El cine quijotesco de un autodidacta: Albert Serra en seis pel¨ªculas
El director comenta sus largometrajes previos a ¡®Pacifiction¡¯, que definen una obra marcada por una insobornable libertad
No la incluye en su filmograf¨ªa oficial por ser ¡°un proyecto muy amateur¡±, pero Albert Serra debut¨® en el cine con Crespi¨¤ (2003), retrato del pueblo del t¨ªtulo que se situaba entre la ficci¨®n y el documental, un g¨¦nero que no le gusta por considerarlo ¡°la excusa perfecta para los que no tienen imaginaci¨®n¡±. Le seguir¨ªan seis largometrajes que definen la trayectoria quijotesca de un autodidacta distinguido por su insobornable libertad.
Honor de cavalleria (2006)
¡°En el inicio de todo, como Don Quijote, me autoinvest¨ª director de cine. Como en la escena en la que el personaje se viste de caballero, yo cog¨ª lo que ten¨ªa a mano para hacerme cineasta: algunos amigos actores, una c¨¢mara digital barata y la primera versi¨®n de Final Cut. En aquel momento, el digital estaba muy asociado a un cine al estilo de Cassavetes, urbano y de interiores. Mi idea fue hacer una pel¨ªcula de ¨¦poca un poco ramplona a partir de los entrecap¨ªtulos del Quijote, de esos momentos en los que no pasa nada. La seleccion¨® la Quincena de los Realizadores de Cannes y en la primera proyecci¨®n salieron riadas de espectadores de la sala. Pero luego se mantuvo un a?o y medio en la cartelera de Par¨ªs, la fue a ver Jean-Luc Godard y los Cahiers du Cin¨¦ma la escogieron entre las 10 mejores pel¨ªculas de aquel a?o. Tiene un punto de inocencia que luego he intentado preservar en todas mis pel¨ªculas de una manera casi maquiav¨¦lica. Se fabric¨® con el mismo idealismo que gu¨ªa al Quijote. Es algo que siempre me impresiona mucho. Me genera un gran respeto la gente que sacrifica cosas importantes, incluidas sus propias vidas, en nombre de un ideal¡±.
El cant dels ocells (2008)
¡°Si escog¨ª la historia de los Reyes Magos, que cruzan medio mundo para ir a visitar a un ni?o reci¨¦n nacido que hay quien dice que es hijo de Dios, fue porque siempre, ya desde peque?o, me pareci¨® un poco rid¨ªcula, como tantos relatos religiosos. La historia de los Reyes es ¨²nica, porque solo se celebra en Espa?a y en Portugal; en el resto de Europa, casi no saben ni qui¨¦nes son. Cada uno de mis proyectos ha sido una reacci¨®n al anterior. En oposici¨®n a Honor de cavalleria, esta segunda pel¨ªcula es primitiva, plana, minimalista, con momentos de una extra?a poes¨ªa religiosa, sin psicolog¨ªa ni sentido del drama, marcada por una abstracci¨®n que subraya el uso del blanco y negro. Quise usar una mezcla de tonos que he desarrollado en mi cine posterior. Contiene la mejor escena de adoraci¨®n de la historia del cine, con la pieza musical de Pau Casals de fondo. La m¨²sica ha sido una de las grandes influencias en mi cine. Todo lo que he ganado en mi vida me lo he gastado en libros y en discos, pagados a tocateja¡±.
El Senyor ha fet en mi meravelles (2011)
¡°Es mi pel¨ªcula m¨¢s emotiva, un viaje por los escenarios de Honor de cavalleria que funciona como un making of de cualquiera de mis pel¨ªculas pasadas, presentes o futuras. Es una carta filmada al director argentino Lisandro Alonso que form¨® parte del proyecto Correspondencias f¨ªlmicas en el CCCB (Barcelona), una serie de intercambios entre cineastas situados en puntos geogr¨¢ficos alejados, pero con preocupaciones en com¨²n. Est¨¢ rodada inmediatamente antes del descalabro que provoc¨® la crisis econ¨®mica, despu¨¦s de la cual el cine, como tantas otras profesiones, nunca volvi¨® a ser igual. Esta pel¨ªcula es el s¨ªmbolo de una ingenuidad que desaparece¡±.
