¡®En El Pensamiento¡¯, de C¨¦sar Aira, experimentaci¨®n narrativa, literatura con may¨²sculas
El argentino C¨¦sar Aira logra de nuevo desafiar las leyes de las verosimilitud y demostrar su pensamiento literario sofisticado con este trampantojo de recuerdo infantil
Del autor de C¨®mo me hice monja (1993) no cabe esperar rutina, previsibilidad ni complacencia en lo ya logrado. C¨¦sar Aira, con decenas de novelas a sus espaldas en las que ha burlado el pacto narrativo y ha desacatado las leyes de las verosimilitud, mantiene hoy todo su potencial desestabilizador. Lejos del narrador ingenuo que escribe con piloto autom¨¢tico sus f¨¢bulas inanes, Aira es un escritor que hunde su obra en un pensamiento literario sofisticado y en una hiperconsciencia de su material ling¨¹¨ªstico, ret¨®rico e ideol¨®gico. Sus ficciones, casi siempre instaladas en la dif¨ªcil media distancia de la novela corta, parecen dise?adas para sorprender al lector por la espalda, haci¨¦ndolo v¨ªctima burlada de su docilidad ante las inercias que informa la inmensa mayor¨ªa de la ficci¨®n que se consume. Con ese fin, Aira utiliza como un trampantojo los g¨¦neros y subg¨¦neros establecidos, subvierte la relaci¨®n entre memoria e invenci¨®n y pulveriza a su conveniencia la congruencia discursiva y la l¨®gica de sus tramas. Su manejo de formatos consagrados puede recordar el pastiche o la parodia de las reescrituras posmodernas, pero no hay que enga?arse: Aira siempre se sustrae a cualquier cepo cr¨ªtico.
Con un estilo vivo que esquiva la prosa mostrenca, Aira evoca (o inventa) el papel de su madre, del servicio dom¨¦stico, de la esforzada maestra y, sobre todo, del preceptor que contrat¨® su padre para que el muchacho empezara a instruirse
Esta novela, ubicada en el hermoso castillo encantado del recuerdo infantil, confirma lo dicho. Lo que aparenta ser un relato autoficcional es boicoteado desde la primera l¨ªnea: el libro ¡ªse afirma¡ª no surge de la memoria del ni?o de siete a?os que vivi¨® en la estaci¨®n ferroviaria El Pensamiento en la Pampa, cerca de Pringles, sino de unas im¨¢genes s¨²bitas y dispersas que han acabado ensambl¨¢ndose. Con un estilo vivo que esquiva la prosa mostrenca, Aira evoca (o inventa) el papel de su madre, del servicio dom¨¦stico, de la esforzada maestra y, sobre todo, del preceptor que contrat¨® su padre ¡ªel emprendedor que era el principio de realidad de aquel mundo¡ª para que el muchacho empezara a instruirse. El preceptor ¡ªpor otro lado, un ignorante¡ª dio a Aira las primeras lecciones de t¨¦cnica narrativa al explicarle c¨®mo iba a transformar el rencor que sent¨ªa hacia sus padres: les escribir¨ªa ¡°sin omitir nada, ni un bostezo ni un estornudo¡±, en una forma radical de mimesis que le permitir¨ªa vengarse de ellos abrum¨¢ndolos ¡°a relato¡±. Pero ese loco intento de proliferaci¨®n infinita iba a realizarlo como un notario, sino a trav¨¦s del uso de las sugerencia y la alusi¨®n, de manera tal que ¡°bastaban unas pocas palabras bien escogidas, y de ellas irradiaba todo¡± porque el poder de deducci¨®n de cualquier lector se encargar¨ªa de rellenar las omisiones. As¨ª, C¨¦sar Aira aprendi¨® esta parad¨®jica concepci¨®n bicorne de la escritura: por un lado, la prolijidad; por otro, la elipsis.
Ambas est¨¢n presentes aqu¨ª. La prolija, en los miedos y la aprehensi¨®n del entorno natural y familiar del Aira ni?o. La el¨ªptica, en ¡°el misterio que es raz¨®n de ser de esta memoria¡±, anunciado desde el principio con la desaparici¨®n de una locomotora. Entre el merodeo de los detalles y la postergaci¨®n del misterio se va creando el territorio de una escritura sin cors¨¦s con la cual se arma ¡°un libro de im¨¢genes como ¨¦ste¡± donde se superponen ¡°tiempos, olvidos y recuerdos, invenciones, pasajes¡±. As¨ª hasta el desvelamiento apote¨®sico, el desenlace anonadante que lanza al lector a la relectura y le lleva a entender que, como afirm¨® Aira en Una novela china (1987), ¡°el recuerdo se borra, pero queda otra cosa en su lugar¡± y esa cosa es la que dota de eternidad la historia vivida. M¨¢s no debo contar. Literatura con may¨²sculas.
En El Pensamiento
Random House, 2024
120 p¨¢ginas. 17 euros
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