Los ¡°desaparecidos¡± de Ortega: nada se sabe de nueve presos pol¨ªticos en Nicaragua

El 5 de septiembre de 2024, cuando el r¨¦gimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo desterr¨® a 135 presos pol¨ªticos hacia Guatemala, en las prisiones de Nicaragua quedaron 36 personas tambi¨¦n consideradas reos de conciencia. Hasta la fecha, la administraci¨®n sandinista no s¨®lo no ha revelado la lista de los expulsados del pa¨ªs, sino que guarda las identidades, el paradero, la condici¨®n f¨ªsica y de salud de quienes no fueron excarcelados.

Para los familiares de los 36 presos pol¨ªticos, las semanas de septiembre han sido angustiantes. Los pocos que han podido visitar a los detenidos dan cuenta de la desesperaci¨®n en la que se encuentran: mezclas de ansiedad y depresi¨®n por el hecho de no haber sido excarcelados, a pesar de que eso suponga el despojo de su nacionalidad nicarag¨¹ense y la confiscaci¨®n de sus bienes, tal cual ha sucedido con los dos grupos presos pol¨ªticos desterrados, primero los 222 expulsados a Estados Unidos en febrero de 2023 y los recibidos por el Gobierno de Bernardo Ar¨¦valo.

La operaci¨®n para trasladar a las 135 personas hacia ciudad de Guatemala fue coordinada por el Gobierno de Estados Unidos y el de Ar¨¦valo, pero ellos no han dado a conocer el listado oficial de desterrados, alegando que eso le corresponde a Managua. Durante los primeros d¨ªas de la expulsi¨®n de Nicaragua de los 135 presos pol¨ªticos, organismos de derechos humanos trabajaron sin descanso identificando a las personas que fueron recibidas por los chapines. Se concluy¨® que en Managua quedaron al menos 36 presos pol¨ªticos, entre ellos nueve casos considerados de extrema gravedad: personas que desde que fueron detenidas por polic¨ªas o civiles se desconoce su paradero.

No solo sus familiares no han logrado saber c¨®mo y d¨®nde est¨¢n, sino que nunca han sido presentados ante un juez para hacerles imputaciones pol¨ªticas. El Gobierno tampoco ha asumido, por ning¨²n medio, que est¨¢n bajo su cautiverio. A pesar de la insistencia de los organismos de derechos humanos y familiares, el r¨¦gimen sandinista guarda absoluto silencio sobre estas nueve ¡°desapariciones forzadas¡±. La zozobra ha hecho elucubrar sobre el estado de estas personas: ¡°?C¨®mo est¨¢n? ?Est¨¢n graves de salud? ?D¨®nde est¨¢n? ?Est¨¢n vivos?¡±, son algunas de las preguntas m¨¢s urgentes que se plantean sus seres queridos, quienes prefieren el anonimato para evitar represalias.

La Coalici¨®n Nicaragua Lucha, un consorcio de organizaciones defensoras de de derechos humanos como la Unidad de Defensa Jur¨ªdica (UDJ), denunciaron ante Naciones Unidas lo que califican como ¡°terrorismo de Estado¡±: ¡°Denunciamos el retorno intensificado del patr¨®n de desapariciones forzadas, y ¡®de corta duraci¨®n¡¯ por motivos pol¨ªticos en Nicaragua como un instrumento para reprimir a los opositores y cr¨ªticos al r¨¦gimen autoritario de Daniel Ortega y Rosario Murillo¡±.

¡°Denunciamos que, como una estrategia de control absoluto sobre el territorio y la vida nicarag¨¹ense, las desapariciones forzadas de ¡®corta duraci¨®n¡¯ se incrementaron reproduciendo las violaciones a los derechos de las v¨ªctimas y sus familias¡±, aseguran en un comunicado emitido esta semana. ¡°La desaparici¨®n forzada constituye un crimen de lesa humanidad. Se hace primordial profundizar sobre la situaci¨®n de Nicaragua para la presi¨®n internacional con acciones concretas contra la impunidad del r¨¦gimen autoritario de Ortega y Murillo¡±.

Un diputado ind¨ªgena y una periodista

Entre los casos m¨¢s sonados de ¡°desaparici¨®n forzada¡± se encuentran el diputado y l¨ªder ind¨ªgena Brooklyn Rivera y la comunicadora social Fabiola Tercero. Desde que fueron detenidos no se sabe nada de su paradero. Rivera, otrora aliado del sandinismo, fue arrestado en marzo de 2023. Mientras que Tercero fue capturada en julio de 2024.

Las otras personas en paradero desconocido son: Jaime Navarrete Bland¨®n, Eddie Gonz¨¢lez Valdivia, Gerson Zeled¨®n Motta, Carmen S¨¢enz Mart¨ªnez, Lesbia Guti¨¦rrez Poveda, Evelyn Matus Hern¨¢ndez y Domingo Mung¨ªa Carri¨®n.

Los organismos de derechos humanos a¨²n no identifican como presos pol¨ªticos a los funcionarios sandinistas y trabajadores p¨²blicos que han sido defenestrados por la pareja presidencial, en medio de ¡°una purga¡± y ¡°compactaci¨®n del Estado¡±. Una campa?a de ¡°cortes de cabeza¡± en las instituciones p¨²blicas que viene ejerciendo la ¡°copresidenta¡± Rosario Murillo desde hace meses, como parte de su plan de garantizar ¡°lealtades¡± para la sucesi¨®n din¨¢stica. La raz¨®n de porqu¨¦ estos sandinistas no figuran en las listas de presos pol¨ªticos es porque los organismos de derechos humanos necesitan la denuncia de un familiar para empezar a investigar.

Nuevas detenciones

Hasta este 25 de septiembre, el Mecanismo de Reconocimiento de Personas Presas Pol¨ªticas cifra en 45 los reos de conciencia. Es decir que a los 36 que quedaron en prisi¨®n se les suman otros nueve.

¡°Entre agosto y septiembre, se ha mantenido un estado de persecuci¨®n y represi¨®n generalizada en la sociedad nicarag¨¹ense. Esta represi¨®n ha alcanzado a la feligres¨ªa religiosa. Actualmente integran la lista por motivo de persecuci¨®n religiosa dos laicos de la Iglesia Cat¨®lica y un pastor Bautista¡±, recoge la organizaci¨®n basada en el exilio.

El Mecanismo de Reconocimiento de Personas Presas Pol¨ªticas resalta que han recibido informaci¨®n sobre amenazas y hostigamientos hacia familiares de los reos de conciencia que est¨¢n dentro de Nicaragua. ¡°Esto evidencia una estrategia de control y violencia que se ha intensificado en los ¨²ltimos a?os. No solo se enfrentan a detenciones arbitrarias. Estas personas contin¨²an siendo v¨ªctimas de amenazas y actos de intimidaci¨®n por parte de la polic¨ªa y las autoridades, vulnerando gravemente sus derechos¡±, denuncian.

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