El horror en la prisi¨®n de Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora, entre torturas y amenazas de muerte: ¡°Estoy como muerto, me siento aplastado¡±
Un informe m¨¦dico y psicol¨®gico independiente revela las duras condiciones a las que ha sido sometido el periodista guatemalteco y el impacto en su estado de salud y de ¨¢nimo: ¡°Sufre un luto devastador por toda la vida que ha perdido¡±
Las torturas comenzaron la noche en la que trasladaron al periodista guatemalteco Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora a una prisi¨®n militar. Esa velada hubo seis allanamientos a su celda por parte de agentes antinarc¨®ticos acompa?ados con perros, desde las 20:00 horas hasta el inicio de la madrugada. Entraban con los animales adiestrados que se sub¨ªan a su camastro, daban vueltas por la m¨ªnima mazmorra en la que apenas entraba algo de luz y los oficiales registraban una y otra vez todos sus art¨ªculos personales. A Zamora no se le permiti¨® dormir y tuvo miedo por su integridad. ¡°Me acost¨¦ encogido sobre la toalla grande que me hab¨ªa enviado mi mujer, todo estaba sucio y sin cobijas¡±, ha relatado el periodista al m¨¦dico y psic¨®logo vasco Carlos Mart¨ªn Beristain, que ha hecho una valoraci¨®n independiente del estado de salud y mental de Zamora, quien ha denunciado una persecuci¨®n pol¨ªtica por su trabajo period¨ªstico. El estudio, al que ha podido acceder EL PA?S, revela que el director del desaparecido elPeri¨®dico ha sufrido tortura, amenazas de muerte, tratos crueles y degradantes, humillaciones y ha sido detenido en una celda con condiciones insalubres que han deteriorado su condici¨®n f¨ªsica. ¡°Sufre un luto devastador por toda la vida que ha perdido¡±, afirma Beristain en su estudio m¨¦dico.
Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora fue detenido en su casa de Ciudad de Guatemala el 29 de julio de 2022. Las autoridades desplegaron un operativo desproporcionado, con una veintena de oficiales con pasamonta?as y armados con fusiles, como si se tratara de la detenci¨®n de un peligroso terrorista o narcotraficante. Los oficiales entraron a la casa con violencia, por el techo y los muros de la vivienda. Zamora estaba en ese momento con algunos familiares, entre ellos su nuera y nietos. El asalto violento a su domicilio se dio a pesar de que el fiscal que lo dirigi¨® contaba con una orden judicial para el allanamiento. La requisa dur¨® 20 minutos, pero las autoridades estuvieron en la casa por m¨¢s de siete horas. ¡°Cuando llegaron a mi casa, mi nuera acababa de llegar de EE UU y pidi¨® proteger a los menores para estar en un sitio aparte, pero la fiscal le quit¨® su pasaporte diciendo que quedaba detenida. La fiscal ley¨® mi orden de aprensi¨®n, pero no dijeron los delitos por los que se me acusaba, por ser, seg¨²n dijo, un caso confidencial y reservado¡±, ha contado Zamora. Las autoridades no le informaron en ning¨²n momento el motivo de la detenci¨®n. El periodista fue trasladado primero a las celdas de la llamada Torre Tribunales, la sede del Poder Judicial en Guatemala, y m¨¢s tarde al cuartel ¡®Mariscal Zavala¡¯, donde comenz¨® el trato denigrante.
El periodista ha contado al especialista que lo ha evaluado que desde un inicio las autoridades intentaron incriminarlo en delitos graves, como el narcotr¨¢fico. En una de esas primeras noches en la mazmorra militar, un polic¨ªa le alert¨® de que un nuevo allanamiento ser¨ªa realizado en la celda. ¡°Vienen a sembrarle coca¨ªna¡±, le advirti¨®. Zamora cont¨® con el apoyo de sus carceleros, que en una muestra de cordialidad se mantuvieron dentro del lugar y grabaron todo el proceso. Cuando los polic¨ªas dejaron la celda, los custodios dijeron al periodista: ¡°Tuvimos ¨¦xito, no pudieron sembrarle la coca¨ªna¡±. Zamora respir¨® aliviado. ¡°Le debo la vida a ¨¦l [al guardi¨¢n que lo alert¨®], porque habr¨ªa sido un titular: Coca¨ªna en la bartolina de Zamora¡±, ha dicho el reportero al m¨¦dico que lo entrevist¨®. Ha agregado que este tipo de incidentes continuaron en los primeros 11 d¨ªas, incluyendo la visita de militares que no lo dejaban dormir como m¨¦todo de tortura. ¡°D¨¦janos que le demos la bienvenida¡±, dijeron en chanza, seg¨²n ha contado Zamora.
