Mapa posible para el debate cultural en Cuba
Todo lo que hay que leer, ver y o¨ªr para orientarse en un universo tan complejo y rico como polarizado
El campo cultural cubano es diverso, pol¨¦mico y cambiante, as¨ª que cualquier intento por enlistarlo solo puede dar lugar a una foto fija poco fiable. Este mapa propone un tanteo antes que un canon, una ventana abierta antes que un coto cerrado. Una navegaci¨®n posible entre proyectos, obras, colectivos individuos o publicaciones que tienen a la cultura como protagonista.
Activismo
Si hay que buscar un culpable, podr¨ªa ser el ISA (Instituto Superior de Arte de La Habana). Una de las utop¨ªas de la Revoluci¨®n, que alcanz¨® su mayor prestigio en los a?os ochenta del siglo pasado y donde los profesores-artistas ense?aban a sus estudiantes-artistas que el arte pod¨ªa ser un asunto colectivo. As¨ª Ren¨¦ Francisco Rodr¨ªguez (que crea DUPP), o L¨¢zaro Saavedra (que arma Enema). En ese esp¨ªritu se forma Tania Bruguera, quien a trav¨¦s de la C¨¢tedra Arte de Conducta (2002-2009), y del posterior Instituto de Artivismo Hannah Arendt (Instar), expande su proyecto de pedagog¨ªa y arte p¨²blico hacia otras zonas de la sociedad, traspasando los l¨ªmites del gremio. Sin estas experiencias, no se pueden entender el Movimiento San Isidro (MSI), liderado por Luis Manuel Otero Alc¨¢ntara, o el 27N, surgido de la concentraci¨®n de unos trescientos artistas e intelectuales frente al Ministerio de Cultura a finales de 2020. Otra l¨ªnea la abre Omni-Zona Franca, un proyecto socio-comunitario y perif¨¦rico.
El decano de los espacios independientes
Espacio Aglutinador fue fundado por los artistas Sandra Ceballos y Ezequiel Su¨¢rez en 1994. Hoy se mantiene activo tanto en su programaci¨®n como en su filosof¨ªa de la mano de Ceballos. Han sido emblem¨¢ticas sus exposiciones Curadores Go Home!, We Are Porno o Malditos de la Postguerra. Fue el primer espacio dentro de la isla que trat¨® a la di¨¢spora art¨ªstica como un patrimonio de la naci¨®n y no como una maleta de remesas.
Socialismo cr¨ªtico
El pasado febrero, la revista Crisis public¨® un reportaje de fondo con ocho pensadoras y pensadores marxistas de Cuba. Para muchos, result¨® sorprendente que sus apuestas por el socialismo, la soberan¨ªa y el fin del embargo incluyeran tambi¨¦n la democracia o la eliminaci¨®n de la censura en la prensa estatal. Pero esta entrevista no reflejaba un exotismo, sino el emplazamiento de un movimiento, lejos de la socialdemocracia o terceras v¨ªas, que lleva tiempo demostrando que izquierda y gobierno no son sin¨®nimos. Aunque consultan la veterana y progubernamental Temas, que suele abordar en profundidad temas conflictivos de la sociedad y la cultura cubana, los marxistas j¨®venes prefieren La Joven Cuba o Comunistas. El 11J impact¨® notablemente en su mirada cr¨ªtica y la pancarta de un joven (apresado por ello) en una manifestaci¨®n previa ¨C¡±Socialismo s¨ª, represi¨®n no¡±- pas¨® a ser parte de su iconograf¨ªa y su debate.
Patria y Vida, la guerra cultural amplificada por la m¨²sica popular
El hip hop fue uno de los movimientos m¨¢s cr¨ªticos de las ¨²ltimas d¨¦cadas, con su propio circuito de conciertos y festivales. Pero fue asediado primero por la censura, y desplazado despu¨¦s por el reguet¨®n, que se convirti¨® en la banda sonora de las reformas y la iniciativa privada. Esa extra?a comuni¨®n alcanz¨® su cl¨ªmax cuando el presidente de la Rep¨²blica, Miguel D¨ªaz-Canel, asisti¨® al concierto de Gente de Zona con Laura Pausini un 26 de junio de 2018. Hoy las tornas han cambiado y los mismos artistas participaron, junto a Yotuel Romero, Maykel Osorbo, El Funky y Descemer Bueno en la grabaci¨®n de Patria y Vida, un himno convertido en eslogan y movimiento. Esta pieza tuvo un efecto contagio en otros m¨²sicos, como Yomil, Chacal o Pavel Urquiza y Daym¨¦ Arocena, as¨ª como respuestas cr¨ªticas de Ray Fernandez, el d¨²o Buena Fe o Ra¨²l Torres. Ante las protestas del 11 de julio, figuras del calibre de Chucho Vald¨¦s, Pablo Milan¨¦s, Leo Brouwer o los Van Van se pusieron del lado de los manifestantes.
