Las comunidades del Choc¨® asediadas por el ELN piden ser escuchadas en la mesa de di¨¢logo: ¡°En Sip¨ª todos estamos confinados¡±

Al municipio de Sip¨ª, en el sur del Choc¨®, solo se puede llegar en lancha. Son cuatro horas de recorrido desde Istmina, el pueblo m¨¢s cercano, cuando el r¨ªo est¨¢ crecido; siete horas o m¨¢s cuando est¨¢ seco. ¡°Todos en Sip¨ª estamos en confinamiento por el paro del ELN. Todos. Somos 4.347 habitantes¡±, dice con preocupaci¨®n y exactitud el alcalde, Jairo Antonio Murillo. Explica que en menos de seis meses, las 15 comunidades de Sip¨ª se han desplazado cuatro veces por los enfrentamientos entre los grupos armados.

La disputa en esa zona del Choc¨® es entre la guerrilla del ELN y el Clan del Golfo. Combaten desde hace a?os por el control de un territorio rico en miner¨ªa de oro y platino, y clave para las rutas del narcotr¨¢fico. En medio de esos combates queda atrapada la poblaci¨®n civil. ¡°Los campesinos no pueden ir a sembrar ni a pescar¡±, denuncia Murillo en un encuentro realizado este fin de semana en el que los l¨ªderes sociales y las autoridades locales del Choc¨® le pidieron a la delegaci¨®n de paz del Gobierno de Gustavo Petro en los di¨¢logos con el ELN ser escuchadas en esa mesa.

La reuni¨®n, convocada por la gobernadora Nubia Carolina C¨®rdoba, fue en un sal¨®n del Banco de la Rep¨²blica de Quibd¨®, a la orilla del malec¨®n del R¨ªo San Juan. Vera Grabe, l¨ªder de la delegaci¨®n de paz, y los senadores oficialistas Iv¨¢n Cepeda Castro y Mar¨ªa Jos¨¦ Pizarro asistieron al evento por parte del Estado para escuchar las denuncias de las comunidades v¨ªctimas.

La gobernadora asegura en di¨¢logo con EL PA?S que el m¨¢s reciente paro armado, impuesto por el ELN solo unos d¨ªas despu¨¦s de que esa guerrilla ampliara el cese al fuego con el Estado, afect¨® a cerca de 30.000 personas. ¡°El cese al fuego es insuficiente porque se refiere a la ausencia de ataques solo entre la fuerza p¨²blica y la guerrilla. Creemos que debe haber un cese de hostilidades que se extienda a la comunidad¡±, insiste la mandataria, que lleva menos de dos meses en su cargo.

La gobernadora se ha convertido en una de las aliadas del Gobierno en las administraciones regionales. Sin embargo, es enf¨¢tica en sus solicitudes: ¡°Ese cese de hostilidades debe incluir, por ejemplo, que la guerrilla deje de poner minas antipersonales que afectan a los campesinos y que abandone las amenazas y las extorsiones¡±. C¨®rdoba respalda las declaraciones del alcalde de Sip¨ª: ¡°Cuando hay paro armado, las personas no pueden ir al cultivo, ni al colegio. Ni siquiera al m¨¦dico¡±.

Vera Grabe reconoce la necesidad urgente de avanzar en la protecci¨®n de las comunidades que viven en la regi¨®n del bajo Atrato y el r¨ªo Baud¨®. ¡°Definitivamente, las medidas de la negociaci¨®n deben incluir a la poblaci¨®n civil. No es suficiente un cese al fuego entre combatientes y el Ej¨¦rcito¡±, dice la jefe de delegaci¨®n de paz del Gobierno. Y va m¨¢s all¨¢: ¡°El proceso de paz no puede ser solo con el ELN, sino que debe incluir a los otros grupos armados para que efectivamente se supere la violencia¡±. La antigua congresista reconoce que no es satisfactorio el avance del proceso con respecto a la protecci¨®n de las comunidades y la cesaci¨®n de las violencias. ¡°Estamos en un proceso que se construye paso a paso, para encontrar los caminos de superaci¨®n de estas situaciones¡±.

Un primer avance para ese cambio es llevar las quejas y solicitudes de las comunidades directamente a la mesa de di¨¢logo. El senador Iv¨¢n Cepeda explica a EL PA?S que del encuentro se lleva la certeza del respaldo de la gente del Choc¨® al proceso, pero tambi¨¦n la tristeza de ver que muchas de ellas sufren una situaci¨®n humanitaria muy dif¨ªcil: ¡°Nuestro deber es acelerar las conversaciones¡±, resume. Cepeda explica que en mayo se presentar¨¢ el plan nacional de participaci¨®n en el proceso de paz, que involucrar¨¢ a muchas organizaciones, incluidas las v¨ªctimas del Choc¨®. ¡°Mientras tanto, anuncio que habr¨¢ visitas de comunidades a la mesa de di¨¢logos¡±. En el exitoso proceso con las FARC en La Habana, la mesa organiz¨® visitas de comunidades, v¨ªctimas y otros actores importantes.

Cepeda coincide con el diagn¨®stico que hacen la gobernadora C¨®rdoba, Vera Grabe y los alcaldes: ¡°En el cese al fuego bilateral quedan por fuera otros grupos. Se ha hablado de un cese al fuego multilateral, pero parece muy dif¨ªcil. Por ahora creo que la opci¨®n es explorar ciertas reglas m¨ªnimas de respeto a los derechos humanos con los actores armados¡±. El senador hace una promesa: ¡°cada vez el proceso de paz con el ELN va a estar m¨¢s en el territorio colombiano y menos en el extranjero¡±.

La defensora de Derechos Humanos y coordinadora del Foro Inter¨¦tnico Solidaridad Choc¨®, Elizabeth Moreno, reconoce el valor de que se escuche la voz de las comunidades en la mesa de di¨¢logos: ¡°Confiamos en que la negociaci¨®n sea un ¨¦xito si en ella participan las comunidades, no solo el Estado y los victimarios, sino las v¨ªctimas¡±, dice Moreno. Y concluye: ¡±Es fundamental que se oiga nuestra voz, porque somos nosotros los que sufrimos las consecuencias de la guerra, los que nos toca salir desplazados, los que vemos a nuestros familiares morir, los que seguimos confinados¡±.

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