La plata de la paz vuelve a las regiones

Despu¨¦s del esc¨¢ndalo sobre el presunto saqueo de dineros de la paz que estall¨® en los ¨²ltimos meses de la administraci¨®n de Iv¨¢n Duque, el Gobierno de Gustavo Petro fij¨® nuevas reglas para asignar recursos de las regal¨ªas a los municipios m¨¢s golpeados por el conflicto armado en Colombia. Se trata del 7% de la bolsa total de regal¨ªas provenientes de la extracci¨®n de minerales e hidrocarburos, un porcentaje destinado a 170 municipios priorizados tras el acuerdo de paz de 2016 entre el Gobierno y las antiguas FARC.

El giro en las condiciones para la asignaci¨®n de los recursos ¨Ddos billones de pesos (unos 500 millones de d¨®lares) para el bienio 2023-2024¨D busca evitar que los fondos se concentren en unas pocas regiones, adem¨¢s de blindarlos de actos de corrupci¨®n como el cobro de coimas a cambio de la aprobaci¨®n de obras para territorios que, adem¨¢s de la violencia, han tenido que soportar los malos manejos del dinero p¨²blico.

Los cambios comienzan por dar mayor visibilidad a los procesos para elegir el destino de los recursos. Tania Guzm¨¢n, subdirectora general de regal¨ªas del Departamento Nacional de Planeaci¨®n (DNP), explica: ¡°Vamos a hacer convocatorias p¨²blicas, abiertas y competitivas en las que todo el mundo presenta los proyectos al mismo tiempo y en igualdad de condiciones, y ah¨ª s¨ª se les aplica la metodolog¨ªa de priorizaci¨®n para asignar los recursos¡±.

Justamente, tambi¨¦n se cre¨® un nuevo mecanismo de priorizaci¨®n y se fijaron topes al dinero que pueden recibir las diferentes regiones. Lo que se mantendr¨¢, pues est¨¢ en la Constituci¨®n, es el ¨®rgano encargado de evaluar las propuestas y repartir los fondos. Se trata del OCAD Paz, conformado por dos representantes de las Alcald¨ªas, dos de las Gobernaciones y uno del Gobierno nacional.

Hasta hace dos a?os, cuando se agotaron los recursos de las regal¨ªas para la paz, incluida una porci¨®n de siguientes bienios que el Gobierno de Duque anticip¨® con autorizaci¨®n del Congreso de la Rep¨²blica para recuperar la econom¨ªa tras la pandemia, el punto de partida en la competencia por las asignaciones era desigual. Las Alcald¨ªas de los 170 territorios priorizados compet¨ªan por una bolsa ¨²nica y se estudiaba la aprobaci¨®n seg¨²n el orden de llegada de los proyectos al OCAD Paz, despu¨¦s de atravesar una serie de filtros.

La din¨¢mica de entonces hac¨ªa que muchos de los municipios, los de menor capacidad t¨¦cnica o los que no ten¨ªan un padrino pol¨ªtico, se quedaran rezagados o incluso sin recibir un solo peso. Inversiones esenciales como el desarrollo de redes para el acceso a servicios de energ¨ªa o acueducto, el mejoramiento de v¨ªas, la construcci¨®n de escuelas o centros de salud, entre otras, no pasaban de los escritorios. Mientras tanto, las comunidades segu¨ªan condenadas a la espera.

Una muestra de la competencia burocr¨¢tica por llegar al OCAD Paz, bajo el riesgo de exigencias de sobornos para lograrlo, es que el 70% de los recursos aprobados para municipios de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), se ha concentrado en el 33% de ellos, se?alan las cifras del DNP.

Mientras municipios del Cesar ¨Dque ten¨ªa al alcalde de La Paz, Mart¨ªn Zuleta, como miembro principal del OCAD¨D concentraron en los a?os anteriores m¨¢s de 613.000 millones de pesos (unos 150 millones de d¨®lares), los de Vaup¨¦s y Guain¨ªa lograron entre 4.600 y 5.000 millones de pesos (alrededor de 1,2 millones d¨®lares).

¡°Quien ten¨ªa mayores conexiones o capacidad en la estructuraci¨®n de los proyectos, los presentaba primero. Los que estaban m¨¢s d¨¦biles o sin equipos que les ayudaran a formular, quedaban de ¨²ltimos mientras los recursos se acababan¡±, a?ade Guzm¨¢n, la subdirectora de regal¨ªas.

