Los argentinos que impulsan el rescate del emblem¨¢tico ciervo de los pantanos

La regi¨®n inferior del Delta e Islas del Paran¨¢ ocupa una superficie de m¨¢s de 3200 kil¨®metros cuadrados en las provincias de Buenos Aires y Entre R¨ªos. Esta zona de lo que los argentinos llaman ¡°El Delta¡± es una de las m¨¢s intervenidas por el hombre, principalmente por los cambios de uso de suelo (desarrollos ganaderos, forestales y proyectos urban¨ªsticos) que impactan sobre los ecosistemas.

En sus r¨ªos, arroyos y humedales existen al menos 36 especies con alg¨²n grado de amenaza. Entre toda esa fauna, hay un animal que genera especial inter¨¦s por ser la especie m¨¢s emblem¨¢tica de la zona y Monumento Natural de la provincia de Buenos Aires: el ciervo de los pantanos. Se trata del c¨¦rvido aut¨®ctono m¨¢s grande de Sudam¨¦rica, que est¨¢ categorizado como ¡°en peligro de extinci¨®n¡± en todo el territorio y es una especie focal para la conservaci¨®n.

Con la idea de trabajar en la recuperaci¨®n de la especie, rescatar animales heridos y lograr conciencia en la poblaci¨®n, se cre¨® el Comit¨¦ Cient¨ªfico-T¨¦cnico Ciervo de los Pantanos. Es un programa impulsado por Fundaci¨®n Temaik¨¨n junto a organismos nacionales, provinciales y municipales, miembros de diversas instituciones p¨²blicas y privadas comprometidas con la conservaci¨®n de la especie.

Seg¨²n c¨¢lculos de la Fundaci¨®n Temaik¨¨n, la poblaci¨®n actual ronda los 800 individuos. En la ¨²ltima d¨¦cada de trabajo, se asisti¨® al rescate de 21 ejemplares, de los cuales 13 fueron trasladados al Hospital Veterinario de la instituci¨®n debido a la gravedad de su estado. La mitad de estos casos eran cr¨ªas hu¨¦rfanas; seis fueron devueltos exitosamente a la naturaleza y dos se mantienen bajo cuidado humano como embajadores en el Bioparque Temaik¨¨n, debido a secuelas que no permitir¨ªan su supervivencia en su h¨¢bitat natural.

¡°El ciervo de los pantanos es un animal herb¨ªvoro y uno de los pocos c¨¦rvidos anfibios del mundo. Uno de sus roles ecol¨®gicos es la distribuci¨®n de semillas de lo que va comiendo en el ecosistema del Delta. Est¨¢ amenazado por la reducci¨®n del ambiente, principalmente de los pastizales inundables donde ellos viven. Tambi¨¦n es una amenaza la cacer¨ªa y los ataques de perros salvajes¡±, cuenta Lina Zabala, bi¨®loga y coordinadora operativa del Centro de Recuperaci¨®n de Especies de Fundaci¨®n Temaik¨¨n.

En muchas ocasiones, el trabajo del comit¨¦ comienza con el aviso de lugare?os e isle?os sobre un animal herido, que necesita asistencia veterinaria. Un ejemplar adulto puede llegar a pesar 150 kilos y medir 130 cent¨ªmetros de altura. Ah¨ª comienza una tarea en equipo, que debe ser sigilosa para evitar la huida de un animal escurridizo al que algunos pobladores llaman ¡°fantasma¡± por esa caracter¨ªstica de la especie, que vive a s¨®lo 40 kil¨®metros de la ciudad de Buenos Aires.

¡°Llegamos a terrenos complicados, que en muchos casos son humedales de vegetaci¨®n agreste, en los que caminamos y quedamos enterrados. A veces tenemos que cruzar en balsas el r¨ªo porque est¨¢n en el coraz¨®n del Delta. R¨¢pidamente, el equipo calcula el peso del animal y la dosis necesaria de anestesia para disparar un dardo y dormirlo¡±, cuenta la bi¨®loga.

Una vez dormido el animal, un grupo de cuidadores, bi¨®logos y veterinarios controlan los par¨¢metros vitales, toman muestras de sangre y de pelo. Las heridas m¨¢s frecuentes en verano son miasis y atropellamiento de veh¨ªculos; en algunos casos, aparecen cr¨ªas hu¨¦rfanas, peque?os cachorros de quince d¨ªas a los que hay que alimentar con mamadera.

