La JEP acepta al exparamilitar Salvatore Mancuso bajo su jurisdicci¨®n

El exjefe paramilitar Salvatore Mancuso ha sido admitido este viernes en la Jurisdicci¨®n Especial para la Paz (JEP), el sistema de justicia transicional creado en los acuerdos de paz con las extintas FARC para procesar los casos graves de las conductas criminales m¨¢s difundidas durante el conflicto armado. ¡°Se pudo ver a una persona con una actitud distinta a la que los colombianos y las colombianas vieron en el Congreso de la Rep¨²blica en el a?o 2004. [Est¨¢] dispuesto a dignificar a las v¨ªctimas, a reconocer su agencia y a ofrecerles una verdad plena¡±, ha remarcado la magistrada Heydi Patricia Baldosea, encargada de leer la decisi¨®n.

La JEP ha informado que admitir¨¢ a Mancuso en calidad de ¡°sujeto incorporado funcional y materialmente a la fuerza p¨²blica¡± entre 1989 y 2004. Esto significa que el tribunal se enfocar¨¢ en su rol como ¡°bisagra¡± entre los paramilitares y los altos mandos de la fuerza p¨²blica en el enfrentamiento con la guerrilla. Seg¨²n explic¨® la magistrada Mar¨ªa del Pilar Valencia, Mancuso permiti¨® que la fuerza p¨²blica ¡°incrementara sus resultados operacionales¡± y que las estructuras paramilitares se apoderaran de territorios estrat¨¦gicos.

La admisi¨®n de Mancuso dentro de la JEP no significa que quede en libertad porque no le quita jurisdicci¨®n a Justicia y Paz, el sistema transicional creado en 2005 para llevar los casos de los desmovilizados de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). ¡°Es Justicia y Paz quien debe resolver sobre la libertad de Salvatore Mancuso G¨®mez¡±, precis¨® el magistrado Pedro D¨ªaz Romero en una rueda de prensa posterior a la decisi¨®n de este viernes. La JEP complementar¨¢ los procesos del otro tribunal, que se enfoca en el car¨¢cter de Mancuso como paramilitar y no en los v¨ªnculos con el Estado.

La divisi¨®n de competencias entre la JEP y Justicia y Paz fue motivo de desacuerdo entre los magistrados. Valencia, en minor¨ªa, consider¨® en un salvamento que las competencias deber¨ªan quedar centralizadas en la JEP para no fragmentar la investigaci¨®n y no limitar las posibilidades de otorgar beneficios a la persona sometida.

El tribunal ha considerado que el exl¨ªder paramilitar, que sigui¨® la audiencia por videollamada desde Estados Unidos, ha mostrado su capacidad para brindar informaci¨®n privilegiada y novedosa. ¡°Pudo evidenciarse que tiene conocimiento de diferentes repertorios de violencia desplegados conjuntamente con l¨ªderes de la fuerza p¨²blica¡±, ha declarado el tribunal. Se han compulsado copias a la Fiscal¨ªa y la Comisi¨®n de Acusaci¨®n e Investigaci¨®n de la C¨¢mara de Representantes para que definan si investigan a m¨¢s de 300 personas que mencion¨® el exjefe paramilitar.

La justicia tambi¨¦n valor¨® que Mancuso hubiera reconocido su responsabilidad y mostrado voluntad de participar en acciones de reparaci¨®n. ¡°Hubo reconocimientos taxativos sobre los repertorios de violencia desplegados y sobre la estigmatizaci¨®n que sufrieron comunidades campesinas, l¨ªderes pol¨ªticos, pueblos ¨¦tnicos, mujeres y pueblo LGBTI¡±, han destacado los magistrados.

Beneficios

¡°Puede causar extra?eza pensar en qu¨¦ beneficio tiene [Mancuso] de ingresar a la JEP. Pero el se?or Mancuso ha sido muy claro en las audiencias en que ¨¦l desea contribuir a la reparaci¨®n de las v¨ªctimas en un proceso restaurativo, que es nuestra diferencia con Justicia y Paz. (...) Y que sus aportes van a significar mucho en sus posibilidades de reincorporarse a la sociedad¡±, respondi¨® Romero ante la consulta de una periodista sobre las motivaciones del exparamilitar para ingresar a la JEP.

Mancuso, un hacendado de Monter¨ªa (C¨®rdoba) convertido en se?or de la guerra, est¨¢ acusado de dirigir 139 masacres en las que fueron asesinadas 800 personas. Detenido en Estados Unidos, en mayo profundiz¨® sobre los nexos entre los paramilitares y el Estado como parte de su estrategia para acceder a los beneficios judiciales de la JEP. ¡°[El expresidente ?lvaro] Uribe lo que hizo fue quitarle el esquema de seguridad y nosotros lo matamos¡±, coment¨® en referencia al asesinato, en 2003, del entonces alcalde de El Roble, Eudaldo D¨ªaz. ¡°Nos entregaban listados y entonces ¨ªbamos y golpe¨¢bamos a las casas y los mat¨¢bamos porque nos dec¨ªan que eran guerrilleros¡±, dijo sobre su rol como jefe de un grupo que integraban polic¨ªas y miembros del Ej¨¦rcito.

En agosto, el presidente Gustavo Petro design¨® a Mancuso como gestor de paz. ¡°El proceso entre el Gobierno de Uribe y los paramilitares a¨²n no ha terminado, a¨²n no se sabe toda la verdad¡±, justific¨®. Se trata de una figura pensada para gestionar acuerdos con grupos ilegales, y puede implicar el levantamiento temporal de ¨®rdenes de captura. No obstante, a¨²n no hay claridad sobre la extradici¨®n del exl¨ªder paramilitar, que ha expresado en varias ocasiones su intenci¨®n de regresar al pa¨ªs. El fiscal general, Francisco Barbosa, ha asegurado que no levantar¨¢ las ¨®rdenes de captura de miembros de grupos no reconocidos como pol¨ªticos hasta que el Congreso apruebe una ley de sometimiento a la justicia.

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