El incierto futuro del carb¨®n en Colombia con Petro

Temperaturas r¨¦cord que superan los 40 grados cent¨ªgrados tienen en alerta a Europa occidental. Espa?a se estremeci¨® con la historia de Jos¨¦ Antonio Gonz¨¢lez, un barrendero de 60 a?os que muri¨® luego de soportar el calor extremo en las calles de Madrid. Las altas temperaturas en el pa¨ªs dejan m¨¢s de 500 muertos y de 70.000 hect¨¢reas arrasadas por incendios forestales en lo corrido del a?o, el doble del promedio de la ¨²ltima d¨¦cada. En Reino Unido, Francia, Portugal, Italia, y Grecia tambi¨¦n se han presentado emergencias. La devastadora manifestaci¨®n del cambio clim¨¢tico ocurre al tiempo que la Uni¨®n Europea contempla relajar el control a las emisiones con el uso de combustibles m¨¢s contaminantes, como el carb¨®n, para hacer frente a la escasez de gas por la guerra en Ucrania. La mirada ha girado hacia Colombia, uno de los principales exportadores del mineral.

El viraje hacia el uso de fuentes de este tipo ya se oficializ¨® en Alemania, donde la reducci¨®n de las exportaciones del gas ruso presion¨® una decisi¨®n inesperada: la reactivaci¨®n de la producci¨®n el¨¦ctrica en plantas de carb¨®n, un retroceso en la meta de abandonar este combustible en 2030. Holanda y Austria tambi¨¦n volver¨¢n a usar el energ¨¦tico que es considerado como el m¨¢s contaminante de todos. El plan de la Uni¨®n Europea busca anticiparse a un mayor deterioro del suministro de gas, o incluso un corte total, de cara al pr¨®ximo invierno. La meta es reducir en un 15% el consumo entre el primero de agosto y el 31 de marzo de 2023. En agosto, precisamente, entrar¨¢ a regir la prohibici¨®n de importaciones del carb¨®n ruso en los pa¨ªses de la organizaci¨®n como una de las sanciones a Rusia.

¡°Colombia tiene unas reservas de m¨¢s de 50 a?os de carb¨®n con un alto contenido calor¨ªfico, bajo en azufre. Es un carb¨®n de la m¨¢s alta calidad que est¨¢ siendo apetecido en el mercado internacional¡±, destac¨® el ministro de minas y energ¨ªa, Diego Mesa, en el lanzamiento de la ronda minera en el mes de abril. El proceso adjudicar¨¢ dos ¨¢reas que suman m¨¢s de 9.000 hect¨¢reas para la explotaci¨®n de carb¨®n t¨¦rmico en el departamento del Cesar, en el norte del pa¨ªs.

El carb¨®n es el mineral que m¨¢s aporta a la econom¨ªa nacional. Es el segundo producto de exportaci¨®n (solo el 8% es de consumo interno), representa m¨¢s del 80% de las regal¨ªas mineras y genera m¨¢s de 130.000 empleos. Los departamentos de La Guajira y Cesar, ubicados en la costa Caribe, son los principales productores. Parad¨®jicamente, ambos registran niveles de pobreza multidimensional superiores al promedio nacional. Pa¨ªses como Alemania y Polonia han expresado su inter¨¦s en un aumento de exportaciones desde Colombia.

El presidente electo, Gustavo Petro, se ha declarado defensor de una ¡°econom¨ªa para la vida¡± que proteja el agua y el aire. Aunque ha descartado el cierre de minas de carb¨®n en producci¨®n, advierte que el pa¨ªs se debe preparar para un cambio en el escenario mundial en los pr¨®ximos 10 a?os. ¡°Ahora, toca abandonar la econom¨ªa de f¨®siles, desligarnos del petr¨®leo, carb¨®n y gas, y cimentar el desarrollo sobre la base de la producci¨®n y el conocimiento¡±, expres¨® en entrevista con EL PA?S luego de ser elegido.

