Carolina Corcho: ¡°No es que queramos eliminar las EPS, es que ellas mismas se han eliminado¡±
La ministra de Salud presenta la visi¨®n de la reforma. Anuncia que tendr¨¢ un primer borrador de ella a fines de octubre
Carolina Corcho (Zaragoza, 39 a?os) es una gran cr¨ªtica del sistema de salud colombiano. Como ministra ha enfocado su discurso y sus energ¨ªas en preparar una gran reforma, que sigue pendiente. En esta entrevista explica su evaluaci¨®n del sector y la visi¨®n general de esa reforma.
Pregunta. ?C¨®mo se ha sentido en este nuevo rol, en un pa¨ªs pospandemia?
Respuesta. Este es un Gobierno muy distinto al anterior y eso hace que las cosas sean m¨¢s dif¨ªciles. Hay mucha ansiedad, mucha expectativa de cambio. A este Gobierno se le est¨¢ exigiendo en un mes y medio lo que no se le ha exigido a ning¨²n Gobierno en el mundo en los primeros seis meses, pero uno entiende que la esperanza nos pone en un nivel de exigencia enorme.
P. Usted es psiquiatra, ?C¨®mo est¨¢ la salud mental de Colombia?
R. Est¨¢ mal. Es un pa¨ªs donde un 70% de la poblaci¨®n vive en condiciones de pobreza, de vulnerabilidad econ¨®mica, sin estabilidad laboral, con crisis de hambre, la salud mental no puede estar bien. La conducta suicida, la ansiedad y la depresi¨®n han aumentado. La pandemia lo visibiliz¨® porque el encierro nos enfrent¨® a la familia. La serie de duelos o las carencias que se vivieron evidenciaron esa mala situaci¨®n de la salud mental.
P. ?C¨®mo recibi¨® el sistema de salud?
R. En una situaci¨®n muy compleja tras la pandemia, pero adem¨¢s es profundamente inequitativo, con una de las tasas de mortalidad materna m¨¢s alta de los pa¨ªses de la OCDE. Tiene una crisis financiera profunda, deudas incalculables, un plan de vacunaci¨®n rezagado y unas EPS en quiebra. 14 de las 30 que hay est¨¢n en proceso de liquidaci¨®n.
P. ?Por eso las quiere eliminar?
R. No es que las queramos eliminar, es que se han estado eliminando. El Ministerio ha bajado los est¨¢ndares para que cumplan los requisitos y solo cuatro cumplen con indicadores menores a lo que les exigir¨ªa cualquier otro pa¨ªs, seg¨²n datos de la Superintendencia de Salud. En los ¨²ltimos a?os, ha prorrogado dos veces los plazos para que logren las exigencias de cumplimiento en una pol¨ªtica de prorrogar hasta el infinito. Un Estado no puede acomodar la ley porque las EPS cuidan la vida. Tambi¨¦n manejan recursos p¨²blicos, casi 70 billones de pesos al a?o. Y 1.800.000 colombianos quedaron, luego de la pandemia, sin afiliaci¨®n al sistema.
P. Si hay 1.800.000 colombianos sin salud, ?por qu¨¦ la gente tuvo tratamiento en la pandemia e incluso sobran vacunas?
R. Porque estar afiliado no significa tener salud. Los ni?os y ni?as de la Guajira que murieron por desnutrici¨®n estaban afiliados y no recibieron atenci¨®n en salud. El plan de vacunaci¨®n del Gobierno anterior ten¨ªa la meta de lograr que el 70% de los colombianos estuvi¨¦ramos vacunados en diciembre. Todav¨ªa no se ha logrado en m¨¢s de 400 municipios peque?os.
