Un enemigo a destruir

La ministra de salud, Carolina Corcho, y el presidente Petro han hecho bien la tarea: convirtieron a las EPS en el enemigo que debe ser destruido por el bien de los colombianos, cual Superman luchando contra el mal¨¦volo Lex Luthor, quien debe ser destruido para la salvaci¨®n del planeta.

En el mundo sin matices de solo blanco y negro que se describe desde el Gobierno Nacional, la oscuridad est¨¢ representada por el actual sistema de salud y las EPS, la luz y la claridad es el sacrosanto documento radicado ante el congreso con una reforma a la salud que no admite cambios, ni modificaciones, sino que debe entenderse como la tabla de salvaci¨®n para un sector que sin duda presenta sus problemas.

As¨ª como el presidente habla de ¡°relato period¨ªstico¡± para se?alar que hay historias que son creadas por los medios de comunicaci¨®n ¨²nicamente para hacerle da?o, podr¨ªamos hablar de ¡°relato de gobierno¡± para referirnos a las verdades a medias que cuentan desde las altas esferas del gobierno Petro para convencer a sus mayor¨ªas sobre determinados asuntos.

Un ¡°relato de gobierno¡± ser¨ªa ese sobre el cual se ha construido la urgencia de sacar adelante la reforma a la salud para acabar con las perversas EPS culpables de todos los males que aquejan al sistema de aseguramiento que cobija a los colombianos, dejando a las EPS como los ¨²nicos actores del mismo. Como si nadie o nada m¨¢s interviniera en el proceso de garantizarle la salud a los pacientes. Como si todo, absolutamente todo, tuviera su g¨¦nesis ah¨ª.

Sin embargo, en ese ¡°relato de gobierno¡± poco hablan de la responsabilidad que tienen los gobiernos locales sobre el desastroso sistema de hospitales y centros de salud que deber¨ªa atender con los mejores est¨¢ndares a los pacientes. El ¡°relato de gobierno¡± poco dice que gobernadores de departamentos como C¨®rdoba, Choc¨®, La Guajira, Boyac¨¢, Amazonas y muchos m¨¢s han sido responsables de no modernizar, ni ampliar la red p¨²blica de centros de salud para as¨ª tener mejores hospitales con mejores condiciones para atender a los pacientes. ?O acaso si en La Guajira o en el Guaviare hubiese un poderoso hospital con equipos de ¨²ltima generaci¨®n y m¨¦dicos de diversas especialidades habr¨ªa necesidad de estar desplazando pacientes a otros departamentos? La respuesta evidente es NO, pero para el ¡°relato de gobierno¡± es m¨¢s f¨¢cil echarle la culpa a las EPS y decir que es por ellas que hay problemas con la atenci¨®n.

En el ¡°relato de gobierno¡± solo hay buenos y malos. Los buenos son Petro y sus superamigos, los dem¨¢s as¨ª hagan una cr¨ªtica v¨¢lida y con argumentos quedan etiquetados como villanos que deben ser destruidos o silenciados.

Es as¨ª como las EPS, los Fondos Privados de Pensiones y los empresarios hoy son los supervillanos que, gracias a los superpoderes de las reformas que empiezan a hacer tr¨¢mite en el Congreso, terminar¨¢n por ser vencidos.

Pero poco se dice que de los fondos privados uno se puede salir a Colpensiones cuando quiera. Que los empresarios, en su mayor¨ªa, no son los responsables de tanto trabajo informal y que las EPS, si se modernizaran, podr¨ªan acabar de tajo con la pesadilla de las ¡°autorizaciones¡± que son lo m¨¢s detestable de esa parte del sistema de salud. Pero es m¨¢s f¨¢cil crear enemigos para destruir.

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