Esas acciones solo fueron el inicio de la pesadilla. Una de las formas de torturar al periodista ha sido infestar su celda con insectos, que han deteriorado su salud. Zamora ha relatado que agentes del centro penitenciario han dejado dentro de la mazmorra sobres llenos de bichos que se metieron en el colch¨®n, las mantas, las paredes y produjeron lesiones en su cuerpo. ¡°Un bicho se met¨ªa por debajo de la piel, hac¨ªa canales; otro me dej¨® la piel de los codos como colgajos. Otro que era como un pulpito blanquecino, como una sanguijuela que mord¨ªa, y tambi¨¦n hab¨ªa chinches. Eran diferentes tipos de bichos¡±, ha contado. La plaga dur¨® cuatro meses y gener¨® una fuerte sintomatolog¨ªa de prurito, dermatitis, dolor, fuerte malestar y terror nocturno. A pesar de denunciarlo ante las autoridades, estas hicieron poco, y fue el uso de pesticidas por parte de sus familiares lo que ayud¨® a aliviar ese infierno.
Tratos crueles y humillaci¨®n
Los tratos crueles contra el periodista incluyen la humillaci¨®n sexual. Zamora recib¨ªa constantes visitas de uno de los directores de la prisi¨®n, que lo abordaba de forma tan hostil que el periodista ha dicho: ¡°Sent¨ªa que quer¨ªa pegarme a la menor cosa¡±. Este directivo, ha relatado, pidi¨® a los custodios que le avisaran cuando escucharan que Zamora se duchaba, entonces se presentaba en la celda y exig¨ªa verlo. ¡°Abr¨ªa la puerta met¨¢lica de la celda y dec¨ªa: ¡®Salga¡¯. Yo le dec¨ªa que estaba desnudo, pero ¨¦l insist¨ªa¡±, seg¨²n ha contado. El autor del informe ha determinado que estas acciones ¡°constituyen formas de humillaci¨®n sexual, usando el desnudo como una forma de violaci¨®n de la intimidad¡±. El mismo directivo tambi¨¦n neg¨® al periodista en ocasiones las visitas familiares, as¨ª como revisiones de sus pertenencias y cosas que le hab¨ªa llevado su esposa, como sus libros.
Zamora est¨¢ apresado en una celda dividida en dos partes por una pared de 2,50 metros de ancho y el mismo tama?o de alto. En una de las partes est¨¢ el tubo que le sirve de ducha, el lavabo y el inodoro, sin que haya puerta de separaci¨®n. La celda, seg¨²n la descripci¨®n del m¨¦dico, cuenta con una gruesa puerta de hierro con una ventana central cerrada y que se abre rodando de izquierda a derecha, ¡°mediante una fuerza considerable y que hace un muy fuerte ruido al desplazarse y golpear tanto al abrir como al cerrar¡±. Esa habitaci¨®n cuenta apenas con cuatro peque?as entradas de aire, en una rejilla, ¡°por las que entra algo de luz a la celda durante las horas centrales del d¨ªa¡±, pero, con la puerta cerrada, el lugar ¡°muestra una situaci¨®n de penumbra que no permite siquiera leer¡±. El polvo del campo de la c¨¢rcel invade todos los d¨ªas la mazmorra, por lo que Zamora ha contado: ¡°Tengo que lavarme cada d¨ªa los lagrimales, y la voz tambi¨¦n me ha afectado mucho. Si no barro un d¨ªa, se acumula una capa de polvo en el suelo, libros, objetos de la celda¡±. Las autoridades tambi¨¦n han dejado al periodista sin agua hasta por 15 d¨ªas, lo que ha empeorado las condiciones de salubridad del lugar y la higiene de Zamora.
Todos estos vej¨¢menes han afectado su salud. La valoraci¨®n m¨¦dica ha arrojado que el periodista sufre de gastritis cr¨®nica, esofagitis por reflujo, candidiasis esof¨¢gica leve, presencia de bacilos compatibles con bacterias Helicobacter pylori y adenoma tubular del colon. ¡°Las condiciones de deprivaci¨®n y la ansiedad y situaci¨®n psicol¨®gica empeoran la sintomatolog¨ªa g¨¢strica y digestiva¡±, alerta el m¨¦dico. Zamora tambi¨¦n sufre de dolores en la columna y en extremidades. ¡°Jos¨¦ Rub¨¦n refiere episodios nocturnos diarios de despertarse en la noche con fuertes calambres y agarrotamiento de extremidades que le llevan a tener que levantarse y realizar algunos ejercicios de estiramiento y masaje en las zonas m¨¢s afectadas, episodios que tienen una duraci¨®n de 30 a 40 minutos, desde hace 16 meses aproximadamente¡±, relata el m¨¦dico. Luego est¨¢n las secuelas en la piel por las plagas y una p¨¦rdida de peso preocupante: el periodista, que pesaba 79 kilos ha perdido 17 en los ¨²ltimos meses.