P. ?Por qu¨¦ escuchamos constantemente que sobran vacunas y llamados a la gente a que se vacune?
R. Porque hace varios meses se le dijo al pa¨ªs que hay una reactivaci¨®n econ¨®mica y eso cal¨®, y porque Colombia desmont¨® hace 3 d¨¦cadas su sistema de salud p¨²blica, de atenci¨®n primaria. No hay una pol¨ªtica de Estado para eso. El trabajo que hay con las comunidades es a iniciativa de un alcalde, un gobernador, un hospital. Se habr¨ªan podido salvar muchas las vidas si ese sistema hubiera llegado a los 419 municipios que no alcanzaron la meta de vacunaci¨®n.
P. ?Y las campa?as invitando a vacunarse?
R. Son parte, pero no son todo lo que se necesita. No basta con decirle a alguien que es alcoh¨®lico que no tome, as¨ª no cambian los seres humanos. Hay que trabajar con la comunidad, con sus sistemas de creencia, con trabajo comunitario y promotores de salud. Eso no ha existido en Colombia en las ¨²ltimas d¨¦cadas.
P. En Venezuela existen las misiones salud, que hacen trabajo de casa en casa ?Eso es lo que quisiera?
R. Misiones de salud no solo hay Venezuela, tambi¨¦n en Holanda o Alemania. Desde que hicimos el anuncio han aparecido desde el mundo entero a decir ¡®qu¨¦ buena iniciativa¡¯ y es la vanguardia de la salud del mundo. Vamos a hacer un programa de atenci¨®n primaria para llegar no solo a la casa, sino a la escuela, a la cancha en la que juega el ni?o. Equipos interdisciplinarios de una auxiliar de enfermer¨ªa y un promotor social ir¨¢n a medir a los ni?os. Si detectan desnutrici¨®n, lo remiten al m¨¦dico.
P. Eso ya existe
R. Pero no en el nivel que deber¨ªa ?A qui¨¦nes llaman cada mes a decirles qu¨¦ ex¨¢menes les faltan? El sistema debe poner recursos para que se haga con los ni?os. Se les ha entregado plata a las EPS y no lo han hecho, entonces lo tiene que hacer el Estado a trav¨¦s de sus hospitales. Con los recursos del sistema p¨²blico, financiado por todos los colombianos, contratan un m¨¦dico, una nutricionista, una enfermera y hacen los recorridos por el territorio.
P. ?C¨®mo ser¨ªa la reforma?
R. Hoy tenemos un esquema de salud p¨²blica, intermediada por particulares y con prestaci¨®n de servicios p¨²blica y privada. El Estado recauda aproximadamente 70 billones de pesos de los colombianos, se lo entrega a las EPS v¨ªa la entidad llamada ADRESS y ellas contratan a las cl¨ªnicas y los hospitales. Es muy grave que cuando la plata sale de ADRESS se perdi¨® el control. Por eso no sabemos cu¨¢nto le deben las EPS a las cl¨ªnicas y hospitales, y muchas est¨¢n en quiebra, hay trabajos mal pagos y una intermediaci¨®n supremamente costosa que empez¨® con 200 intermediarios y va en menos de 30. Cada vez que se liquida una EPS es una tragedia porque dejan miles de personas sin aseguramiento, miles de deudas y no aportan un peso porque el riesgo lo asume el Estado. Eso no tiene sentido, no pasa en ning¨²n sistema de salud del mundo.
Tenemos que propender porque se pague directamente a la cl¨ªnica. Eso fortalece el sector privado en salud, las cl¨ªnicas privadas que est¨¢n quebradas. Si el Estado paga directamente, podemos formalizar los trabajadores de la salud y hacer unas contrataciones dignas para hacer un programa de atenci¨®n primaria en salud.
P. ?Qui¨¦n administrar¨ªa los recursos de la salud? ?Las cl¨ªnicas y los hospitales?
R. A las EPS les estamos pagando entre el 8 y 10% de los recursos de la salud, 7 billones de pesos, pero ?qu¨¦ valor agreg¨®? Si administro tengo que tener un mecanismo de reaseguro, para dar respaldo a las cl¨ªnicas y a los hospitales si me quiebro, pero se han convertido en una manera de quebrar a los prestadores de servicios de salud.