¡°Es mucho mejor si se puede resolver la asistencia en campo, pero en muchas ocasiones se los lleva al Centro de Recuperaci¨®n de Especies de Temaik¨¨n. Ah¨ª tenemos recintos en total aislamiento humano, con vegetaci¨®n exuberante. S¨®lo podemos reinsertar a un animal si tiene el alta sanitaria y comportamental. Tampoco deben tener dificultades para desplazarse¡±, se?ala Zabala.

Cuando son reinsertados, los ciervos vuelven a su h¨¢bitat natural con radiocollares, que permiten obtener datos valiosos con un seguimiento satelital. ¡°Gracias a eso, sabemos m¨¢s cosas sobre su biolog¨ªa, comportamiento y desplazamiento mediante se?ales que manda por GPS. Despu¨¦s de un tiempo est¨¢ programado para desprenderse¡±, explica.

Las tareas de recuperaci¨®n y conservaci¨®n del ciervo de los pantanos y de otros animales no ser¨ªan posibles sin el trabajo conjunto con la comunidad. Adem¨¢s de la participaci¨®n activa con otros actores en el Comit¨¦ Cient¨ªfico-T¨¦cnico Ciervo de los Pantanos, la Fundaci¨®n Temaik¨¨n realiza el Programa Delta con la idea de recuperar otras especies y realizar acciones como la restauraci¨®n de bosques ribere?os mediante la plantaci¨®n de ¡°minibosques¡±.

¡°Si no inclu¨ªs a la comunidad, cualquier acci¨®n que hagas tendr¨¢ problemas de continuidad a lo largo del tiempo. Trabajamos con escuelas para la creaci¨®n de ¡®biocorredores¡¯; son minibosques en los m¨¢rgenes de los r¨ªos y arroyos para ayudar a la recuperaci¨®n del lugar y darles refugio a la fauna que necesita estar m¨¢s conectada entre s¨ª¡±, dijo Germ¨¢n Hansen, especialista en informaci¨®n ambiental e integrante del Programa Delta del Departamento de Conservaci¨®n de Fundaci¨®n Temaik¨¨n.

Ese trabajo de plantaci¨®n se lleva adelante con escuelas de la zona. Alumnos de entre 3 y 5 a?os forman parte de un programa llamado Multiplicadores Ambientales, con ese y otros proyectos sobre el ambiente del Delta. El Jard¨ªn Olga Cossettini, en el distrito de Escobar, es uno de los que trabaja con los chicos y la fundaci¨®n para generar conciencia en los alumnos y sus familias. La elecci¨®n de esa instituci¨®n, al igual que las otras siete escuelas que participan, es clave porque est¨¢ ubicada en el caso de preservaci¨®n del Delta. Con peque?as acciones, comienzan a brindar conocimientos sobre la flora y la fauna aut¨®ctonas, con el apoyo y la capacitaci¨®n de profesionales.

¡°Muchos ni?os y familias no conoc¨ªan la existencia del ciervo de los pantanos ni sab¨ªan que est¨¢ en peligro de extinci¨®n, pese a vivir tan cerca. La gente de Fundaci¨®n Temaik¨¨n nos va aportando material y conocimiento. Tambi¨¦n nos invitaron a la liberaci¨®n de dos zorros cerca de nuestro lugar¡±, cont¨® Paola Garc¨ªa, directora del jard¨ªn, que tiene una matr¨ªcula de 52 alumnos.

Con actividades pedag¨®gicas, los chicos aprenden c¨®mo es el ciervo de los pantanos y otras especies, sus caracter¨ªsticas y por qu¨¦ debemos cuidarlas. ¡°Los chicos hacen preguntas directas a los referentes de Temaik¨¨n cuando tienen dudas. Es un trabajo hermoso, con mucha conexi¨®n y comunicaci¨®n. Los nenes no s¨®lo aprenden mucho, sino que son el nexo fundamental con la familia. Se convierten en los multiplicadores del mensaje y quienes hacen que sus familias se interesen¡±.

El ciervo de los pantanos es s¨®lo una de las especies que necesita conservaci¨®n. El lobito de r¨ªo recibi¨® el r¨®tulo de ¡°vulnerable¡±, al igual que la pava del monte y otras. Hansen advierte los peligros de la modificaci¨®n del suelo. ¡°Se trasladan actividades productivas de la regi¨®n pampeana a ecosistemas de humedales. Se modifica el h¨¢bitat y eso afecta de forma global a todas las especies del Delta¡±.