Bolivia extraditar¨¢ a Estados Unidos a un exjefe antidrogas de Evo Morales

La Justicia boliviana autoriz¨® la extradici¨®n a Estados Unidos del exjefe antidrogas del ¨²ltimo Gobierno de Evo Morales, el coronel de la Polic¨ªa Maximiliano D¨¢vila, que se encontraba detenido preventivamente. D¨¢vila ocup¨® el cargo de comandante de la Fuerza Especial de Lucha contra el Narcotr¨¢fico entre 2018 y 2019 y est¨¢ acusado de ¡°conspiraci¨®n para fabricar e introducir coca¨ªna en Estados Unidos¡± por un Tribunal de Nueva York. Ser¨¢ la primera extradici¨®n de un boliviano a este pa¨ªs en las dos d¨¦cadas de gobiernos del Movimiento al Socialismo (MAS): desde que en 2008 el embajador estadounidense fuera expulsado de Bolivia, las autoridades del MAS mantuvieron escasas y dif¨ªciles relaciones con la potencia norteamericana. Se trata de un giro hecho realidad gracias a las condiciones creadas por la batalla pol¨ªtica entre el presidente Luis Arce y Morales, quien en agosto de este a?o declar¨® que hab¨ªa ¡°una orden de arriba¡± para vincularlo con D¨¢vila y extraditarlo posteriormente tambi¨¦n a ¨¦l.

La m¨¢xima autoridad judicial boliviana, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), resolvi¨® este mi¨¦rcoles autorizar la extradici¨®n solicitada por Estados Unidos en el marco del tratado que sobre la materia firmaron ambos pa¨ªses el siglo pasado. La defensa de D¨¢vila intent¨® impedir este desenlace hasta el ¨²ltimo momento, alegando que no se hab¨ªan cumplido los procedimientos de ley. La solicitud de extradici¨®n se formaliz¨® en octubre, tras recibirse el exhorto del Tribunal del Distrito Sur de Nueva York, el cual acusa a D¨¢vila de producir y traficar drogas hacia Estados Unidos. La solicitud fue aprobada por la Fiscal¨ªa General y, ahora, por el TSJ, lo que significa que existe aprobaci¨®n pol¨ªtica. En consecuencia, el camino est¨¢ allanado para la salida de D¨¢vila de Bolivia en un momento que no se ha determinado a¨²n.

Maximiliano D¨¢vila est¨¢ preso desde el 22 de enero de 2022 por orden del ministro de Gobierno (Seguridad), Eduardo del Castillo, quien impidi¨® que el exjefe policial fugara a Argentina, como planeaba. Entonces se acababa de conocer que la Administraci¨®n de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por su sigla en ingl¨¦s) acusaba a D¨¢vila de ser parte de una red de protecci¨®n de narcotraficantes y tr¨¢fico liderada por el ex mayor de la Polic¨ªa Omar Rojas, que esperaba su extradici¨®n a Estados Unidos en una prisi¨®n colombiana.

Seg¨²n un agente de la DEA que oper¨® encubierto, ambos polic¨ªas ¡°utilizaron sus cargos oficiales y conexiones para obtener el acceso a aer¨®dromos bolivianos con el fin de facilitar los cargamentos de coca¨ªna¡± y ¡°organizar la protecci¨®n por parte de las fuerzas del orden¡±.

Posteriormente, apareci¨® un informe de la Polic¨ªa que acusaba a D¨¢vila de haber frustrado, en su condici¨®n de jefe antidrogas, una redada polic¨ªaca en un aer¨®dromo rural cercano a Santa Cruz de la Sierra. Esto supuestamente ocurri¨® en julio de 2019. El aer¨®dromo fue objeto de sospechas despu¨¦s, pero, por falta de pruebas, las autoridades no pudieron impedir que continuara sus actividades presuntamente ilegales. En marzo de 2022 fue intervenido por Del Castillo, que con ese gesto respond¨ªa las cr¨ªticas pol¨ªticas que hab¨ªa despertado su manejo del caso D¨¢vila.

La detenci¨®n de D¨¢vila no se debi¨® a cargos de narcotr¨¢fico sino de ¡°enriquecimiento il¨ªcito¡±, porque Bolivia no ten¨ªa pruebas de la vinculaci¨®n del coronel con las drogas que deb¨ªa combatir. La acusaci¨®n bast¨® para mantenerlo en prisi¨®n hasta ahora.

El arresto gener¨® un impasse entre Del Castillo, que es uno de los colaboradores m¨¢s cercanos del presidente Arce, y los sectores m¨¢s pr¨®ximos a Evo Morales, que cuestionaron que el ministro estuviera siguiendo la ¡°agenda de la DEA¡±. Cuando era presidente, Morales expuls¨® a esta instituci¨®n estadounidense de Bolivia y prometi¨® darle un car¨¢cter nacional a la lucha contra el tr¨¢fico de drogas.

Cuando la extradici¨®n de D¨¢vila ya estaba en marcha, Morales declar¨® que en septiembre u octubre de 2021 la encargada de negocios de la Embajada de Estados Unidos, Charisse Phillips, hab¨ªa pedido a Del Castillo detener a D¨¢vila, porque este estaba a punto de irse de Bolivia.

Tras su detenci¨®n, D¨¢vila declar¨® a la prensa: ¡°Soy inocente, soy v¨ªctima de ese peque?o burgu¨¦s que es el Ministro de Gobierno [Del Castillo], peque?o burgu¨¦s, no sabe lo que hace en este Estado Plurinacional Comunitario¡±. Y sugiri¨® que Del Castillo quer¨ªa vincular a Morales con el narcotr¨¢fico. Seguidamente, el ala ¡°evista¡± del MAS, en ese momento a¨²n incipiente y parte integrante del Gobierno de Arce, trat¨® de censurar al ministro de Gobierno en el Parlamento.

Dos antiguos funcionarios de las gestiones del l¨ªder del MAS rechazaron cualquier posibilidad de que Morales estuviera al tanto de las actividades il¨ªcitas de D¨¢vila cuando este serv¨ªa como su jefe antidroga. Por su parte, el expresidente afirm¨® que nunca tuvo relaci¨®n directa con D¨¢vila, y que fue nominado por sus ministros. Al mismo tiempo, denunci¨® que se acercaban al coronel en prisi¨®n para ofrecerle: ¡°Hablas contra Morales y te liberas¡±.

El impasse marc¨® el alejamiento de Morales de Arce, que siempre respald¨® a Del Castillo. Tras su extradici¨®n, Maximiliano D¨¢vila todav¨ªa puede cumplir un papel en el desangramiento mutuo de los l¨ªderes de la izquierda.

Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S Am¨¦rica y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la regi¨®n.