Lo nuevo de C. Tangana, Rosal¨ªa, Beach House, Sharon Van Etten y otras canciones del mes

C. Tangana feat. Canelita, Omar Montes y Daviles de Novelda ¨C ¡®La culpa¡¯

Contin¨²a la canibalizaci¨®n de C. Tangana a los estilos ca?¨ªs espa?oles de las ¨²ltimas cinco d¨¦cadas. En el cap¨ªtulo de hoy, el sonido Ca?o Roto. El argumento lo desarrolla Little Spain en un v¨ªdeo que, como siempre, es brillante, con sus colores pastel y su derroche de procacidad. Canelita, que ejerce de ¡°el del medio de Los Chichos¡±, lleva la voz cantante sencillamente porque es el ¨²nico que sabe entonar de los cuatro participantes. Desde fuera uno aprecia con envidia lo bien que se lo pasa El Madrile?o, todo el d¨ªa con esas apa?adas juerguecitas y con una indudable capacidad para captar nuestra atenci¨®n con estribillos con pegada. En La culpa se expone poco, apareciendo en el tramo final de la canci¨®n recitando un par de cosillas. Es un anfitri¨®n generoso que ofrece sus manjares a unos invitados que toman la pista para mostrar sus habilidades. ?Hemos dicho ya que el v¨ªdeo est¨¢ muy bien? CARLOS MARCOS

Sen Senra ¨C ¡®Hagan 40?¡¯

Sin repetirse y sin referentes evidentes, el gallego Sen Senra ha construido un universo sonoro que solo es de ¨¦l. Ya tiene un sonido propio, algo que ha logrado con solo un par de trabajos. Otros, por m¨¢s que se empe?an en ello, no lo logran en d¨¦cadas. Viene de actuar con un gran ¨¦xito en el WiZink Center de Madrid, un concierto en el que un p¨²blico masivo refrend¨® una propuesta nada obvia. Dato para contraponer a los que sostienen el borreguismo de la masa. Este Hagan 40? mantiene un nivel alto, pop c¨¢lido (a pesar del reiterado ¡°fr¨ªo¡± de la letra), rom¨¢ntico, moderno, elegante y con un talento especial para armar armon¨ªas pegajosas. C. M.

Beach House ¨C ¡®Hurts to Love¡¯

Once Twice Melody, el nuevo disco de Beach House, es una obra monumental. Diecisiete canciones divididas en cuatro cap¨ªtulos, que corresponder¨ªan a lo que en el pasado ser¨ªan las cuatro caras de un doble vinilo. En la era del streaming, se ha perdido la gravedad que ten¨ªa editar un ¨¢lbum doble, que sol¨ªa indicar que el grupo consideraba que hab¨ªa llegado a su madurez y era el momento de editar su opus magnum para la posteridad. Casi nunca acertaban; los discos dobles han sido la tumba de muchas bandas. La ventaja es que Beach House nunca ha parecido tomarse a s¨ª mismos demasiado en serio, por mucho que los cr¨ªticos divagaran sobre ellos cuando editaron Teen Dream (2010), Bloom (2012) y Depression Cherry (2015), su serie triunfal. Incluido en el cap¨ªtulo 4 de Once Twice Melody, Hurts To Love es una canci¨®n alegre al ralent¨ª, en la que los sintetizadores vintage y los ritmos sint¨¦ticos hacen que todo suene como una canci¨®n tecnopop de los ochenta puesta al d¨ªa. La ¨²nica pega que se le puede poner es que acaba cuando est¨¢ en lo m¨¢s alto, lo que la convierte en pura carne de mix. ??IGO L?PEZ PALACIOS

Burial x Four Tet ¨C ¡®Month / Nova¡¯

En 2009, estos dos geniecillos de la electr¨®nica londinense editaron un maxisingle con Month, tres a?os despu¨¦s hac¨ªan lo propio con Nova. En ambos casos la combinaci¨®n result¨® fascinante. Era el momento en que Burial captaba como nadie la sensaci¨®n de ser parte de la vida diaria de una urbe tan fascinante, atractiva y al tiempo deprimente como Londres. Y Four Tet aportaba a sus visiones sombr¨ªas la alegr¨ªa y la vitalidad de un viernes noche. La noticia es que hace unos d¨ªas estas dos canciones, que no han envejecido nada mal, aparecieron por primera vez y por sorpresa en Spotify. Hasta entonces solo se pod¨ªan encontrar de forma irregular en Internet. Disfrut¨¦moslas mientras se pueda porque, conoci¨¦ndoles, lo mismo desaparecen sin previo aviso. ?. L. P.