A estos problemas f¨ªsicos se unen las zancadillas hechas por las autoridades judiciales para que Zamora pueda contar con defensa y el acceso a un proceso justo. La mayor¨ªa de los abogados contratados por sus hijos han debido renunciar al caso y muchos de ellos han tenido que marchar al exilio por temor a represalias. Las autoridades han nombra abogados de oficio, pero tambi¨¦n los han cambiado constantemente, lo que impide que puedan empaparse del caso. En varias sesiones judiciales se le ha prohibido tomar la palabra para defenderse, adem¨¢s de que le han sometido a horas de espera antes de las audiencias, con las manos esposadas y en un cuartos asfixiantes al lado de decenas de presos. Sus familiares tambi¨¦n han sufrido intimidaci¨®n y persecuci¨®n, a tal punto que Zamora les ha pedido que abandonen el pa¨ªs para evitar que sean usados como forma de chantaje.
Zamora ha se?alado a los integrantes de la llamada Fundaci¨®n contra el Terrorismo, un oscuro organismo de extrema derecha compuesto por pol¨ªticos, empresarios y exmilitares, de presionar a las autoridades para que encarcelen a su esposa e hijos para que ¨¦l acepte cargos criminales y pida perd¨®n por sus investigaciones period¨ªsticas. Fue entonces cuando les pidi¨® que dejen Guatemala. ¡°Vine de una audiencia y solo me dieron 5 minutos para hablar con ella [su esposa]. Le dije que hay un vuelo a las 12 de la noche adonde vive mi hijo chiquito. No creo que vas a poder regresar, van a buscar la manera de meterte en la c¨¢rcel y si eso pasa estoy perdido, voy a aceptar lo que me pidan, ten¨¦s que irte. Ella sali¨®, y ya no regres¨®¡±, ha narrado el periodista.
El m¨¦dico Beristain bas¨® su peritaje en el Protocolo de Estambul, documento reconocido internacionalmente y publicado por el Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas (ACDHNU) como la gu¨ªa para la evaluaci¨®n de denuncias y posibles hechos de tortura. Su examen fue realizado durante el 8 y 9 de marzo pasados en sesiones organizadas entre la ma?ana y el mediod¨ªa y por las tardes en la celda donde est¨¢ recluido Zamora. El m¨¦dico ha concluido que el periodista es v¨ªctima de torturas y que sufre problemas m¨¦dicos y psicol¨®gicos debido a esos maltratos, pero tambi¨¦n a una larga historia de persecuci¨®n: Zamora ha sido v¨ªctima de atentados, secuestros, amenazas de muerte y violencia pol¨ªtica.
Recurso ante la ONU
Beristain ha afirmado de que ¡°todas esas situaciones constituyen antecedentes significativos del nivel de persecuci¨®n y violencia previa de que fue objeto, as¨ª como de la relaci¨®n de su trabajo y publicaciones con la violencia, amenazas, atentados y presiones econ¨®micas, hechos que son muy relevantes para comprender los impactos sufridos. Zamora ha sufrido atentados con bombas y disparos, amenazas, presiones econ¨®micas y ataques personales por su trabajo. Todas ellas constituyen experiencias traum¨¢ticas, estresantes y amenazantes para la vida, que han tenido fuertes impactos en su vida y la de su familia¡±. Ha agregado que la condici¨®n de salud del periodista y las afectaciones que sufre ¡°no son consecuencia de una mera restricci¨®n de la libertad, sino que tienen su causa en la tortura y maltrato sufridos, las p¨¦simas condiciones de salubridad, el aislamiento emocional, sensorial y la deprivaci¨®n a que ha sido sometido, as¨ª como al maltrato de que ha sido objeto de forma reiterada, la arbitrariedad y la falta de reglas b¨¢sicas o posibilidades de tener la m¨ªnima certidumbre sobre las acusaciones, posibilidades de defensa y garant¨ªas judiciales¡±.
Jos¨¦ Carlos Zamora, hijo del periodista detenido, ha informado este jueves de que el equipo legal que han conformado para defender a su padre ha presentado un recurso urgente ante el Relator Especial de la ONU sobre la Tortura para protegerlo y asegurar su liberaci¨®n. ¡°El mundo est¨¢ observando. Guatemala debe poner fin a esta persecuci¨®n pol¨ªtica y liberarlo¡±, ha dicho Zamora. ¡°Mi pap¨¢ ha sido detenido arbitrariamente por m¨¢s de 700 d¨ªas, enfrentando un trato inhumano documentado por un experto independiente. A pesar de esto, las autoridades guatemaltecas se niegan a liberarlo y a retirar los cargos espurios¡±, ha agregado.
El m¨¦dico Beristain ha alertado en su informe de que ¡°hay una escalada de impacto psicol¨®gico por indefensi¨®n que se a?ade a la tortura vivida por amenazas, coacciones, infestaci¨®n, aislamiento, deprivaci¨®n y tratos crueles, inhumanos y degradantes a que ha sido sometido¡±. Aunque Zamora se ha mostrado valiente a lo largo del horror al que ha sido sometido desde que fue apresado hace m¨¢s de dos a?os, en su conversaci¨®n con el m¨¦dico se ha mostrado vulnerable y quebrado. ¡°Estoy como muerto, un muerto con los libros. La vida sigue avanzando, pero yo estoy paralizado¡±, ha dicho. Y ha agregado: ¡°Ahora estoy aplastado¡±.
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