El dinero destinado a la paz que termin¨® en investigaciones por corrupci¨®n

Una proposici¨®n liderada por el actual presidente del Congreso de la Rep¨²blica, Roy Barreras, fue el origen del que se convertir¨ªa en un complejo entramado de intereses econ¨®micos y pol¨ªticos con recursos destinados a la paz en Colombia. En diciembre de 2019, el entonces senador del Partido de la U asegur¨® el anticipo del dinero de las regal¨ªas provenientes de la extracci¨®n de minerales e hidrocarburos, de los a?os siguientes, para que se invirtiera en tiempo r¨¦cord: lo que quedaba de la presidencia de Iv¨¢n Duque, que terminar¨¢ en agosto. La proposici¨®n, que se proyect¨® como un mecanismo para agilizar la construcci¨®n de obras en las regiones m¨¢s golpeadas por el conflicto armado, hoy es blanco de denuncias de corrupci¨®n que involucran a distintos niveles del poder p¨²blico.

Barreras, un curtido pol¨ªtico con habilidad para adaptarse, sin distinguir ideolog¨ªa, ya no pertenece al partido de la U. Fue expulsado por violar el r¨¦gimen de bancadas de esa colectividad que form¨® parte de la coalici¨®n de gobierno de Duque, pr¨®ximo a concluir. Ahora es uno de los principales escuderos del Pacto Hist¨®rico, el partido de izquierda del presidente electo, Gustavo Petro.

El objetivo de la reforma en 2019, radicada por el gobierno con apoyo multipartidista, era aumentar el porcentaje destinado a las zonas productoras de minerales e hidrocarburos como una manera de evitar el rechazo de las comunidades hacia las actividades de explotaci¨®n. Como senador, el hoy presidente electo, Gustavo Petro, se apart¨® de la iniciativa que consider¨® una ¡°repartija¡± est¨¦ril. Dijo que las rentas petroleras y carbon¨ªferas formaban parte de ¡°un mundo moribundo¡± que pronto dejar¨ªa de existir.

¡°Por eso me parece una discusi¨®n insustancial. Entre el 15% o el 30% de cero, el resultado es el mismo: cero. Es una oportunidad perdida porque ya no vamos a tener m¨¢s regal¨ªas en cinco a?os¡±, plante¨® Petro en la plenaria del Senado del 3 de diciembre de 2019. A su juicio, el destino m¨¢s rentable de las regal¨ªas era una transici¨®n del modelo extractivista hacia uno productivo centrado en la industria y la agricultura, un modelo ¡°rico en puestos de trabajo y en el cuidado del territorio, del agua y de la naturaleza¡±.

Seg¨²n Petro, la discusi¨®n sobre c¨®mo distribuir ¡°las ¨²ltimas regal¨ªas en la historia de los combustibles f¨®siles en Colombia¡± encarnaba ¡°la falsa alegr¨ªa¡± de recursos que no llegar¨ªan. Algo muy distinto pensaba su entonces compa?ero de Senado y actual aliado, Roy Barreras. En un par¨¢grafo que propuso ese d¨ªa, y que hab¨ªa defendido de tiempo atr¨¢s, incluy¨® el anticipo del monto destinado a la paz, el 7% del total de la bolsa. Las regal¨ªas para la paz, concebidas desde 2017 tras el acuerdo para la terminaci¨®n del conflicto entre el gobierno y la guerrilla de las FARC, se convirtieron en un mecanismo de competencia entre los 170 municipios m¨¢s afectados por la guerra para acceder a la financiaci¨®n de v¨ªas, hospitales, escuelas, entre otras obras.

¡°El hecho de que tengamos m¨¢s recursos, y m¨¢s r¨¢pido, en los pr¨®ximos tres a?os, no en 20 a?os, para los municipios afectados por la violencia y para los m¨¢s pobres, justifican de lejos esta modificaci¨®n¡±, explic¨® Barreras durante la sesi¨®n del Senado. Su proposici¨®n cont¨® con el apoyo de varios senadores, la mayor¨ªa, parad¨®jicamente, del partido Verde. La implementaci¨®n de la propuesta se reglament¨® por ley en 2020.

El presupuesto de las regal¨ªas para la paz entonces se multiplic¨® y termin¨® concentrando el dinero de diez a?os en los dos siguientes. Zonas hist¨®ricamente olvidadas por el Estado entrar¨ªan a concursar por la repartici¨®n de una cifra nunca antes vista, disponible por una sola vez. Era una oportunidad ¨²nica. De los $6,7 billones de pesos de las regal¨ªas de la paz aprobados a entidades territoriales en el gobierno de Iv¨¢n Duque, cerca del 70% se concentr¨® en los ¨²ltimos dos a?os.

Investigan cobros de comisiones

Pero la iniciativa para la paz que fue aprobada por el Congreso termin¨® con los a?os siendo centro de denuncias por posibles actos de corrupci¨®n. La Fiscal¨ªa y la Procuradur¨ªa adelantan procesos por la supuesta exigencia de comisiones que estar¨ªan entre un 2% y un 12% del valor de algunos proyectos para que fueran aprobados. La denuncia fue publicada por los periodistas Valeria Santos y Sebasti¨¢n Nohra en la emisora Blu Radio, con base en el testimonio de unos pocos alcaldes que no revelaron sus nombres por razones de seguridad. La Corte Suprema de Justicia abri¨® una indagaci¨®n preliminar a tres congresistas conservadores que har¨ªan parte del entramado de corrupci¨®n.

