Petro y Fajardo vinculan a Fico con el impopular Gobierno de Duque

La animadversi¨®n que hab¨ªa reinado estas ¨²ltimas semanas en la campa?a presidencial ha quedado en suspenso este jueves. En el debate que organiz¨® Prisa Media, los candidatos se olvidaron de sus rencillas y se centraron en los grandes temas que preocupan a la naci¨®n, como la econom¨ªa y la educaci¨®n. El peor parado fue el actual presidente, Iv¨¢n Duque, al que todos cuestionaron el intento de reforma tributaria en mitad de la pandemia que ech¨® a la calle a miles de personas que pusieron en cuesti¨®n todo el sistema. El pr¨®ximo mandatario de Colombia tendr¨¢ la enorme tarea de tratar una sociedad insatisfecha.

El debate tuvo un tono moderado, es cierto, pero los mensajes quedaron claros. Gustavo Petro, desde la izquierda, y Sergio Fajardo, desde el centro, trataron de vincular a Fico Guti¨¦rrez con la gesti¨®n de Duque. Saben que ahora mismo el continuismo no cotiza al alza. El l¨ªder de la derecha, tambi¨¦n lo sabe. Por eso se zaf¨® como pudo: ¡°Yo soy yo¡±. Guti¨¦rrez fue cr¨ªtico con la pol¨ªtica econ¨®mica del Gobierno y con su manejo de los temas de seguridad, sobre todo con las formas de hacerle frente al Clan del Golfo, la organizaci¨®n paramilitar que hace unas semanas paraliz¨® por completo algunas partes de pa¨ªs como protesta a la extradici¨®n a EE UU de su l¨ªder, Dairo Antonio ?suga, alias Otoniel. Petro y Fajardo lo escuchaban y carraspeaban disimuladamente ante el micr¨®fono.

La ausencia de Rodolfo Hern¨¢ndez, el cuarto en contienda, flot¨® en el ambiente. El exalcalde de Bucaramanga, un constructor de 77 a?os con un discurso antisistema, ha rehuido los cara a cara con el resto de candidatos. Su guerra es otra: las redes sociales y la visita a los pueblos. Hasta ahora hab¨ªa permanecido en un segundo plano, pero las encuestas lo sit¨²an cerca de Fico. Seg¨²n los analistas, tiene posibilidades reales de pasar a una eventual segunda vuelta frente a Petro. Los tres hicieron referencias veladas a ¨¦l, con un tono ir¨®nico a veces. No es que lo menosprecien, solo que les genera incertidumbre. Hern¨¢ndez es un fen¨®meno extra?o y fuera de los canales habituales de la pol¨ªtica.

El debate, moderado por el periodista Roberto Pombo, arranc¨® con la necesaria reforma del napole¨®nico sistema de justicia colombiano. Eso se vincul¨® con la inseguridad, cuya percepci¨®n se ha disparado en el ¨²ltimo a?o, seg¨²n las encuestas. Para Petro, existen unas bandas ¡°multicriminales¡± que se han tomado barrios enteros y tienen alianzas con los pol¨ªticos. Fajardo aprovech¨® para arremeter contra Duque: ¡°Es dram¨¢tico que un Gobierno ¡®de la seguridad¡¯ nos entrega a Colombia con los niveles m¨¢s altos de inseguridad que se haya visto¡±. Era una cr¨ªtica, de paso, a Fico, que cuando fue alcalde de Medell¨ªn pon¨ªa como ejemplo de su pol¨ªtica de seguridad a ?lvaro Uribe, un nombre que ya ni menciona por temor a verse arrastrado por su enorme impopularidad.

Petro lleg¨® diez minutos tarde. Los compa?eros de mesa lo recibieron con un rega?o. ¡°Ya se sabe, los trancones¡±, se excus¨®. A los cinco segundos estaba ya debatiendo la reforma de la justicia. Petro parece saberse siempre la lecci¨®n de memoria y da la sensaci¨®n de que no necesita preparaci¨®n, pero hab¨ªa pasado la noche anterior repasando datos. Esperaba que Fajardo le sacara las cuentas de la reforma tributaria que hab¨ªan discutido d¨ªas atr¨¢s, pero no lo hizo. Los cuerpo a cuerpo escasearon. El ambiente fue cordial, contra todo pron¨®stico. Ni siquiera los otros dos le sacaron a Petro, el favorito, que la noche anterior hab¨ªa sido retenida en un aeropuerto de Honduras una de sus senadoras, Piedad C¨®rdoba, por llevar encima 68.000 d¨®lares que no hab¨ªa declarado. ¡°Incomprensible que en medio de tanto problema se cometan ese tipo de imprudencias¡±, dijo ¨¦l al acabar. Ha pasado de defenderla por su mediaci¨®n con las Farc en su d¨ªa por los secuestrados a sentirse profundamente decepcionado con ella.

Se habl¨® largo y tendido sobre educaci¨®n. Fajardo propuso que los cr¨¦ditos educativos de la empresa p¨²blica Icetex solo lo paguen los estudiantes que tengan trabajo. En su opini¨®n, hay que revisar las tasas de inter¨¦s y cambiar los esquemas de financiaci¨®n con criterios de condonaci¨®n. Plantea que la educaci¨®n superior p¨²blica debe ser gratuita y ampliar sus cupos, al explicar su propuesta de una universidad nacional p¨²blica digital. Se trata de 100.000 cupos para estudiantes que no tienen acceso a la educaci¨®n superior. ¡°Vamos a incorporar los mejores m¨¦todos de educaci¨®n del mundo¡±, dijo. Fico estuvo de acuerdo en el diagn¨®stico y propuso transformar el sistema, donde se pueda condonar deudas y suspender el cobro de intereses a estudiantes en situaci¨®n de insolvencia. Petro a?adi¨® que el sistema, en efecto, no funciona, y que hay 200.000 estudiantes que abandonaron los estudios por estos problemas econ¨®micos. Insisti¨® en que hay que darle estudios a 2,5 millones de j¨®venes que hoy no pueden acceder a la universidad y para eso promete aumentar el presupuesto de la p¨²blica.

Hubo entre los tres cierto consenso sobre buscar la paz con el ELN, la ¨²ltima guerrilla activa de Colombia. Petro y Fajardo volvieron a coincidir en que es necesario dialogar con los insurrectos, sobre todo despu¨¦s de cuatro a?os de enfriamiento del proceso de paz. Seg¨²n ellos, el Gobierno ha maltratado el acuerdo que se firm¨® entre las Farc y Juan Manuel Santos. Fico estuvo de acuerdo en hablar con el ELN siempre y cuando cesara la violencia, esgrimiendo un discurso parecido al de Duque cuando lleg¨® al poder. Y por ah¨ª es donde encontraron de nuevo la rendija Fajardo y Petro: ¡°usted es el candidato del continuismo¡±.

Fico no se despein¨®. Dijo no sufrir de superioridad moral: ¡°Se inventaron lo de la continuidad en otras campa?as porque no tienen nada que decir. Lo que funciona lo mejoro y lo que no funciona, lo arreglo¡±. A continuaci¨®n asegur¨® que invitar¨ªa a ambos a dialogar con ¨¦l cuando sea presidente. Petro se rio.

¡ªMejor le invito yo a usted como jefe de la oposici¨®n.

A Fico tambi¨¦n le hizo gracia este juego de cordialidades algo infantil. Estaba claro que hab¨ªan dejado la animosidad para otro momento. En tres d¨ªas los colombianos decidir¨¢ cu¨¢l de ellos coge ventaja para ser presidente.

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