P. ?C¨®mo evitar que un pol¨ªtico monte un hospital para recibir directamente plata del Estado?
R. Ese problema ya los tenemos porque el pol¨ªtico monta una EPS bolsillo y es peor porque recoge recursos gratis, no presta el servicio, contrata a su propia cl¨ªnica, se paga a s¨ª mismo y quiebra a los otros.
P. ?Cree que el sistema de salud actual no funciona?
R. Est¨¢ cooptado por el clientelismo y empeora porque el Estado no tiene un mecanismo para controlar los recursos cuando el ADRESS gira. Esa opacidad es un caldo de cultivo para el clientelismo y la corrupci¨®n. En nuestra propuesta, el fondo tendr¨ªa un sistema de informaci¨®n p¨²blica.
No estamos diciendo que se va a acabar el sistema. Lo que dicen los datos es que la intermediaci¨®n no tiene sentido cuando el Estado pierde el control de los recursos p¨²blicos, las cl¨ªnicas y hospitales est¨¢n en quiebra, y tenemos m¨¢s de 800.000 quejas y reclamos por inatenci¨®n en salud. Las cl¨ªnicas y hospitales que funcionan se van a mantener.
P. ?Se acaban las cuatro EPS que usted dice que funcionan?
R. No pueden quedar solo cuatro, porque ser¨ªa un oligopolio. La pandemia demostr¨® lo dif¨ªcil de manejar oligopolios: la Organizaci¨®n Mundial del Comercio no pudo liberar las patentes de la vacuna para vacunar a millones de personas porque un oligopolio de transnacionales farmac¨¦uticas coopt¨® la Organizaci¨®n Mundial de la Salud. Por eso hay que hacer la reforma.
P. ?Qu¨¦ funciona bien en el sistema?
R. Algunos hospitales, los que no tiene el clientelismo, funcionan muy bien. La Fundaci¨®n Santa Fe de Bogot¨¢, el Hospital Pablo Tob¨®n Uribe de Medell¨ªn. Tenemos una medicina muy avanzada, entre otras cosas porque la violencia ha llevado a que tengamos los mejores cirujanos en trauma. Funcionan los trasplantes, los aportes de los colombianos, tenemos un buen gasto p¨²blico, aunque podr¨ªa ser m¨¢s alto.
P. ?C¨®mo se entiende que estemos mal si ya no hay que vender el carro, la casa y la sala cuando se sufre de una enfermedad catastr¨®fica?
R. Hay que comparar categor¨ªas comparables. Antes de la ley 100 la financiaci¨®n del sistema no era ni el 3% del PIB y ahora es entre el 7% y el 8%. Con ese aumento, tiene que haber m¨¢s cobertura. Adem¨¢s, en las d¨¦cadas de los 70 y los 80 se mor¨ªa m¨¢s gente porque la ciencia hab¨ªa avanzado menos. Este a?o iban 800.000 quejas puestas en la Superintendencia de Salud.
P. ?Con este cambio, eso no va a pasar m¨¢s?
El cambio es muy sencillo, es que la plata llegue optimizada, sin intermediarios, porque los recursos son finitos. Lo har¨ªa m¨¢s expedito y con un manejo transparente, con un sistema p¨²blico de informaci¨®n. Evitar la integraci¨®n vertical de un intermediario, que monte su cl¨ªnica privada, con sus m¨¦dicos y enfermeras, y se contrate a s¨ª mismo. Eso no est¨¢ bien. Esperamos presentar un borrador de reforma la ¨²ltima semana de octubre para que se discuta con tranquilidad, se dialogue, se mejore, se encuentren vac¨ªos y se aporte. Queremos lo mejor para este pa¨ªs de coraz¨®n y queremos que eso salga muy bien.
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