El ¨®rgano responsable de asignar los recursos para los proyectos era el llamado OCAD Paz, conformado por un representante de las gobernaciones, otro de las alcald¨ªas y un delegado del Gobierno nacional: el exconsejero presidencial para la estabilizaci¨®n del posconflicto, Emilio Archila. Las entidades territoriales propon¨ªan a los ejecutores de las obras, pero la ¨²ltima palabra la ten¨ªa el OCAD. Es decir, el ¨®rgano concentraba un doble poder: la autorizaci¨®n de los proyectos y la determinaci¨®n final de qui¨¦nes recibir¨ªan el dinero por la construcci¨®n de los proyectos.

¡°La alta discrecionalidad en la destinaci¨®n de recursos y en la adjudicaci¨®n de contratos puede llevar a irregularidades como inter¨¦s indebido en la celebraci¨®n de contratos, tr¨¢fico de influencias, o firma de contratos sin el cumplimiento de los requisitos legales¡±, alerta Andr¨¦s Hern¨¢ndez, director ejecutivo de Transparencia por Colombia.

Las sospechas de corrupci¨®n aumentaron cuando, en una grabaci¨®n revelada por Candela Viva, un medio local, se escucha al delegado de las alcald¨ªas en el OCAD, Mart¨ªn Zuleta, alcalde de La Paz (Cesar) empleando una especie de mensaje cifrado con un interlocutor desconocido. ¡°M¨¢s bien d¨ªgame usted qu¨¦ puntos se le pide a ellos a ver hasta cu¨¢nto se puede ceder porque de pronto cinco hojas de block es mucho pa¡¯ esa carpeta, podemos dar tres, cuatro hojas de block para repartir la carpeta¡±, dice Zuleta. ¡°Entonces m¨¢s o menos para yo tener idea y yo decirles a ellos esto pa¡¯ que salga tiene que ser esto y listo, y llevarlos hasta el OCAD para nosotros votarlo all¨¢, garantizar eso tambi¨¦n¡±, agrega en la conversaci¨®n. El alcalde no se ha pronunciado al respecto. No es claro a¨²n a qu¨¦ se refiere con esas ¡®cinco hojas de block¡¯.

Un camino de piedras

Los filtros establecidos, originalmente, para asegurar las condiciones t¨¦cnicas de los proyectos terminaron convertidos en una traves¨ªa burocr¨¢tica que facilitaba influencias con intereses econ¨®micos o pol¨ªticos. Antes de llegar a la instancia de aprobaci¨®n se exig¨ªa, entre otros, la verificaci¨®n de requisitos por parte del Departamento Nacional de Planeaci¨®n (DNP). El exdirector de la entidad, Luis Alberto Rodr¨ªguez, ha negado su participaci¨®n en los hechos que son motivo de investigaci¨®n. La Contralor¨ªa, entidad encargada de proteger el uso de los recursos p¨²blicos, tambi¨¦n est¨¢ salpicada en las denuncias por documentos que enviaba al OCAD con reparos a proyectos que fueron rechazados.

De los 170 municipios priorizados, siete no obtuvieron ninguna aprobaci¨®n de fondos. Mientras Cesar, el departamento del alcalde Zuleta, recibi¨® m¨¢s de 613.000 millones de pesos (unos 150 millones de d¨®lares), otros como Vaup¨¦s y Guain¨ªa lograron entre 4.600 y 5.000 millones de pesos (alrededor de 1,2 millones d¨®lares). Boyac¨¢ y Cundinamarca figuran entre los que menos consiguieron recursos. No est¨¢ claro por qu¨¦ Risaralda, que no ten¨ªa zonas identificadas como afectadas por el conflicto, obtuvo asignaciones para la paz.

El 96% de los municipios priorizados ha tenido al menos un proyecto aprobado y se est¨¢ ofreciendo asistencia t¨¦cnica a los que quedaron excluidos para que accedan a otras fuentes de recursos, explic¨® el DNP a este medio. De los 681 proyectos aprobados, 152 est¨¢n terminados, 463 est¨¢n en ejecuci¨®n y 66 sin contratar, seg¨²n la informaci¨®n oficial. La mayor¨ªa son de transporte, minas y energ¨ªa, vivienda y agricultura, entre otros sectores.

El debate sobre los recursos de la paz volver¨¢ al mismo lugar donde inici¨®. El Congreso de la Rep¨²blica cit¨® a los principales involucrados en el esc¨¢ndalo para que respondan antes de que finalice el actual gobierno, el pr¨®ximo 7 de agosto. El d¨ªa del ¨²ltimo debate de la reforma a las regal¨ªas en el Senado, el pr¨®ximo presidente, Gustavo Petro, dijo que los recursos de las regal¨ªas podr¨ªan convertirse en ¡°una repartija donde al final el dinero se lo van a robar¡±. Es lo que a¨²n est¨¢ por comprobarse: si los habitantes de los municipios m¨¢s afectados por la violencia en Colombia, adem¨¢s de haber sido v¨ªctimas de la guerra, fueron v¨ªctimas de la corrupci¨®n.

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