La alianza entre el ELN y el Estado Mayor Central que busca detener el avance del Clan del Golfo recrudece la violencia en el sur de Bol¨ªvar
La Defensor¨ªa del Pueblo calcula que los enfrentamientos entre los grupos armados produjeron el desplazamiento de m¨¢s de 2.000 personas


Una alianza entre el Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN) y el autodenominado Estado Mayor Central (EMC), la federaci¨®n de disidencias de las extintas FARC que encabeza Iv¨¢n Mordisco, genera preocupaci¨®n en el sur de Bol¨ªvar. Los dos grupos armados libran all¨ª una lucha encarnizada contra la expansi¨®n del Clan del Golfo, el principal grupo narcotraficante de Colombia. En contraste con el enfrentamiento que tienen en otras partes del pa¨ªs, all¨ª protegen en conjunto sus intereses regionales en la miner¨ªa del oro y el narcotr¨¢fico. En el medio se encuentra la poblaci¨®n civil: alrededor de 2.000 personas fueron desplazadas, seg¨²n la Defensor¨ªa del Pueblo.
El centro de los choques est¨¢ en el auge de la miner¨ªa del oro. Esta actividad, caracter¨ªstica de la zona desde la ¨¦poca colonial, genera inter¨¦s entre los grupos ilegales ante factores como el aumento de la demanda mundial, la cotizaci¨®n del metal en m¨¢ximos hist¨®ricos y las facilidades para legalizarlo en la comercializaci¨®n. Datos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) indican que, entre 2014 y 2022, Colombia sum¨® 61.000 hect¨¢reas de explotaci¨®n de oro de aluvi¨®n ¡ªun incremento del 57%¡ª. Contrasta con el mercado de la coca: aunque aumenta la producci¨®n, el precio promedio de una arroba (12,5 kilos) de hoja de coca ha ca¨ªdo m¨¢s del 32% entre 2021 y 2023, de acuerdo con cifras recogidas en el departamento del Cauca por El Espectador.
Sin embargo, no todo es el r¨¦dito econ¨®mico. Mauricio Valencia, investigador de la Fundaci¨®n Paz y Reconciliaci¨®n, enfatiza que el Clan del Golfo tiene entre sus prioridades consolidar su arraigo territorial y que el negocio del oro le permite fortalecer las bases sociales entre la poblaci¨®n minera. ¡°A veces uno piensa mucho la l¨®gica en relaci¨®n con las rentas ilegales. Pero para ellos tambi¨¦n es muy importante el dominio y el control social en la poblaci¨®n¡±, subraya en una conversaci¨®n telef¨®nica.
Valencia agrega que el catalizador de la alianza entre el ELN y las disidencias es la posibilidad de perder el control de las minas. ¡°Es un acuerdo pragm¨¢tico que obedece a la preservaci¨®n de los intereses de cada grupo armado y a la coyuntura regional¡±, comenta. El acuerdo muestra la necesidad mutua de sobrevivir ante la primac¨ªa del Clan del Golfo, as¨ª como la adaptabilidad de los grupos a cada regi¨®n. Contrasta con situaciones como la de Arauca, donde el Frente de Guerra Oriental del ELN libra una guerra abierta contra el Frente 28 del EMC.
Alerta temprana de la Defensor¨ªa
Los enfrentamientos por el control territorial en el sur de Bol¨ªvar comenzaron a intensificarse el pasado septiembre. Entonces, la Defensor¨ªa emiti¨® una alerta temprana en la que denunciaba la creciente violencia en los municipios de Cantagallo, San Pablo, Simit¨ª, Santa Rosa del Sur, Morales y Arenal. El texto se?alaba que el Clan del Golfo, tambi¨¦n conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), hab¨ªa demostrado en los ¨²ltimos a?os ¡°un marcado inter¨¦s por ingresar a zonas con presencia hist¨®rica del ELN y las FARC¡± y que hab¨ªa logrado ¡°un importante posicionamiento a trav¨¦s de m¨¦todos de amenaza e intimidaci¨®n sobre la poblaci¨®n civil¡±.
La tensi¨®n escal¨® a¨²n m¨¢s a finales de noviembre. La Defensor¨ªa inform¨® entonces sobre 1.400 personas desplazadas ¡ªla cifra escal¨® en los primeros d¨ªas de diciembre a 2.136 personas, que el defensor regional explic¨® a este peri¨®dico que ya han retornado a sus hogares¡ª y se?al¨® que la poblaci¨®n vive inmersa en ¡°un ambiente de temor y zozobra¡± por los enfrentamientos entre el Clan del Golfo y el ELN. El defensor del Pueblo, Carlos Camargo, no se refiri¨® entonces al EMC, que en la alerta de septiembre aparec¨ªa mencionado en ¡°acuerdos territoriales¡± de coexistencia con la guerrilla. Fue el ministro de Defensa, Iv¨¢n Vel¨¢squez, quien unos d¨ªas despu¨¦s confirm¨® la implicaci¨®n de este grupo. ¡°Hay una uni¨®n entre el ELN y disidencias enfrentando al Clan del Golfo¡±, dijo en declaraciones a medios.
El sur de Bol¨ªvar, una zona aislada que tiene por ciudad m¨¢s cercana a la santandereana y petrolera Barrancabermeja, ha sido un territorio estrat¨¦gico para los grupos armados desde que las primeras unidades del ELN llegaron en los a?os setenta, provenientes del otro margen del r¨ªo Magdalena. Ha tenido algunos periodos cortos de relativa paz, sobre todo tras la desmovilizaci¨®n de los paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en 2006 y los acuerdos con las FARC en 2016. Pero la disputa por la frontera agr¨ªcola, la miner¨ªa del oro, los cultivos de coca y las rutas del narcotr¨¢fico ha sido la din¨¢mica m¨¢s habitual.
