Torpeza en las altas cortes

Los relacionistas p¨²blicos que se encargan de tender puentes entre pol¨ªticos, empresarios y magistrados de las altas cortes andan de pl¨¢cemes luego del resultado de la votaci¨®n que hizo la semana pasada el pleno de la Corte Suprema y que dej¨® en tablas la elecci¨®n de Fiscal General de la Naci¨®n.

Ante lo dif¨ªcil que ha sido para estos personajes sentar a las integrantes de la terna con sus amigotes (o clientes) para que, en medio de elegantes comidas en alucinantes restaurantes, se hable sobre la justicia, su visi¨®n de pa¨ªs y sus preocupaciones, la soluci¨®n result¨® empantanar la elecci¨®n del reemplazo de Francisco Barbosa e, incluso, llevar al absoluto desgaste a esta terna haciendo uso del mismo m¨¦todo que hace 14 a?os la misma Corte aplic¨® a la terna enviada por el entonces presidente ?lvaro Uribe.

Los pol¨ªticos, sobre todo aquellos que quieren que nunca nadie responda por la forma descarada en que durante a?os se han robado a Colombia, andan de pl¨¢cemes pues hasta el momento la estrategia armada por el presidente del Congreso para dilatar la elecci¨®n de nuevo Contralor General de la Rep¨²blica ha funcionado. S¨®lo falta que la Corte Constitucional haga su parte para que el blindaje sea total.

El presidente del Senado podr¨¢ sacar cualquier tipo de excusa para justificar el incumplimiento de una orden judicial dictada en mayo del a?o pasado por el Consejo de Estado que conminaba al Congreso a elegir un nuevo Contralor, mas todos los meses transcurridos desde que se dio el fallo no son justificables bajo ning¨²n lente. La explicaci¨®n es sencilla: los pol¨ªticos tradicionales se juntaron para ambientar en la Corte Constitucional la revisi¨®n de un fallo de tutela que devolver¨ªa al anterior Contralor a su cargo, evitando que el presidente Petro influya en la nueva elecci¨®n que tendr¨ªa que adelantar el Congreso.

El error de c¨¢lculo de pol¨ªticos y relacionistas p¨²blicos es grande. Pero m¨¢s grande y abominable ser¨ªa que los magistrados de esas altas cortes terminen por convertirse en juguetes de unos y otros, en vez de demostrar la verdadera majestad de la justicia que deber¨ªa ser incuestionable, impoluta y alejada de cualquier influencia. ?Acaso no se dan cuenta de que seguir el camino de los manipuladores es darle argumentos al presidente Petro para que cuestione la transparencia de los m¨¢ximos tribunales del pa¨ªs? ?Acaso los sabios magistrados son tan ciegos que son incapaces de ver que al ponerse a jugar a la pol¨ªtica terminar¨¢n sumidos en el mismo desprestigio que hoy ahoga a los integrantes del Congreso?

Hace 14 a?os, cuando se dio la par¨¢lisis en la elecci¨®n de Fiscal, hab¨ªa argumentos v¨¢lidos para decirle ¡°no¡± a la terna presentada por Uribe, entre otros, que viniendo este de una reelecci¨®n ser¨ªa el segundo Fiscal nominado por el entonces presidente. El argumento era proteger la independencia de la justicia. Aqu¨ª el escenario es otro: sencillamente no quieren un fiscal nominado por Petro.

Pasa lo mismo con el caso del Contralor. No quieren uno que pueda tener el visto bueno de Petro. ?Por qu¨¦ los dem¨¢s presidentes si han podido y Petro no? ?Es eso justicia, se?ores magistrados?

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