Gerardo Vega, de la lucha campesina al Gobierno: ¡°El 50% de los asesinatos de l¨ªderes sociales est¨¢n asociados a la tierra¡±
El nuevo director de la Agencia Nacional de Tierras considera que para frenar las invasiones hay que dialogar y buscar acuerdos
El primer cambio real del Gobierno de Gustavo Petro es haber cambiado de caras. No la suya, que lleva d¨¦cadas protagonizando de alguna forma la pol¨ªtica nacional, pero s¨ª la de decenas de altos y medios cargos que empiezan estas semanas a tomar posesi¨®n de edificios p¨²blicos en los que nunca antes hab¨ªan puesto un pie. Gerardo Vega (Huila, 1960) es uno de ellos. Hoy dirige la Agencia Nacional de Tierras despu¨¦s de a?os del otro lado. Exguerrillero del Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n (EPL), una guerrilla marxista-leninista que firm¨® la paz en 1990, y m¨¢s tarde abogado de cientos de campesinos y desplazados, ha dedicado su vida a luchar por un reparto de tierra m¨¢s justo. Una labor que ahora le toca cumplir desde el poder.
En medio de debates sobre la reforma tributaria o la paz con el ELN, el problema eterno de la tierra en Colombia se abre paso a la fuerza. Desde la toma de posesi¨®n del nuevo presidente, las invasiones de tierras de campesinos y desplazados se han multiplicado por todo el pa¨ªs, exigiendo al Gobierno que cumpla lo prometido. ¡°Hubo un atraso y una falta de voluntad pol¨ªtica de los ¨²ltimos 50 a?os para atender el tema agrario. Hay un problema acumulado, pero el presidente Petro est¨¢ en la necesidad de solucionarlo¡±, explica Vega en entrevista con EL PA?S desde su despacho.
?l ha sido representante legal de decenas de invasores durante a?os, para los que ahora busca una salida. Vega diferencia entre los campesinos que llevan 10 o 15 a?os ocupando y trabajando una tierra, para los que pide un ¡°reconocimiento del Estado¡± como habitantes de esos predios, y las nuevas invasiones, para las que le pide di¨¢logo. ¡°Hay que sentarse a hablar con ellos. Se pueden hacer acuerdos¡±. Hace un par de semanas, varios ministros del Gobierno, encabezados por la vicepresidenta Francia M¨¢rquez, advirtieron a los nuevos ocupadores de que si no abandonaban las tierras en 48 horas, ser¨ªan desalojados por la fuerza p¨²blica. Un ultim¨¢tum que podr¨ªa haber hecho cualquier Gobierno conservador, pero que por ahora no se ha llevado a cabo. Vega insiste en que, antes de tomar cualquier medida, se est¨¢n celebrando ¡°mesas de conversaci¨®n¡±.
Pregunta. Usted particip¨® hace d¨¦cadas en tomas de tierra. ?Ha cambiado su visi¨®n en estos a?os?
Respuesta. Yo fui abogado de ocupantes de tierra, llev¨¦ procesos judiciales, muchos. Y luego trabaj¨¦ en la restituci¨®n de tierras porque es una necesidad y una reivindicaci¨®n. Que promov¨ª o que he sido parte [de las invasiones] es lo que han dicho para desvirtuar la labor que hacemos en defensa de los derechos humanos y de las v¨ªctimas desplazadas.
P. Los campesinos y los desplazados lo que quieren ahora son resultados r¨¢pidos. ?Qu¨¦ es lo primero que se puede ofrecer?
R. Lo primero que hay que hacer es el reconocimiento de una gente que lleva 10 a?os, 15 a?os all¨ª, y que produce alimentos en esas tierras. Luego buscar un tr¨¢mite ¨¢gil, simplificado en la Agencia, que permita que puedan demandar tener tierras sin un tr¨¢mite tan largo. Y lo segundo, hay que facilitar que se entregue r¨¢pido a trav¨¦s de cualquier mecanismo. Uno puede ser arrendar los predios mientras se hace la formalizaci¨®n.