Jenny Hval ¨C ¡®Year of Love¡¯

La noruega Jenny Hval, confesa enamorada de la flexibilidad sonora y l¨ªrica de Kate Bush, no deber¨ªa sentirse amilanada ante el peso de las comparaciones ni de los halagos que acumulan sus discos. Menos a¨²n tras publicar la que ya es una de las canciones de 2022 y una de las mejores de su carrera, superando incluso aquel inesperado hit intelectual sobre un viaje que hizo al estudio de Georgia O¡¯Keeffe. El segundo sencillo de adelanto del que ser¨¢ su nuevo trabajo es un paisaje de pop vanguardista, cuatro minutos en los que la revoluci¨®n del pensamiento cr¨ªtico y el amor hilvanan un discurso, muy bien interpretado, sobre el matrimonio y otras construcciones sociales (Hval se inspir¨® para esta pieza en una petici¨®n de mano durante una de sus actuaciones). Una canci¨®n entretenida y pegadiza que huye de convenciones tanto en el contenido como en la forma. Para qu¨¦ pedir m¨¢s. BEATRIZ G. ARANDA

Destroyer ¨C ¡®Eat the Wine, Drink the Bread¡¯

El segundo adelanto del que ser¨¢ el nuevo disco de Dan Bejar, titulado como esa infecci¨®n en el o¨ªdo que afecta al equilibrio, Labyrinthitis, es un agitado tema de groovy-pop a un BPM m¨¢s alto de lo habitual. Y queda estupendamente. Las bater¨ªas programadas, el deje funky y la precisa producci¨®n se ponen al servicio de la misi¨®n estipulada: que la voz de Bejar, sorprendentemente una de las m¨¢s carism¨¢ticas del indie (y que a los noventeros de aqu¨ª nos hace pensar, cada vez, en Fernando Alfaro), alumbre una historia nihilista y ¨¢cida con versos como ¡°orino en el suelo / el mundo entero es un escenario¡± o ¡°lo que acabas de decir / era mejor no haberlo dicho¡±. Todo esto mientras el protagonista digiere alimentos sagrados y saludables para avanzar de la ¨²nica forma que nos es posible, err¨¢tica y beoda, incluso teniendo el o¨ªdo sano. B. G. A.

Sharon Van Etten ¨C ¡®Porta¡¯

La exquisitez es un grado y Sharon Van Etten lo tiene. Creadora de impactantes atm¨®sferas de folk-rock con aires lo-fi, la artista estadounidense, que siempre fue como una alumna aventajada del indie de la ¨²ltima d¨¦cada, anda a la b¨²squeda de horizontes nuevos, tal y como dej¨® entrever en su ¨²ltimo y notable disco, Remind Me Tomorrow. Su nuevo sencillo es un paso m¨¢s all¨¢ en su incursi¨®n en las ambientaciones new wave. Sintetizadores relajantes y voces envolventes para una composici¨®n que trata sobre la angustia vital y la decisi¨®n de romper con ella. La exploraci¨®n le sienta de maravilla. FERNANDO NAVARRO

La Plazuela ¨C ¡®Campanas del olvido¡¯

De un tiempo a esta parte, hay una muy interesante predisposici¨®n de muchos artistas a darle vueltas de tuerca al folclore espa?ol. Dentro de la ¨²ltima hornada de nombres destacados, se encuentran La Plazuela, un d¨²o salido de Granada, de donde tambi¨¦n han salido Dellafuente o Yung Beef. Como demuestran en esta ¨²ltima canci¨®n, La Plazuela mezclan el flamenco con la electr¨®nica. Pinceladas andaluzas evidentes con un carisma callejero actual, donde lo urbano se filtra con perspectiva de sonar moderno. Una fusi¨®n org¨¢nica que se suma a nueva labor de gente como Califato ?. Est¨¢n destinados a conseguir cotas altas como revisionistas del folclore. F. N.

Rosal¨ªa ¨C ¡®Saoko¡¯

Rosal¨ªa vuela sola y se posa sobre lo que le da la gana. Su pen¨²ltimo tema es lo m¨¢s experimental que ha grabado nunca, lo m¨¢s raro desde A pal¨¦. Y tal vez lo mejor. En los apenas dos minutos que dura, Saoko explota sobre un ritmo cl¨¢sico del reguet¨®n, pero saturado y distorsionado, con un ¨®rgano roto que zumba, un interludio con un piano de jazz y un final abrumador que es una explosi¨®n de ruido enternecedora. Por la canci¨®n asoma lo latino, pero tambi¨¦n la desquiciada experimentaci¨®n de Arca y aquel Kanye West que en 2013 lanz¨® Yeezus y decidi¨® que iba a hacer algo rar¨ªsimo, industrial y psic¨®tico que iba a vender tantos discos como las producciones de pop m¨¢s convencional. Casi lo logra. Rosal¨ªa ha recogido esa idea, e incluso los gui?os a Nine Inch Nails que conten¨ªa aquel opus de West, y los ha cosido al reguet¨®n. El resultado es b¨¢rbaro. XAVI SANCHO

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