Caleidoscopio Clua

Clua es m¨²ltiple. Dramaturgo, guionista, director, productor. Autor de 20 obras de muchos tonos y colores: dramas pol¨ªticos y familiares, thrillers, musicales, comedias a lo Neil Simon en clave gay. Llegar y besar el santo: su primera funci¨®n, La piel en llamas, se estren¨® en 2004 y, apunten, brill¨® en Barcelona, Madrid, Estados Unidos, Polonia, Honduras, Reino Unido. Estuvo a punto de llegar al off Broadway, pero en Atenas ya lleva tres producciones. Su tema: los abusos de Occidente en el Tercer Mundo. 2010: Marburg. Hoy, con 10 actores, ser¨ªa una superproducci¨®n, me dijo Clua. Sin embargo, Smiley (2012) es su primer y rotundo zambombazo: con tres teatros en Barcelona, es su obra m¨¢s representada. Estrenada en N¨¢poles y dos temporadas en capitales italianas. ¡°Una comedia hecha para que te olvides de lo que est¨¢ sucediendo afuera¡±, dijo entonces, y no exageraba.

Har¨¢ unas pocas noches vi su segunda parte, Smiley, despu¨¦s del amor, y me di cuenta de que ya hac¨ªa ocho a?os de la primera. Smiley se mont¨® tanto que la ¨²ltima funci¨®n acab¨® en 2015. Tambi¨¦n me llam¨® la atenci¨®n que hubieran pasado todos esos a?os, y los personajes me segu¨ªan pareciendo muy pr¨®ximos en el tiempo. O como si volviera a ver a unos amigos que segu¨ªan pr¨®ximos. Hay mucha gente que se lo ha dicho a Clua: que ten¨ªan muy buen recuerdo del primer Smiley. Como si fuera un reencuentro. Adem¨¢s, me cuenta el autor que trabajar con los mismos actores era una condici¨®n muy poco frecuente, pero la impuso: ¡°Si no lo hac¨ªan Albert Triola y Ramon Pujol, no escrib¨ªa ni la primera l¨ªnea¡±. De Smiley se hicieron 16 producciones. Ahora quedan tan solo dos, en Australia y Singapur, a principios de a?o. A Clua nunca dej¨® de sorprenderle el ¨¦xito de un texto al que muchos llamaban ¡°tan peque?o y tan local¡±. Pero basta verlo y repetirlo para comprobar en cu¨¢ntos sitios ha conectado con el p¨²blico. Y c¨®mo la adaptaban all¨¢ donde pasaba.

En 2015 estren¨® un musical agridulce, 73 raons per deixar-te, al que sigui¨® una adaptaci¨®n de la Il¨ªada para La Joven Compa?¨ªa de Madrid. Y en 2017, todav¨ªa m¨¢s inesperado, le encargaron adaptar La revoltosa en el Teatro de la Zarzuela. El p¨®quer de 2017 se cierra con un ¨¦xito ascendente y dos tonalidades enfrentadas: Al damunt dels nostres cants, una s¨¢tira pol¨ªtica, y La golondrina, una de sus obras m¨¢s representadas internacionalmente, incluso m¨¢s que Smiley; media Sudam¨¦rica, dos a?os en Brasil, Montevideo, Venezuela¡­, pero la gira por Espa?a no ha recalado en Barcelona: no hubo acuerdo con Carmen Maura, la protagonista¡­ y la estrella. La golondrina, con Maura y Dafnis Balduz, volver¨¢ el 13 de noviembre al Infanta Isabel de Madrid (hasta enero, si todo va bien), y preparan una doble producci¨®n de La golondrina: en catal¨¢n, en Barcelona, y en franc¨¦s, con Carmen Maura, en Par¨ªs. Despu¨¦s de Barro (2018), lleg¨® Justicia (2020), que a Clua le vali¨® el Premio Nacional de Literatura Dram¨¢tica correspondiente a este a?o, obra estrenada en el Teatro Nacional de Catalu?a en febrero de 2020, con direcci¨®n de Josep Maria Mestres y un reparto encabezado por Josep Maria Pou y Vicky Pe?a, en dos papeles de alto peso: Samuel Gallart (patriarca, juez pujolista y homosexual oculto) y su esposa, temible matriarca. Justicia es una obra importante, no solo por la riqueza del texto, que cubre desde nuestra Guerra Civil hasta el presente, y el poderoso trabajo actoral y de personajes, sino tambi¨¦n por el galard¨®n castellano a una pieza escrita y representada en catal¨¢n.

Es una funci¨®n donde resonaba, con orgullo, la palabra ¡°compa?¨ªa¡±: unidad de la compa?¨ªa, todos a uno, remando a la vez y en la misma direcci¨®n, y unidad del p¨²blico, que se percib¨ªa en la fuerza del silencio y de los aplausos. Pero estall¨® la pandemia y salt¨® Justicia en pleno ¨¦xito. Guillem Clua tiene una queja totalmente razonable: ¡°Mucha gente nos dec¨ªa: ¡®Esa obra ha de volver porque es necesario que vuelva¡¯. Cuando nos hicieron parar se nos prometi¨® continuar, y luego, de repente, que no. Como si no se quisieran comprometer con el ¨¦xito. Por el Premio Nacional me felicit¨® mucha gente, pero tambi¨¦n hubo silencios incomprensibles¡±. En mayo ten¨ªa que hacerse Smiley, despu¨¦s del amor en el Club Capitol, pero la maldita pandemia cerr¨® el lugar. Los dos actores y Clua decidieron producir, y el Aquit¨¤nia lleg¨® como un regalo ca¨ªdo del cielo. Ahora el teatro vuelve a estar parado, y Clua anda metid¨ªsimo en cine y televisi¨®n: el pr¨®ximo mes se empieza a rodar La piel en llamas, de la que ha escrito tambi¨¦n el guion, dirigida por David Mart¨ªn Porras. Segundo y sorprendente proyecto: Los renglones torcidos de Dios, la novela de Torcuato Luca de Tena, adaptada por Clua y protagonizada por B¨¢rbara Lennie, que se rodar¨¢ el pr¨®ximo verano. Y la propuesta de hacer Justicia en miniserie de seis episodios para una plataforma. ¡°La obra duraba tres horas y deb¨ªa haber durado seis, porque me dej¨¦ muchas cosas en el tintero. Estamos armando el proyecto¡±, concluye Clua.