicales se producen durante mitad de temporada, en agosto y septiembre. Las primeras, como la tormenta tropical Alberto y el hurac¨¢n Beryl, ya demostraron su capacidad destructiva. El segundo ha hecho historia como el cicl¨®n tropical m¨¢s precoz en alcanzar la categor¨ªa 5 en la cuenca atl¨¢ntica, causando da?os catastr¨®ficos y numerosas v¨ªctimas mortales en el Caribe y partes del territorio continental de Estados Unidos. De igual forma, el hurac¨¢n Helen ha causado estragos considerables en Florida, pero se convirti¨® r¨¢pidamente en tormenta tropical al llegar a Georgia y Carolina del Norte.

La destructiva trayectoria de Beryl es un ejemplo de la inusual temporada de huracanes. La NOAA resalta la alarmante tendencia de las temperaturas de la superficie del mar a mantenerse anormalmente altas, lo que ha sido un factor que influy¨® en la intensidad de las tormentas recientes. Adem¨¢s, la presencia de La Ni?a ¡ªun patr¨®n clim¨¢tico caracterizado por temperaturas oce¨¢nicas m¨¢s fr¨ªas en el Pac¨ªfico oriental¡ª puede emerger, teniendo un efecto en el desarrollo de los huracanes. La Ni?a suele debilitar la cizalladura vertical del viento sobre el Atl¨¢ntico, permitiendo que las tormentas se intensifiquen m¨¢s f¨¢cilmente.

?Por qu¨¦ ha sido tan intensa?

Las condiciones atmosf¨¦ricas y oce¨¢nicas subyacentes que contribuyen a la actividad de esta temporada incluyen una serie de factores interrelacionados: Las c¨¢lidas temperaturas de la superficie del mar en el Atl¨¢ntico tropical y el Caribe, combinadas con una menor cizalladura vertical del viento y vientos alisios m¨¢s d¨¦biles, crean un entorno propicio para la formaci¨®n de huracanes. Tambi¨¦n se ha observado una intensificaci¨®n del monz¨®n de ?frica Occidental, que puede provocar un aumento de la actividad tropical. A medida que el aire seco del S¨¢hara, que ha impedido el desarrollo de tormentas, empiece a disminuir, aumentar¨¢ la probabilidad de nuevas tormentas.

El Centro de Predicci¨®n Clim¨¢tica de la NOAA dice que que 2024 tiene un 90% de posibilidades de ser clasificada como una temporada de huracanes por encima de lo normal, con s¨®lo un 10% de probabilidad de que sea cercana a lo normal y pr¨¢cticamente ninguna posibilidad de que sea inferior a lo normal. Esta perspectiva es alarmante, dado que una temporada t¨ªpica tiene un promedio de 14 tormentas tropicales, siete de las cuales se convierten en huracanes y tres en huracanes de gran intensidad.

Con la realidad del cambio clim¨¢tico influyendo en los patrones meteorol¨®gicos, las previsiones de la temporada actual tambi¨¦n sirven de advertencia para el futuro. La actual fase c¨¢lida de la Oscilaci¨®n multidecanal del Atl¨¢ntico ha contribuido a temporadas de huracanes m¨¢s activas desde su reaparici¨®n en 1995. Estos cambios climatol¨®gicos, combinados con la posible aparici¨®n de las condiciones de La Ni?a, sugieren que el panorama de los huracanes seguir¨¢ evolucionando de forma que supondr¨¢ un reto para los esfuerzos de preparaci¨®n.

?Qu¨¦ seguir¨¢ esta temporada?

La temporada de 2024 est¨¢ convirti¨¦ndose en una de las m¨¢s intensas registradas, lo que muestra una tendencia de aumento de la actividad tormentosa vinculada al cambio clim¨¢tico. Los datos hist¨®ricos muestran que el pico de actividad de los huracanes suele coincidir con temperaturas oce¨¢nicas m¨¢s c¨¢lidas, lo que sugiere que podr¨ªamos ver tormentas m¨¢s potentes a medida que avance la temporada.

La predicci¨®n de la NOAA de 17 a 24 tormentas tropicales indica que es probable que haya m¨¢s en el horizonte. La formaci¨®n temprana de temporales importantes como el hurac¨¢n Beryl ya ha sentado un precedente para una temporada muy activa.