La nueva metodolog¨ªa de priorizaci¨®n tiene dos componentes. El primero es la equidad territorial que punt¨²a las caracter¨ªsticas de los territorios, sumando un 50% de la calificaci¨®n. Incluye indicadores como la incidencia del conflicto armado, la pobreza multidimensional, el desempe?o institucional, la presencia de poblaci¨®n ¨¦tnica, cultivos de uso il¨ªcito y ¨¢reas de especial inter¨¦s ambiental. Cada indicador tiene un valor diferente.

El segundo es el de pertinencia de las inversiones, que completa el otro 50%. Eval¨²a factores como la contribuci¨®n al cierre de brechas, la inversi¨®n destinada a erradicaci¨®n o sustituci¨®n de cultivos il¨ªcitos y la concurrencia de fuentes de financiaci¨®n. Los proyectos suman puntos extra si destinan recursos a la reparaci¨®n de v¨ªctimas del conflicto.

El objetivo, subraya Guzm¨¢n, es que ¡°los servidores p¨²blicos tengan limitada al m¨¢ximo su discrecionalidad, porque donde existe ese margen, hay oportunidades para comportamientos impropios¡±.

El otro cambio de fondo es una divisi¨®n de la bolsa en 16 subregiones para distribuir los recursos entre ellas. Hasta ahora, m¨¢s de la mitad de las regal¨ªas para la paz se han destinado a cinco de esas zonas: Sierra Nevada Perij¨¢, Alto Pat¨ªa y Norte de Cauca, Macarena Guaviare, Cuenca del Cagu¨¢n y Piedemonte Caquete?o y Putumayo.

¡°La distribuci¨®n la hicimos con varios criterios, entre ellos, la asignaci¨®n hist¨®rica, es decir, las que hab¨ªan recibido mayores recursos ahora recibir¨ªan un poco menos y las que hab¨ªan recibido menos recursos ahora recibir¨ªan un poco m¨¢s¡±, precisa Guzm¨¢n. Bajo los nuevos criterios, las cinco subregiones que m¨¢s recursos podr¨¢n obtener hasta el pr¨®ximo a?o son Pac¨ªfico y frontera nari?ense, Choc¨®, Catatumbo, Alto Pat¨ªa y Norte del Cauca, Bajo cauca y Nordeste Antioque?o.

Para la nueva asignaci¨®n, el Gobierno abrir¨¢ cinco convocatorias. En la primera, que ya est¨¢ en marcha, se postularon 248 proyectos de 9 departamentos y 113 municipios, incluidos cuatro que no hab¨ªan recibido recursos: Puerto Rico (Meta), Buenaventura (Valle del Cauca), Jambal¨® y Santander de Quilichao (Cauca). Por primera vez, hay una postulaci¨®n de una organizaci¨®n de pueblos ¨¦tnicos.

Tib¨², un municipio de Norte de Santander, en la regi¨®n del Catatumbo, es uno de los que concursa para llevar energ¨ªa el¨¦ctrica con paneles solares a zonas rurales y acercar tecnolog¨ªas digitales a sedes educativas. El alcalde Nelson Leal espera que ahora haya menos cuellos de botella que antes. ¡°Estructurar un proyecto de regal¨ªas es muy tedioso. Deber¨ªa ser menos complejo para que las comunidades puedan ver las obras¡±, afirma.

El pr¨®ximo 29 de noviembre se publicar¨¢n los resultados de las primeras asignaciones de regal¨ªas para la paz durante el Gobierno de Petro, con un OCAD Paz conformado por los gobernadores de Huila y Norte de Santander, los alcaldes de Montel¨ªbano (C¨®rdoba) y Morelia (Caquet¨¢); y Gloria Cuartas, directora de la Unidad de implementaci¨®n del acuerdo final de paz.

En este primer proceso, el ¨®rgano recibi¨® proyectos por 2,34 billones de pesos (m¨¢s de 500 millones de d¨®lares) que concursan por una cuarta parte de ese valor: 585.000 millones de pesos (alrededor de 140 millones de d¨®lares). Las cifras reflejan el tama?o de las necesidades en comunidades que esperan que las obras se construyan, y no que los dineros vayan a parar a los bolsillos de corruptos.

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