Historia de mi muerte (2013)
¡°Puede que sea mi pel¨ªcula favorita de todas las que he hecho, inolvidable de principio a fin, llena de im¨¢genes in¨¦?ditas y de di¨¢logos extraordinarios. Describ¨ªa el paso del racionalismo del siglo XVIII al romanticismo del XIX a trav¨¦s de la convivencia entre dos personajes hist¨®ricos, Casanova y Dr¨¢cula. Con Historia de mi muerte empieza otra fase en mi cine, llena de aspectos m¨¢s perturbadores, m¨¢s oscuros, de di¨¢logos que no cumplen con su funci¨®n tradicional, que tienen resonancias po¨¦ticas, visionarias, cr¨ªpticas, hist¨®ricas. Aparece la noche como met¨¢fora de la utop¨ªa del cine, como lugar de una gran confusi¨®n, pero tambi¨¦n de una identificaci¨®n total. La noche es el lugar donde todo es mejor y todo el mundo es m¨¢s guapo, donde todo parece m¨¢s f¨¢cil e intenso, aunque, a la vez, todo est¨¦ distorsionado. Gan¨® en el Festival de Locarno, aunque antes fue rechazada por Cannes, lo que en aquel momento fue dif¨ªcil de encajar. Ahora creo que de todo se aprende. El ¨¦xito y el fracaso son independientes de los logros art¨ªsticos de una pel¨ªcula. Debes aprender a relativizarlo, aunque hasta que no lo vives no lo entiendes. Es como un desenga?o amoroso: no es lo mismo que te lo cuenten que vivirlo en tus carnes¡±.
La muerte de Luis XIV (2016)
¡°Fue mi primera pel¨ªcula en franc¨¦s, sobre la agon¨ªa del Rey Sol en el Versalles de 1715. Ten¨ªa que ser una performance que iba a representarse en el Centro Pompidou de Par¨ªs, pero se suspendi¨® por motivos de presupuesto y decid¨ª convertirla en pel¨ªcula. Me hubiera gustado introducir m¨¢s locuras. Siempre pens¨¦ que podr¨ªa haber arriesgado m¨¢s. Es una pel¨ªcula perfecta, tal vez demasiado perfecta. Me hubiera gustado introducir m¨¢s mezclas de registros, m¨¢s heterogeneidad en su interior, que es algo que el espectador siempre detesta. Pero, durante el montaje, qued¨® muy claro que lo que mejor funcionaba era lo m¨¢s ¡°normal¡±. A veces lo mejor es lo m¨¢s raro y otras veces no, y debes aceptarlo. Jean-Pierre L¨¦aud, el actor fetiche de Truffaut, siempre fue la ¨²nica opci¨®n para el papel. Fue mi primera experiencia con un int¨¦rprete tan conocido. Le tuve un poco m¨¢s de respeto y no lo tortur¨¦ tanto como al resto de actores con los que he trabajado. Si no lo trat¨¦ igual de mal que a los dem¨¢s fue por deferencia, por su edad y tambi¨¦n porque era famoso, sin ninguna duda, pero sobre todo porque me ca¨ªa bien. L¨¦aud representa los ¨²ltimos estertores de la religi¨®n del cine de autor, de aquella concepci¨®n de la nouvelle vague, que hizo cine de manera completamente incorruptible. Cuando se mueran sus ¨²ltimos representantes, eso desaparecer¨¢ y no existir¨¢ nunca m¨¢s¡±.
Libert¨¦ (2019)
¡°Una locura m¨¢s o menos mental, m¨¢s o menos real. Todav¨ªa no entiendo c¨®mo ocurri¨®. Es la prueba de que mi sistema sirve para todo, tambi¨¦n para el sexo expl¨ªcito. Se inspiraba en una obra de teatro que puse en escena en la Volksb¨¹hne de Berl¨ªn sobre un grupo de ilustrados franceses, expulsados de la corte puritana de Luis XVI, que intentan exportar el libertinaje a Alemania. El rodaje fue bastante escabroso: por las escenas sexuales, pero tambi¨¦n porque transcurri¨® ¨ªntegramente de noche. Se hizo duro, sobre todo para los actores, a quienes hab¨ªa prohibido tocar el alcohol y a los que hab¨ªa pedido que estuvieran permanentemente disponibles. Fue extremadamente tenso, pero tambi¨¦n extremadamente creativo. Supuso mi regreso a la noche como ese lugar donde todo es posible, como espacio pol¨ªtico en el que se mezclan todas las clases sociales igual que en la utop¨ªa del cruising. En pleno Me Too, jugu¨¦ con los l¨ªmites de lo pol¨ªticamente correcto, ya que hay algunas escenas de violencia contra las mujeres, aunque era imposible no incluirlas si quer¨ªa ser un poco fiel al contexto hist¨®rico. Libert¨¦ te lleva a lugares muy oscuros. No descarto que sea mi mejor pel¨ªcula¡±.
Todas las pel¨ªculas de Albert Serra est¨¢n disponibles en Filmin y editadas en DVD por Cameo.
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