P. La ministra y el presidente hablan de comprar tierras.
R. Lo importante es comprar tierras que sirvan para producir alimentos. Los que se oponen han dicho que la comunidad ind¨ªgena y la comunidad de negritudes tienen en un tercio del pa¨ªs y no hicieron nada. Eso no es cierto. Hoy en manos de las comunidades ind¨ªgenas y afro hay 2.800.000 hect¨¢reas, menos de un 2% del total. La parte que tienen los resguardos son zonas de protecci¨®n, son selva, bosques, afluentes de agua que sirven para proteger el planeta. Lo que han hecho es favorecer el planeta, el medio ambiente.
P. ?Qui¨¦nes son los principales enemigos de la reforma agraria?
R. Desde organizaciones ilegales en el pasado que han atentado contra la vida de reclamantes de tierras, a grupos paramilitares, grupos de extrema derecha, en un periodo un sector del empresariado que se opon¨ªan a ese tipo de reforma, partidos pol¨ªticos... Ese es un pasado reciente. Hoy hay una composici¨®n pol¨ªtica del Congreso diferente. Esperemos que esa reforma que avance.
P. Como abogado represent¨® legalmente a campesinos y desplazados contra empresarios ganaderos y bananeros. ?Ha sentido rechazo al asumir el cargo?
R. Hasta ahora no ha habido ninguna manifestaci¨®n p¨²blica. Lo que tienen que tener tambi¨¦n es el convencimiento de que aqu¨ª no se va a expropiar a nadie.
P. ?Le genera alg¨²n tipo de conflicto de inter¨¦s el cargo?
R. No, porque he estado en el tema de restituci¨®n de tierras, que es un acto de justicia, es un acto justiciero. A los que le quitaron la tierra, a los que se la robaron, se la usurparon, pues que se la devuelvan. Luego est¨¢n los que no tienen tierra y buscan acceder a ella, eso es un tema de reforma agraria. El acuerdo de La Habana dice que se entregar¨¢n tres millones de hect¨¢reas para personas que no tienen y siete millones de hect¨¢reas de formalizaci¨®n.
P. ?C¨®mo se puede avanzar en la restituci¨®n de tierras?
R. Tiene que cesar el asesinato contra l¨ªderes sociales de reclamantes de tierras. El 50% de los asesinatos de l¨ªderes sociales est¨¢n en esas causas asociadas a la tierra. Para que la gente reclame tiene que tener las garant¨ªas. El Estado esperaba 360.000 solicitudes, van 130.000 aproximadamente. Hay que motivar y facilitar que la gente pueda reclamar. Y cuando no hay condiciones de seguridad para restituir una tierra, pues se debe compensar en dinero o compensar en especie. La gente no se puede quedar eternamente esperando a que haya condiciones de seguridad.
P. Colombia tampoco tiene un catastro fiable. ?Por qu¨¦?
R. El pa¨ªs debe saber para qu¨¦ sirve ese 65% del sector rural que no est¨¢ formalizado. En el pasado no ha habido inter¨¦s en legalizar y formalizar el desorden. Pero un Estado viable o un Estado serio tiene que saber qui¨¦nes habitan su territorio, qu¨¦ propietarios tiene y para qu¨¦ sirve la tierra. Si no, ?c¨®mo vas a planear?
P. ?Alguna vez hab¨ªa imaginado llegar hasta aqu¨ª?
R. No estaba en el prop¨®sito de decidir. Pero formar parte de un Gobierno como este s¨ª me gusta. He trabajado en este tema mucho tiempo atr¨¢s, en la otra orilla. Si es ¨²til esa experiencia, lo hago aqu¨ª con el mayor gusto.
P. Se hace llamar el Gobierno del cambio.
R. El solo hecho de que la gente hubiera votado este Gobierno y este programa es un cambio de actitud. Esa gran mayor¨ªa de poblaci¨®n que no hab¨ªa participado institucionalmente, que hab¨ªa estado excluida, pues estaba ah¨ª presente el d¨ªa de la posesi¨®n. Realmente impresionante
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