Ojo con los disparos al helic¨®ptero

M¨¢s all¨¢ de tantas inquietudes que quedaron sembradas en nuestra mente y nuestro coraz¨®n luego del lamentable e inexplicable episodio de los soldados disfrazados de grupo armado ilegal amenazando a los habitantes de una lejan¨ªsima vereda en el departamento de C¨®rdoba, urge que las autoridades, Fiscal¨ªa y Ej¨¦rcito, esclarezcan qu¨¦ fue lo que pas¨® con los disparos que atentaron contra un helic¨®ptero del Ej¨¦rcito en el que se movilizaban los integrantes de una comisi¨®n de la Fiscal¨ªa, la Procuradur¨ªa y la Defensor¨ªa del Pueblo que buscaban llegar al lugar para investigar lo acontecido con ese grupo de soldados.

El video que se conoci¨® del momento en que el helic¨®ptero empieza a hacer la aproximaci¨®n para aterrizar en la zona donde la unidad de soldados cometi¨® los actos imperdonables es la primera pista para tratar de llegar a una conclusi¨®n que, repito, debe ser urgente, pero garantizada por elementos t¨¦cnicos. Seg¨²n se ve en las im¨¢genes, los disparos contra la aeronave fueron hechos a muy pocos metros del sitio que hab¨ªa sido acondicionado por miembros del mismo Ej¨¦rcito para realizar el aterrizaje. Es decir, a unas decenas de metros del lugar en donde se encontraban los soldados estaba, supuestamente, el Clan del Golfo disparando al helic¨®ptero. ?Por qu¨¦ no hubo reacci¨®n del Ej¨¦rcito a este claro ataque?

Este fin de semana el Clan del Golfo, a trav¨¦s de un panfleto, cuya autenticidad est¨¢ en proceso de ser verificada, asegur¨® que nada tuvo que ver con los disparos al helic¨®ptero. Hecho que contrasta con el muy veloz anuncio del comandante del Ej¨¦rcito, general Luis Mauricio Ospina, quien en cuesti¨®n de horas y en rueda de prensa se?al¨® a ese grupo criminal como responsable de los disparos a la aeronave.

Es claro que a un grupo ilegal como el Clan del Golfo no se le debe creer todo a pie juntillas. Sin embargo, no son solo los miembros de esa organizaci¨®n armada quienes niegan la responsabilidad en esos hechos, sino tambi¨¦n campesinos de la zona afirmaron en d¨ªas pasados a medios de comunicaci¨®n de la regi¨®n que no es verdad que un grupo armado ilegal fue el que atac¨® al helic¨®ptero con r¨¢fagas de fusil. ¡°Eso fue un montaje para sabotear a los organismos que llegaban en el helic¨®ptero¡±, afirm¨® uno de los habitantes de la vereda a los micr¨®fonos de Caracol Radio.

El tema de los disparos al helic¨®ptero no es de poca monta si se tiene en cuenta que de demostrarse que hubo fuego amigo, es decir disparos del Ej¨¦rcito hacia una aeronave de esa misma fuerza, quedar¨ªa en evidencia una grave ruptura institucional en la que un grupo ¡°disidente¡± no respeta al mando institucional, al punto de atentar contra la vida de sus propios compa?eros, as¨ª como de integrantes de organismos de investigaci¨®n del Estado, como lo eran los 20 ocupantes de dicho helic¨®ptero.

El mismo fiscal general, Francisco Barbosa, dijo la semana pasada que no se descarta ninguna hip¨®tesis respecto al atentado contra la comisi¨®n de los entes investigadores. Hace bien el fiscal. Algo huele mal en todo ese episodio de los soldados sembrando terror en zonas apartadas del pa¨ªs. Y ese hedor se hace a¨²n m¨¢s insoportable cuando los hechos ocurren a pocas semanas de las elecciones regionales. ?Hay unidades del Ej¨¦rcito jugando a la pol¨ªtica? ?Hay quienes desde el alto mando quieren ocultar tan grave, grav¨ªsima, situaci¨®n?

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