En 2018, el ELN y el Clan del Golfo comenzaron a ocupar los territorios que antes controlaba las FARC. Luis Trejos, profesor de Ciencia Pol¨ªtica de la Universidad del Norte, explica que hubo un acuerdo de coexistencia que mantuvo una paz relativa entre ambas organizaciones por un par de a?os. Dur¨® hasta 2020, cuando lleg¨® el EMC y rompi¨® el equilibrio. Entonces, el Clan del Golfo termin¨® su alianza con el ELN y comenz¨® a expandirse.
Hay dos procesos que se acentuaron de forma simult¨¢nea desde inicios de 2022, seg¨²n comenta Trejos. De un lado, el Clan del Golfo ha consolidado su poder¨ªo econ¨®mico y su expansi¨®n en la zona con tropas provenientes del vecino Bajo Cauca, en Antioquia. De otro, el ELN ha sufrido varias bajas importantes y ha profundizado un declive en la regi¨®n, que comenz¨® en el segundo Gobierno de Juan Manuel Santos (2014-2018). ¡°[La guerrilla] se ha quedado sin liderazgos que le impriman disciplina a las tropas. La degradaci¨®n y los abusos con las comunidades le ha ido quitando base social¡±, remarca. Seg¨²n se?ala el profesor, incluso el EMC ha tenido m¨¢s capacidad de mover tropas para disputar el sur de Bol¨ªvar.
Refuerzo militar
El Gobierno de Gustavo Petro ha fortalecido la presencia militar en la regi¨®n tras los desplazamientos forzados. A finales de noviembre, el Ej¨¦rcito anunci¨® en env¨ªo de m¨¢s de 600 uniformados con el objetivo de ¡°brindar las garant¨ªas de seguridad para el retorno de las familias desplazadas¡±. Desde entonces, han informado de varios resultados operativos que han afectado ¡°de manera significativa¡± los planes criminales del Clan del Golfo. ¡°Durante la presente semana no se han registrado confrontaciones armadas con un control institucional efectivo del territorio¡±, asegura un comunicado del 1 de diciembre.
Los expertos consultados tienen una visi¨®n pesimista de la situaci¨®n. El profesor Trejos define el sur de Bol¨ªvar como un territorio paradigm¨¢tico de c¨®mo ¡°ha fracasado la pol¨ªtica de seguridad y paz del Gobierno nacional¡±. Cuestiona que las fuerzas militares han llegado tarde y de manera reactiva a enfrentar un aumento de la violencia que se registra hace meses. Adem¨¢s, el profesor se?ala que el env¨ªo de 600 militares beneficia al ELN porque el Ejecutivo tiene un cese al fuego bilateral con la guerrilla y el EMC, por lo que los militares no pueden atacarlos y en consecuencia solo tienen la alternativa de focalizar sus esfuerzos en el Clan del Golfo. ¡°En la pr¨¢ctica, la situaci¨®n actual lleva a que el Estado tenga que pelear la guerra del ELN contra las AGC¡±, afirma. ¡°Lo ideal ser¨ªa un cese al fuego multilateral¡±, a?ade.
Una opini¨®n similar tiene la analista Elizabeth Dickinson, del centro de pensamiento International Crisis Croup. Enfatiza en que es dif¨ªcil conseguir avances en la pol¨ªtica de paz en Bol¨ªvar cuando las negociaciones no incluyen al Clan del Golfo, el grupo con mayor capacidad de permear a la fuerza p¨²blica y de pagar sueldos para reclutar combatientes. ¡°Eso los ha convertido en tomadores de decisiones. Ellos pueden presionar a los dem¨¢s grupos y el Gobierno no tiene forma de limitar sus acciones. ?Qu¨¦ grupo armado va a desmovilizarse si el Clan del Golfo est¨¢ esperando para entrar?¡±, apunta la experta.
Dickinson, adem¨¢s, explica que las din¨¢micas de expansi¨®n territorial y de control social que el Clan del Golfo muestra en el sur de Bol¨ªvar est¨¢n vinculadas a las expectativas de ganar fuerza para una eventual mesa de negociaci¨®n con el Gobierno. ¡°La paz total misma ha regenerado una reconfiguraci¨®n del conflicto. Ahora el campo de batalla es la paz total. Cada grupo quiere demostrar su poder, su influencia y su presencia territorial. Las AGC, por ejemplo, han desarrollado una ret¨®rica muy diferente a la de hace unos a?os¡±, agrega la analista.
Mientras tanto, el Clan del Golfo ha emitido varios comunicados en los que evidencia el escalamiento de la tensi¨®n en el sur de Bol¨ªvar y el territorio lim¨ªtrofe del Bajo Cauca. El grupo rechaza tener alianzas con sectores de las fuerzas militares, algo que se?ala la alerta temprana de la Defensor¨ªa. Asimismo, niega estar detr¨¢s de los desplazamientos masivos y acusa a ¡°los insurgentes¡± de instrumentalizar a la poblaci¨®n civil. ¡°Nadie de nuestras unidades tiene la orientaci¨®n de insinuar que las comunidades tienen que desplazarse, ese es un discurso que tiene la insurgencia para agazaparse¡±, se lee en un comunicado en el que acusa a dos organizaciones espec¨ªficas de colaborar con sus adversarios.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S sobre Colombia y aqu¨ª al canal en WhatsApp, y reciba todas las claves informativas de la actualidad del pa¨ªs.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
