La oposici¨®n a Milei en el Congreso tumba una partida de 100 millones de d¨®lares para los servicios de Inteligencia

Javier Milei ha encontrado una vez m¨¢s un muro en el Congreso argentino. Este mi¨¦rcoles, la oposici¨®n en Diputados tumb¨® con una amplia mayor¨ªa de votos un decreto con su firma que aument¨® en 100.000 millones de pesos (unos 100 millones de d¨®lares al cambio oficial) el dinero destinado a la Secretar¨ªa de Inteligencia del Estado (SIDE). La votaci¨®n, que debe ser refrendada por el Senado para la anulaci¨®n definitiva del decreto, es un dur¨ªsimo golpe para el Gobierno ultraderechista, que en medio del ¡°mayor ajuste fiscal de la historia de la humanidad¡±, como celebra Milei, ha destinado a la seguridad partidas extraordinarias de fondos. El rechazo muestra tambi¨¦n las grietas que ya exhibe la alianza parlamentaria entre Milei y el expresidente Mauricio Macri (2025-2019). Cansado de que el ultra no abra espacios en la Administraci¨®n, Macri ha comenzado a tomar distancia. Sus diputados votaron en contra del decreto junto con la oposici¨®n peronista y fueron claves para dar el quorum necesario para el inicio de la sesi¨®n parlamentaria.

La oposici¨®n ya hab¨ªa dado un toque de atenci¨®n a Milei. El martes, puso a uno de los suyos al frente de la comisi¨®n del Congreso que debe controlar los gastos de los servicios de inteligencia. Este mi¨¦rcoles volvi¨® a encontarla unida.

Los servicios de Inteligencia han merecido especial atenci¨®n desde el inicio de la gesti¨®n de Milei. En su modelo ideal de Gobierno hay un Estado m¨ªnimo que se desentiende de sus obligaciones en educaci¨®n, salud y ayuda social y concentra todos sus esfuerzos en seguridad interior y Defensa. Adem¨¢s de negar las atrocidades de la ¨²ltima dictadura, el presidente ha invertido parte del presupuesto en armamento y subidas de salarios en las Fuerzas Armadas. El 16 de julio pasado, avanz¨® sobre la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), una herencia de los gobiernos de N¨¦stor y Cristina Kirchner. Milei disolvi¨® la AFI y la reemplaz¨® por una estructura de cuatro oficinas que responden directamente al presidente y se llama SIDE (Secretar¨ªa de Inteligencia del Estado), el nombre que los servicios secretos fundados en 1946 llevaron hasta 2015. El argumento de la Casa Rosada fue que la AFI fue ¡°utilizada para actividades espurias como el espionaje interno, el tr¨¢fico de influencias y la persecuci¨®n pol¨ªtica e ideol¨®gica¡±. Al mismo tiempo, otro decreto otorgaba a la nueva SIDE una partida extraordinaria de 100 millones de d¨®lares en concepto de ¡°gastos reservados¡±, es decir dinero que puede ser utilizado sin rendir cuentas.

La oposici¨®n ha visto en la nueva SIDE un avance del Estado sobre las estructuras de control interior. La agencia tiene un largo historial de espionaje en contra de pol¨ªticos, activistas y periodistas. Y se mostr¨® especialmente ineficiente cuando tuvo que prevenir dos atentados terroristas: en 1992 contra la embajada de Israel en Buenos Aires y dos a?os despu¨¦s cuando un coche bomba vol¨® por los aires la sede de la mutual jud¨ªa AMIA. La subida por decreto (DNU) de las partidas destinadas a los gastos reservados no hicieron m¨¢s que aumentar las sospechas en ese sentido. Detr¨¢s de la estructura de inteligencia est¨¢ adem¨¢s un personaje opaco, Santiago Caputo, un funcionario de 38 a?os que no tiene cargo pero oficia de asesor estrella de Milei y de su ¡°guerra cultural¡± contra todo lo que consideran ¡°casta pol¨ªtica¡±.

La sesi¨®n del mi¨¦rcoles estuvo a punto de caer por falta de qu¨®rum. Fue clave la decisi¨®n de Macri de pedir a sus diputados, alineados bajo la sigla Pro, que bajasen al recinto y votasen en contra. El resultado final fue de 156 votos a favor de la derogaci¨®n y solo 52 negativos. Se sumaron a los votos el Pro lo del peronismo, tanto en su versi¨®n conservadora como kirchnerista, y los de la izquierda. El secror de Pro que responde a Macri public¨® tras la sesi¨®n un comunicado en el que explica porque ha decido tomar distancia de Milei en este caso. ¡°Desde el inicio de esta gesti¨®n, apoyamos al Gobierno en todas las medidas que apuntalaban al cambio en la Argentina (la Ley de Bases, la ampliaci¨®n de datos gen¨¦ticos para seguridad y m¨¢s). Pero este DNU de 100 mil millones de pesos para Inteligencia, en un contexto en el que ¡®no hay plata¡¯, y sin aclarar el uso de los fondos, no es el cambio¡±, cuestionaron.

La respuesta no lleg¨® desde Milei, sino de su ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. La funcionaria fue candidata presidencial del Pro, pero tras la derrota rompi¨® con Macri -aunque no con su partido- y abraz¨® sin matices a la causa de la ultraderecha. ¡°El DNU de fondos para la SIDE es para cuidar a los argentinos. Los diputados que votaron junto al kirchnerismo su rechazo, eligieron ponerse del lado de las mafias, los narcos y el terrorismo. ?Ahora deber¨¢n hacerse cargo!¡±, escribi¨®, en un mensaje dirigido tambi¨¦n a los diputados de su partido que no est¨¢n alineados con la Casa Rosada.

El resultado tiene valor simb¨®lico, pero por no tanto pr¨¢ctico. Resta todav¨ªa que el Senado rechace el decreto para que su anulaci¨®n sea definitiva, algo que nunca ha sucedido desde el regreso a la democracia, en 1983. Milei tom¨® nota de que el peronismo tiene los senadores necesarios para hacer historia y ya reaccion¨® en consecuencia: durante las ¨²ltimas tres semanas, la SIDE ha utilizado el 80% de los 100 millones de d¨®lares que recibi¨®.

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