En una visita antes de la segunda vuelta presidencial a una mina de Paipa (Boyac¨¢), les asegur¨® a los mineros que su trabajo no estar¨ªa en riesgo. ¡°Lo que hay que transitar es hacia un modelo en el que los mineros sean propietarios de energ¨ªas el¨¦ctricas¡±, les dijo. ¡°La transici¨®n energ¨¦tica ser¨¢ paulatina, el Estado comprar¨¢ el carb¨®n porque este decae en el mundo e ir¨¢ capacitando a los mineros en nuevas energ¨ªas¡±, explic¨® en su momento Susana Muhamad, ministra designada de medio ambiente. A¨²n no est¨¢ claro c¨®mo se financiar¨ªa una eventual compra de carb¨®n por parte del gobierno. Lo que s¨ª ha explicado el pr¨®ximo presidente es que los ingresos de los combustibles f¨®siles ser¨ªan reemplazados gradualmente por el turismo y la reactivaci¨®n del campo.

Tampoco est¨¢ del todo despejada la posible ampliaci¨®n de minas de carb¨®n o de nuevas inversiones que, a su vez, suba las exportaciones. ¡°Ser¨¢ fundamental tener un mensaje claro del nuevo gobierno frente a la producci¨®n de carb¨®n. Las inversiones en miner¨ªa son de largo plazo por lo que la incertidumbre no ayuda en estos procesos¡±, afirma la Asociaci¨®n Colombiana de Miner¨ªa (ACM). ¡°Se debe establecer una hoja de ruta que le ofrezca seguridad a los inversionistas y permita aprovechar la coyuntura actual para transformarla en m¨¢s impuestos, regal¨ªas y empleo¡±, precisa el gremio.

El impacto para el medio ambiente

La guerra de Rusia en Ucrania no solo ha causado la muerte de m¨¢s de 5.000 civiles seg¨²n la ONU, la migraci¨®n humana m¨¢s grande desde la Segunda Guerra Mundial, la profundizaci¨®n de la pobreza y el incremento mundial del costo de vida y los alimentos. Tambi¨¦n est¨¢ provocando el retroceso de los avances que ha logrado hasta ahora la Uni¨®n Europea en la reducci¨®n de emisiones de carbono, una meta fijada en el 55% para el 2030.

¡°Desplazar el gas implica la emisi¨®n del doble de toneladas de di¨®xido de carbono. Por cada gigavatio-hora de energ¨ªa que se genera con gas se producen 490 toneladas, mientras que con el carb¨®n se incrementa a 820 toneladas. El carb¨®n t¨¦rmico es el energ¨¦tico m¨¢s contaminante que existe¡±, explica Camilo Prieto, profesor de cambio clim¨¢tico de la Universidad Javeriana de Bogot¨¢.

Aunque la mayor parte del carb¨®n que se produce en Colombia se exporta, Prieto, de 45 a?os, considera que ¡°el carb¨®n que se quema en Alemania, China o en cualquier otra parte del mundo nos afecta a todos. El m¨ªnimo de responsabilidad que debe tener el pa¨ªs es que sea gravado con el impuesto al carbono¡±. Las empresas del sector est¨¢n excluidas de este cobro actualmente. Por su parte, el gremio de las compa?¨ªas mineras sostiene que ¡°el objetivo es implementar cada vez m¨¢s tecnolog¨ªas de captura de carbono para contribuir con la reducci¨®n de emisiones sin afectar la seguridad energ¨¦tica¡±.

Adem¨¢s de acelerar el calentamiento global, el uso del carb¨®n influye en la contaminaci¨®n del aire, uno de los mayores riesgos ambientales para la salud humana. Es la causa de siete millones de muertes prematuras al a?o, estima la Organizaci¨®n Mundial de la Salud. En Colombia hay avances en transici¨®n energ¨¦tica para reducir fuentes como el carb¨®n. La capacidad instalada de energ¨ªa solar y e¨®lica se ha multiplicado por 25 veces desde el 2018, aumentando su participaci¨®n del 1% al 6% en la matriz el¨¦ctrica. En Europa, las energ¨ªas renovables superaron por primera vez la generaci¨®n con combustibles f¨®siles en 2020.

El futuro del carb¨®n exigir¨¢ un an¨¢lisis desde m¨²ltiples ¨¢ngulos: la contribuci¨®n actual del mineral en la econom¨ªa, la generaci¨®n de empleo y el respaldo al suministro de energ¨ªa, la urgencia europea por reemplazar el flujo de gas por otros combustibles y la necesidad inaplazable de contribuir a la mitigaci¨®n del cambio clim¨¢tico. Una discusi¨®n que puede ser de largo aliento y de alta temperatura, seg¨²n los expertos.

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