¡®El hombre amansado¡¯, Erasmo desencadenado

Los lectores de Horacio Castellanos Moya ya saben que ¨¦ste es un especialista en los narradores enga?osos. Pronto empezamos a sospechar de quien nos cuenta la historia: o selecciona s¨®lo una parte, o trabaja demasiado a su favor, o sencillamente delira sin sentido. Pero el ¡°narrador enga?oso¡± no es un simple recurso literario ni un ejercicio de estilo, sino que, en un sentido m¨¢s profundo, se encuentra en la ra¨ªz de la capacidad de la novela para mostrarnos el mundo en su complejidad: es la invenci¨®n de ¡°una perspectiva¡± sobre cada asunto, una m¨¢s a convivir con otras, a veces falaz o despistada. Por decirlo con el t¨®pico: frente a la Verdad con may¨²scula, la novela es el g¨¦nero de las perspectivas.

En El hombre amansado la perspectiva es la de Erasmo Arag¨®n, un viejo conocido en la obra de Castellanos Moya. Es quiz¨¢ el m¨¢s delirante de sus personajes, un periodista v¨ªctima de la di¨¢spora salvadore?a que investiga en el exilio la muerte del poeta Roque Dalton (a manos de sus compa?eros en la guerrilla, que sospechaban de su colaboraci¨®n con la CIA). Erasmo es locuaz y paranoico. Y esta paranoia, en nuestro autor, no es tan solo una desviaci¨®n de la mente, una superstici¨®n de sentido convertida en amenaza (todos nos observan y confabulan contra nosotros). Sino tambi¨¦n la manera que tienen sus personajes de seguir vivos en una sociedad hipervigilante y violenta. La paranoia es a la vez delirio y sagacidad.

Erasmo tambi¨¦n es un personaje humor¨ªstico por su obsesi¨®n sexual. O, mejor dicho, el deseo forma parte de su necesidad de equilibrio. Y Erasmo es, en palabras del propio autor, el personaje que m¨¢s se le parece: valga citar su reciente ensayo Roque Dalton: correspondencia clandestina. Pero obviemos cualquier voluntad autobiogr¨¢fica: Erasmo (y no Horacio) Arag¨®n (y no Castellanos) es un personaje literario, una hip¨®tesis de ficci¨®n, exagerada y maravillosa, sobre materiales de la propia vida del autor.

En El hombre amansado el protagonista supera una crisis mental en Suecia junto a Josefin, la psiquiatra que ha conocido en Merlow City durante su tratamiento. La trama prosigue, por tanto, las ramificaci¨®n de la anterior y magistral Moronga (2018), donde Erasmo hab¨ªa sido acusado de abuso sexual y perdido su trabajo en una universidad estadounidense. En Suecia, pa¨ªs que lo repele y expulsa, Erasmo es la sombra de quien fue. Vive una vida rutinaria y apocada junto a Josefin, una ¡°vikinga¡± bella y ausente que le saca una cabeza. Son dos formas de vida que se excluyen. Y Erasmo se contenta con beber una cerveza al d¨ªa (lo que le permiten los ansiol¨ªticos) junto a dos exiliados centroamericanos de los que sospecha. Con igual sordina, esta vez no escuchamos la voz del propio Erasmo, sino a un narrador en tercera persona que s¨®lo puntual y eficazmente se deja empapar del lenguaje de aquel.

Todo este tono atenuado, tan raro en Castellanos Moya, se encadena con un ritmo ascendente gracias a una estructura sencilla y cl¨¢sica: breves cap¨ªtulos con t¨ªtulos levemente ir¨®nicos, tan de novela de peripecias, y dos tramas entrelazadas (entre el pasado en Merlow City y el presente en Suecia) que confluyen, a mitad del relato, en un imprevisto que no voy a desvelar. Y tambi¨¦n lejos de cualquier previsibilidad, hace entrada en escena un hilarante y tr¨¢gico ¡°Erasmo desencadenado¡± en unas cuantas p¨¢ginas exactas con la intensidad de los mejores libros de Castellanos Moya: Insensatez, El arma en el hombre¡­ Porque El hombre amansado es otra pieza maestra de uno de los mejores narradores de nuestro tiempo.

El hombre amansado

Autor: Horacio Castellanos Moya.

Editorial: Literatura Random House, 2022.

Formato: tapa blanda (144 p¨¢ginas. 16,06 euros) y e-book (7,59 euros).

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