La mayor parte de la poblaci¨®n apoya las deportaciones masivas tras la victoria de Donald Trump

Donald Trump logr¨® una abrumadora victoria en las elecciones del 5 de noviembre con la promesa de una masiva deportaci¨®n de migrantes como bandera. El apoyo popular que obtuvo se mantiene despu¨¦s de que sus acciones inmediatas confirmen que sus planes no se quedar¨¢n en la teor¨ªa y que llevar¨¢ a cabo una de las pol¨ªticas migratorias m¨¢s duras de las ¨²ltimas d¨¦cadas. As¨ª lo han revelado dos sondeos recientes, en los que la mayor¨ªa de los encuestados respalda la expulsi¨®n del pa¨ªs de los m¨¢s de 11 millones de indocumentados que se estima residen en Estados Unidos. La encuesta publicada el domingo por CBS y realizada por YouGov, muestra que el 57% de la poblaci¨®n apoya la que ser¨ªa la mayor deportaci¨®n de la historia, frente al 43% que la desaprueba. En otro sondeo, realizado por Ipsos y Scripps News despu¨¦s de las elecciones, un 52% de los encuestados est¨¢ a favor de la deportaci¨®n. El porcentaje es m¨¢s elevado entre los republicanos, de los que un 85% confirma su apoyo a la expulsi¨®n de migrantes.

Esta ¨²ltima encuesta, realizada a 1.031 ciudadanos entre el 15 y el 17 de noviembre con un margen de error de 3.3 puntos, pone de relieve que aunque la mayor parte de la poblaci¨®n desea las deportaciones, su apoyo cae cuando se sopesan las consecuencias. Si la pol¨ªtica de expulsi¨®n significa la separaci¨®n de familias, el apoyo cae 14 puntos y solo un 38% la apoyar¨ªa. Aunque la mayor¨ªa de los republicanos (68%) siguen a favor de la pol¨ªtica, solo cuatro de cada diez independientes y aproximadamente uno de cada diez dem¨®cratas estar¨ªan de acuerdo. Esta no es una posibilidad remota, teniendo en cuenta el historial de deportaciones que el presidente electo colect¨® en su anterior mandato y en el que las dram¨¢ticas separaciones de padres de sus hijos fueron rutinarias.

La probabilidad de que la historia se repita se ha visto reforzada por los elegidos por Trump para dirigir la pol¨ªtica migratoria. Tom Homan, que asumir¨¢ el cargo de ¡°zar de la frontera¡±, fue director del Servicio de Inmigraci¨®n y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en ingl¨¦s). Bajo ese t¨ªtulo se convirti¨® en uno de los arquitectos de la pol¨ªtica ¡°tolerancia cero¡±, por la que se deport¨® a miles de migrantes sin tener en cuenta si ello implicaba la separaci¨®n de familias, lo que desencaden¨® situaciones de ni?os alejados de sus padres. En declaraciones recientes, Homan ha respondido que para evitar situaciones similares, deportar¨¢ a las familias enteras.

Otro halc¨®n defensor de una pol¨ªtica que ha sido calificada de inhumana por las organizaciones proderechos humanos es Stephen Miller, tambi¨¦n presente en la primera presidencia de Trump, que ocupar¨¢ el cargo de jefe adjunto de Gabinete de la Casa Blanca, papel desde el que supervisar¨¢ las pol¨ªticas de inmigraci¨®n.

Ya antes de las elecciones, los sondeos revelaban un giro hacia la derecha en materia migratoria entre la poblaci¨®n estadounidense. Un ejemplo de ello es la Encuesta Anual de los Valores Americanos, realizada en agosto por Brookings y el Instituto de Investigaci¨®n P¨²blica de Religi¨®n, que por primera vez desde 2018 mostr¨® una ca¨ªda del apoyo a los migrantes que llegaron indocumentados siendo ni?os, los llamados dreamers. Una peque?a mayor¨ªa de estadounidenses (52%) se mostr¨® a favor de permitir que obtengan el estatus de residentes legales, cuando hace seis a?os lo apoyaba un 62%. Los dreamers tambi¨¦n est¨¢n en el punto de mira de Trump, que ya intent¨® terminar con el programa que los protege de la deportaci¨®n, DACA, en su anterior mandato.

Cuando afecta al bolsillo

Los economistas han advertido de los efectos negativos que tendr¨ªa en la econom¨ªa del pa¨ªs una deportaci¨®n masiva. Los 11 millones de indocumentados son personas que trabajan, consumen, pagan impuestos¡­ y su expulsi¨®n afectar¨ªa al resto de la poblaci¨®n. Teniendo esto en cuenta, el apoyo a las deportaciones ya no es tan alto. Seg¨²n la encuesta de Ypsos, el respaldo a las deportaciones caer¨ªa al 48% si ello afecta a las arcas de la Seguridad Social y Medicare. Seg¨²n el Consejo Americano de Inmigraci¨®n, los trabajadores indocumentados contribuyeron con 22.600 millones de d¨®lares a la Seguridad Social y con 5.700 millones de d¨®lares a Medicare, programas para los cuales no son elegibles. Su expulsi¨®n pondr¨ªa en problemas las finanzas de los servicios p¨²blicos y es ah¨ª donde las deportaciones pierden adeptos.

Al igual que si se tiene en cuenta que su salida del mercado laboral dejar¨ªa muchos empleos sin cubrir, sobre todo los que no quieren los ciudadanos americanos. Los sectores m¨¢s afectados ser¨ªan la hosteler¨ªa, la agricultura y los servicios de cuidados de personas. En ese caso, el apoyo de los encuestados cae al 47%. Tambi¨¦n se reduce el respaldo a las deportaciones hasta el 43% si ello supone un aumento de la inflaci¨®n, algo de lo que los economistas ya han advertido.

La encuesta de CBS, realizada a 2.232 ciudadanos entre el 19 y el 22 de noviembre con un margen de error de 2,3 puntos, tambi¨¦n muestra diferencias cuando se dan los detalles de lo que ser¨ªan las deportaciones. Aunque Trump no ha aportado muchas pistas de c¨®mo se realizar¨¢, el hecho de que el republicano haya afirmado que el Ej¨¦rcito participar¨¢ en la operaci¨®n no agrada tanto y un 60% de los encuestados opina que los militares no deber¨ªan formar parte.

El apoyo a los planes del republicano, sin embargo, queda tambi¨¦n reflejado en el hecho de que un 73% de los encuestados cree que las deportaciones deber¨ªan ser de alta o media prioridad para la Administraci¨®n entrante y solo el 27% opina que es un tema secundario.