Petro nombra ministro de Defensa al general que rescat¨® a los ni?os perdidos en la selva
Colombia tendr¨¢ con Pedro S¨¢nchez el primer ministro militar desde la Constituci¨®n de 1991


Gustavo Petro ha nombrado este mi¨¦rcoles ministro de Defensa a Pedro S¨¢nchez, el general que comand¨® la b¨²squeda de los ni?os perdidos en la selva. Los menores, que sobrevivieron a un accidente de avioneta en el que murieron su madre y el piloto, fueron rescatados despu¨¦s de 40 d¨ªas deambulando por la Amazon¨ªa. La historia de los ni?os ind¨ªgenas se convirti¨® en un fen¨®meno universal del que se han hecho documentales y libros. Serio, conciso y muy abierto a explicar los operativos a los periodistas, S¨¢nchez se hizo muy popular. Entre su tropa se le reconoce un carisma y un trato amable que contrasta con la brusquedad del mundo castrense.
S¨¢nchez tiene por delante una tarea descomunal. La paz total de Petro no ha funcionado. El presidente quer¨ªa negociar y rendir a todos los grupos armados al mismo tiempo y no ha sido posible, ni siquiera con quien parec¨ªa m¨¢s factible, el ELN. La seguridad se ha deteriorado. En el Catatumbo, una regi¨®n fronteriza con Venezuela, la guerrilla est¨¢ cometiendo asesinatos selectivos y se enfrenta a fuego a campo abierto contra otros grupos criminales. En el ca¨®tico Consejo de Ministros de hace dos semanas, retransmitido en vivo, la ministra de Justicia dijo que el operativo desplegado en ese territorio por el Gobierno no hab¨ªa funcionado y que la violencia contin¨²a, al igual que en otras regiones.
Su nombramiento no sorprende por ser ¨¦l, sino porque Petro, un exguerrillero, sea el primer presidente que coloca a un militar a cargo de un ministerio desde que Colombia cambi¨® su Constituci¨®n en 1991. La medida puede resultar pol¨¦mica, ya que la izquierda ped¨ªa en los a?os ochenta que Defensa lo encabezara un civil. El nombre de S¨¢nchez se pronunciaba en el Palacio de Nari?o, la residencia presidencial, desde el milagro que supuso la aparici¨®n de los menores, encontrados en un primer momento por rastreadores ind¨ªgenas y sacados de la selva con vida por los militares de ¨¦lite. Hace un mes, se especul¨® con que el general iba a ocuparse de la seguridad personal del presidente.
El presidente anunci¨® en redes sociales su decisi¨®n y de paso critic¨® a Benjam¨ªn Netanyahu y Donald Trump: ¡°En el mundo generales israel¨ªes bombardean y matan 17.000 ni?os en Gaza, autoridades de los EEUU mandan ni?os con sus padres encadenados por ser migrantes. En Colombia los que se llamaban antes revolucionarios, por pura codicia traqueta, asesinan los ni?os de su propio pueblo¡±. ¡°Yo nomino como ministro de defensa de la Colombia: Potencia Mundial de la Vida a quien salv¨® la vida, al lado de los ind¨ªgenas y la selva, a ni?os y ni?as ind¨ªgenas que hoy corren alegres y libres. Es mi mensaje al mundo para que dejen de asesinar ni?os por la codicia y luchen por la vida. El general Pedro S¨¢nchez nos ayudar¨¢ a llevar a Colombia a la paz¡±, a?adi¨®.
S¨¢nchez llega en un momento cr¨ªtico para la defensa del pa¨ªs. Adem¨¢s de la crisis en el Catatumbo, existen otros 11 focos de violencia. Muchos expertos aseguran que el problema de fondo es que con la pol¨ªtica de paz de Petro se reemplaz¨® la de seguridad. La apuesta era negociar con los grupos armados en vez de fortalecer las operaciones de combate o inteligencia. El nuevo ministro tambi¨¦n podr¨ªa enfrentar una situaci¨®n compleja al poco de llegar si la c¨²pula militar dimite. Existe una regla no escrita en el mundo castrense, por la cual abandonan su cargo cuando se rompe la jerarqu¨ªa o la antig¨¹edad. Una posibilidad ser¨ªa que S¨¢nchez pidiera la baja y tomara posesi¨®n como civil.
El Gobierno se encuentra en plena ebullici¨®n. Despu¨¦s del Consejo de Ministros han renunciado 5 ministros y otros 23 altos cargos. La vicepresidenta Francia M¨¢rquez tambi¨¦n medita marcharse. El encargado de sus asuntos m¨¢s pr¨®ximos, Jorge Rojas, se fue enfadado por el nombramiento como asesor principal de Armando Benedetti, que se ha visto envuelto en varios esc¨¢ndalos en estos dos ¨²ltimos a?os. Otro cercano a Petro, Augusto Rodr¨ªguez, ha acusado de corrupci¨®n a Benedetti -este le ha demandado por calumnias- y ha revelado que la campa?a presidencial estuvo a punto de recibir una donaci¨®n de 110.000 d¨®lares de un contrabandista.
D¨ªa s¨ª y d¨ªa tambi¨¦n la gente de su alrededor se enfrenta entre s¨ª. El ministro de Comercio ha hecho p¨²blico un documento en el que detalla con nombres y apellidos qui¨¦n le pidi¨® cargos relevantes cuando era director de la direcci¨®n de Impuestos y aduanas. Se asemeja a un tratado de la pol¨ªtica clientelista en Colombia. En estas circunstancias la gobernabilidad resulta dif¨ªcil. Petro reconoce que no se han cumplido muchas de las promesas que hizo en campa?a y asegura que ha puesto el acelerador para que estas se cumplan. Con Benedetti a su lado, conf¨ªa en mejorar las alianzas con otras bancadas del Congreso y preparar a un posible sucesor o sucesora en 2026 que no borre lo que ha hecho.
A Petro no le sobrevive ning¨²n ministro de su primer Gabinete. Solo queda la ministra de Medio Ambiente, Susana Muhamad, quien de todos modos ya ha presentado su renuncia y se marchar¨¢ en marzo despu¨¦s de dejar zanjados algunos proyectos. En este contexto no resulta f¨¢cil encontrar ministros de peso. Queda a?o y medio por delante para no terminar de fallarle ¡°al pueblo¡± y cumplir con el cambio prometido. Petro vive una restructuraci¨®n total en todo lo que le rodea.
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