Revistas culturales
El impacto de la revista Encuentro de la Cultura Cubana, a finales del siglo XX, marc¨® un hito en las publicaciones culturales y se convirti¨® en un puente entre la isla y la di¨¢spora. La respuesta oficial estuvo encabezada por La Jiribilla, un portal cultural todav¨ªa en activo. Como en activo se mantienen La Gaceta de Cuba o Casa, que son anteriores a todas las dem¨¢s. Hoy, sin embargo, son dis¨ªmiles los proyectos de las publicaciones cr¨ªticas, como Rialta Magazine e Hypermedia (que tambi¨¦n son editoriales) o La Noria. Un suplemento como Tremenda Nota rastrea los problemas de la comunidad LGTBIQ, mientras que El enjambre es un espacio novedoso que re¨²ne radio, c¨®mic y teatro para comentar la realidad de la isla.
Nuevo periodismo
Escindidas del citado proyecto Encuentro de la Cultura Cubana, tanto Cubaencuentro como, especialmente, Diario de Cuba derivaron en peri¨®dicos digitales. Mientras, el blog Generaci¨®n Y devino en otro diario: 14 y medio. Pero no fue hasta entrada la segunda d¨¦cada de este siglo que j¨®venes periodistas, iniciados en publicaciones estatales o en OnCuba, consiguieron un ecosistema diferente para el nuevo periodismo cubano. Tres ejemplos: El Toque, El Estornudo o Periodismo de barrio.
El cine y el fin de un monopolio
El Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematogr¨¢fica (ICAIC), el Festival de Cine de La Habana o la Escuela Internacional de Cine configuraron, durante mucho tiempo, un tri¨¢ngulo de poder imbatible. En las ¨²ltimas d¨¦cadas, sin embargo, los cineastas han ganado espacios independientes en la producci¨®n y los contenidos. Esto ha dado lugar a festivales alternativos y pel¨ªculas de culto como Santa y Andr¨¦s (Carlos Lechuga), La obra del siglo (Carlos Quintela), Quiero hacer una pel¨ªcula (Yimit Ram¨ªrez), A media voz (Heidi Hassan y Patricia P¨¦rez) o Nadie (Miguel Coyula) o la serie inclasificable de Jorge Molina.
Editoriales en un horizonte parainstitucional
Hay una desproporci¨®n enorme entre lo que en Espa?a se entiende por literatura cubana y lo que se entiende en Cuba (o la di¨¢spora). Igual que hay una distancia sideral entre lo que se escribe en el pa¨ªs y lo que publican las editoriales oficiales. Con el prop¨®sito de paliar esta situaci¨®n, ha surgido un grupo variopinto de editoriales independientes, o estatales provinciales y territoriales, que han alojado las nuevas corrientes. Algunos de estos proyectos mezclan a editores o asesores de la isla y la di¨¢spora de una manera ubicua. Valga la menci¨®n de Bokeh, Casa vac¨ªa, Ediciones sinsentido, Vig¨ªa, Sed de Belleza o La luz.
Mujeres
La protesta art¨ªstica cubana ha tenido una clave femenina sin precedentes. En liderazgo, en participaci¨®n, en apoyos. Entre sus nombres m¨¢s destacados: Tania Bruguera, Claudia Genlui, Katherine Bisquet, Solveig Font, Camila Lob¨®n, Carolina Barrero, Gretel Medina, Celia Gonz¨¢lez, Luz Escobar, Tamara Benereo, Claudia Calvi?o, Haydee Milan¨¦s, Sandra Ceballos, Anamely Ramos, Lynn Cruz...
Di¨¢logo sobre un puente roto
Y¨²nior Garc¨ªa Aguilera es actor y dramaturgo. Estuvo en la manifestaci¨®n del 27-N frente al Ministerio de Cultura y durante la protesta del 11J se present¨® en la televisi¨®n, junto a varias colegas, para demandar 15 minutos p¨²blicos. Fue apresado y, al salir, decidi¨® pedirle esos 15 minutos de escucha a Silvio Rodr¨ªguez. Este lo recibi¨®, tambi¨¦n a la productora Dayana Prieto, y los quince minutos se convirtieron en setenta. Al trovador, alineado con la Revoluci¨®n, no le preocuparon sus contradicciones, sino la irreparable desconexi¨®n de estos j¨®venes con ¡°el proyecto¡±. No obstante, de all¨ª sali¨® una petici¨®n de amnist¨ªa para los presos ¡°que no hubieran cometido actos violentos¡± y el esbozo de un di¨¢logo pol¨ªtico entre distintos. Quiz¨¢ ese encuentro acab¨® justo por donde debi¨® haber empezado el Estado.
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