Colombia suma un nuevo conflicto armado en medio de la paz total

El jefe de la delegaci¨®n de la Cruz Roja en Colombia, Lorenzo Caraffi, inici¨® este mi¨¦rcoles una rueda de prensa con una afirmaci¨®n tajante: ¡°El panorama de violencia es preocupante¡±. La cabeza del Comit¨¦ Internacional (CICR) en el pa¨ªs present¨® el informe anual sobre la situaci¨®n humanitaria que, seg¨²n su trabajo en terreno, se sigue agudizando, y, a los siete conflictos armados no internacionales advertidos en 2022, ahora se suma otro: el de las autodenominadas Autodefensas Gaitanistas (o Clan del Golfo) contra el Estado Mayor Central (EMC), la mayor disidencias de las extintas FARC lideradas por alias Iv¨¢n Mordisco. Adem¨¢s, el balance arroj¨® que en ¨²ltimo a?o se registraron 444 presuntas violaciones al Derecho Internacional Humanitario (DIH), agravando la situaci¨®n en departamentos como Putumayo, Cauca, Nari?o y Bol¨ªvar.

Los datos del Balance Humanitario 2024 de la organizaci¨®n humanitaria dejan mal parada la ambiciosa pol¨ªtica de paz total del Gobierno, pues pese a los diferentes intentos de negociaci¨®n que se han impulsado con estructuras ilegales, la violencia en el pa¨ªs no da tregua. Caraffi asegur¨® que es apremiante que el ¡°Estado colombiano y los grupos armados sit¨²en las preocupaciones humanitarias en el centro de los di¨¢logos de paz¡±. Las cifras recogidas respaldan la preocupaci¨®n, en particular cuando se trata de fen¨®menos como el confinamiento, el desplazamiento y la desaparici¨®n.

Uno de los departamentos m¨¢s golpeados por este recrudecimiento es Nari?o, en la frontera con Ecuador, que por quinto a?o consecutivo encabeza el registro de desplazamientos masivos, sumado al mayor n¨²mero de afectados por minas antipersonales. All¨ª se calcularon 91 v¨ªctimas, de un total de 380, de las cuales el 55% fueron civiles. Este departamento del sur del pa¨ªs tambi¨¦n fue el segundo en el que hubo m¨¢s confinamientos y desplazamientos individuales, superado por Choc¨® y Valle del Cauca, respectivamente.

Precisamente, Valle del Cauca, en el suroccidente del pa¨ªs, a diferencia de a?os anteriores, super¨® a Arauca en t¨¦rminos de desplazamientos individuales. Un resultado esperado, teniendo en cuenta la dif¨ªcil situaci¨®n de orden p¨²blico en municipios como Tulu¨¢, que han sido epicentro de atentados y amenazas, derivadas en parte del accionar de un grupo criminal conocido como La Inmaculada, que ha desatado una ola de violencia sin precedentes en esa poblaci¨®n.

Por otro lado, en zonas como el Pac¨ªfico, espec¨ªficamente en Choc¨®, la crisis humanitaria se mantiene e incluso empeora. De acuerdo con el CICR, en 2023, alrededor de 47.013 personas sufrieron confinamientos, lo que significa un aumento del 19% con respecto a 2022. Solo el Choc¨®, donde el poder¨ªo lo ostentan el ELN (Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional) y las AGC, se concentr¨® el 44% de las v¨ªctimas. Sobre este incremento, Caraffi se?al¨® que, en parte, se debe a que el confinamiento es una t¨¢ctica para ejercer control territorial.

Otro punto cr¨ªtico es Putumayo, donde el desplazamiento tuvo un incremento de al menos el 1.000%. Para 2022 apenas se contabilizaron 169 desplazados; en 2023 la cifra alcanz¨® los 2.009. En esa zona del sur de Colombia, los enfrentamientos se dan por cuenta de las disidencias del frente Carolina Ram¨ªrez, que forma parte de la disidencia conocida como Segunda Marquetalia, y los Comandos de las Fronteras, que responden al EMC. Pese a que esas dos estructuras criminales han generado graves afectaciones a la poblaci¨®n, el CICR asegur¨® que, por ahora, esos choques no alcanzan la intensidad para sumarse a los otros conflictos armados. De estos, tres incluyen al Estado y a grupos armados no estatales como el ELN o las AGC y cinco se refieren a la disputa territorial de actores ilegales.

Con ese horizonte, Caraffi destac¨® que varias de estas agrupaciones han dado muestras de paz con la intenci¨®n de unirse a la pol¨ªtica de paz total. La principal de ellas es la liberaci¨®n de secuestrados. El a?o pasado, y gracias a la intermediaci¨®n del CICR, 66 personas que estaban en poder de un actor ilegal armado recuperaron su libertad.

Personal de salud en riesgo

El jefe de la delegaci¨®n humanitaria subray¨® otra preocupaci¨®n: el ataque a los grupos m¨¦dicos. El informe alerta que durante 2023 se registraron 511 actos violentos a los equipos de asistencia de salud en todo el pa¨ªs. De ellos, 140 estuvieron relacionados con conflictos armados. ¡°La mayor¨ªa [de ataques] fueron contra la vida y la integridad del personal sanitario e impactaron directamente a auxiliares, enfermeros, psic¨®logos, odont¨®logos, m¨¦dicos, conductores de ambulancias y equipos de salud p¨²blica¡±, consigna el documento.

Las agresiones han sido tan cruentas que dejaron nueve personas asesinadas, el n¨²mero m¨¢s alto en los ¨²ltimos cinco a?os. En Antioquia se document¨® la mayor cantidad de actos de violencia contra asistencia de salubridad (78), seguido de Cundinamarca (54) y Tolima (53). Por esos hechos, el CICR hizo un llamado urgente a respetar este trabajo que en ocasiones resuelva vital en zonas de guerra. ¡°Exhortamos a las partes de los conflictos armados a que respeten y protejan en todo momento a quienes brindan asistencia de salud. Su labor es aliviar el sufrimiento causado por los conflictos armados y la violencia¡±, cita el informe.

Este fue el ¨²ltimo balance que presenta Lorenzo Caraffi, quien termina su periodo en Colombia tras varios a?os de ocupar diferentes cargos en el Comit¨¦ y en varios lugares del pa¨ªs. Antes de irse, el italiano hizo ¨¦nfasis en la importancia que han tenido las apuestas por la paz para la misi¨®n del CICR. ¡°Los acuerdos abren oportunidades. Esta [refiri¨¦ndose a las negociaciones en curso] ha sido una oportunidad para tener un di¨¢logo abierto¡±, explic¨® durante la rueda de prensa.

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