Por qu¨¦ las almendras son el ¡®snack¡¯ favorito de Obama (y hace bien)

Cuando Barack Obama estaba en la Casa Blanca confes¨® a la NBC que le gustaba merendar almendras. ¡°Las recomiendo vehementemente¡±, afirmaba. Hubo bromas sobre si tomaba exactamente siete, tal como aseguraba su por entonces chef y amigo, Sam Kass, o si no segu¨ªa una disciplina digna del Conde Draco contando almendras a media tarde. Pero, ?qu¨¦ tienen estos frutos secos para colarse como picoteo saludable del inquilino del Despacho Oval con la dieta m¨¢s saludable jam¨¢s conocida? Por resumir: las almendras son f¨¢ciles de comer, no dejan residuos (ni mondas ni envoltorios) y van cargadas de nutrientes de primera l¨ªnea.

Los romanos la llamaban mandarla. Siglos despu¨¦s, los ¨¢rabes conquistaron el Mediterr¨¢neo y modificaron un poco su denominaci¨®n: amynda?la. Y as¨ª pas¨® a buena parte de las lenguas europeas actuales. Su nombre bot¨¢nico es Prunus amygdalus, de la familia de las ros¨¢ceas. La almendra es la semilla comestible de un fruto de c¨¢scara dura en color marr¨®n-beige. Seg¨²n la variedad, puede ser dulce o amarga. Las que se consumen como fruto seco son las dulces, sobre todo las variedades marcona y largueta. Las amargas se destinan a fabricar licores y aceites arom¨¢ticos.

La almendra se cultiva fundamentalmente en ¨¢reas de clima suave como el mediterr¨¢neo. Florece a finales de invierno o principios de primavera, se cosecha al llegar el oto?o y se puede encontrar en el mercado durante todo el a?o, ya sea cruda, tostada o frita.

?Con o sin c¨¢scara?

La c¨¢scara dura que envuelve la almendra ejerce de envoltorio herm¨¦tico y natural que impide la entrada de ox¨ªgeno y, por tanto, la preserva del enranciamiento. Es la mejor opci¨®n si buscas el m¨¢ximo sabor, pero ¨¢rmate de paciencia (y punter¨ªa) porque tendr¨¢s que cascarlas con un martillo u objeto contundente.

Las almedras son un fruto seco muy energ¨¦tico (589 kcal) que contiene nutrientes de primera calidad: grasas monoinsaturadas, prote¨ªnas, carbohidratos, fibra y minerales como el calcio, el hierro, el zinc, el potasio, el magnesio y el f¨®sforo.

Para evitarte el engorro, lo normal es encontrarlas sin c¨¢scara, a granel o ya envasadas. Descarta las que est¨¦n blandas o presentan un ligero olor a rancio. En casa, si tienen c¨¢scara, basta con almacenarlas en un lugar fresco y seco. Si ya van limpias, gu¨¢rdalas en un tarro herm¨¦tico y en un lugar seco, ya que dado su alto contenido en grasas se ponen rancias con facilidad. Las que adem¨¢s van peladas se pueden guardar en la nevera para conservarlas durante m¨¢s tiempo. Si est¨¢n troceadas o ralladas, no tardes mucho en consumirlas, ya que se estropean mucho antes.

Alimento de primera

Por definici¨®n, al igual que sucede con otros frutos secos, las almendras son bajas en agua (solo un 5,8%), pero generosas en grasas (45,2%), sobre todo, monoinsaturadas. Otros macronutrientes destacados son las prote¨ªnas (19,1%), muy valoradas en las dietas veganas, y los carbohidratos (6,1%). Nutrientes de primera calidad, pero tambi¨¦n muy energ¨¦ticos (589 kilocalor¨ªas por cada 100 gramos), por lo que lo recomendable es un consumo moderado (unos 25 gramos por raci¨®n).

Con respecto a la fibra, su contenido (8,3 gramos) destaca sobre el resto de los frutos secos. En cuanto a los minerales, es fuente de calcio (248 mg), hierro (3,5 mg), zinc (3,6 mcg), potasio (767 mg), magnesio (258,1 mg) y f¨®sforo (524 mg). Cabe destacar que muchos dietistas-nutricionistas incorporan las almendras como uno de los pilares para obtener calcio en las dietas sin l¨¢cteos, ya sea por intolerancia a la lactosa o para sumarse a la doctrina vegana.

En cuanto a las vitaminas, son fuente de vitamina E (24 mg), con notable acci¨®n antioxidante. Una raci¨®n de 25 gramos de almendras sin c¨¢scara aporta el 50% de las ingestas diarias de referencia para un adulto. Tambi¨¦n lo son de folatos (70 mcg), vitamina que interviene en la formaci¨®n de los tejidos maternos durante el embarazo y cuya falta puede provocar malformaciones en el sistema nervioso del feto. Tambi¨¦n aportan riboflavina (0,78 mg), tiamina (0,21 mg) y niacina (5,3 mg).

El ¡®snack¡¯ ¨®ptimo

Para matar el gusanillo con alg¨²n tentempi¨¦ saludable, no pierdas de vista las almendras. Varios estudios bendecidos por la Sociedad Americana de Nutrici¨®n (ASN) avalan las cualidades de este fruto seco como aperitivo dentro de una dieta saludable. Presentados en una sesi¨®n denominada ?Son las almendras el snack ¨®ptimo? concluyen que quienes toman un tentempi¨¦ de almendras de 1,5 onzas (nada menos que 42 gramos) no est¨¢n ingiriendo m¨¢s de 250 calor¨ªas diarias extras y aplacan esa gazuza entre horas sin pasarse de la raya.

Como consecuencia, no aumentan de peso y controlan el contorno abdominal mejor que si se meten entre pecho y espalda un snack alto en carbohidratos. Apuntan adem¨¢s a su bajo ¨ªndice gluc¨¦mico y a la sensaci¨®n de saciedad que producen la fibra y las prote¨ªnas como acicates para incluirlos en el aperitivo de media ma?ana. Eso s¨ª, aunque los estudios presentados sol¨ªan incluir almendras tostadas y saladas, mejor evitar la sal. Y nada de 42 gramos, a lo sumo, 25-30 y en el marco de una alimentaci¨®n saludable, variada y equilibrada.

?Por qu¨¦ puede haber trazas de almendras en la sopa?

Seguro que en alguna ocasi¨®n te has preguntado por qu¨¦ en muchos alimentos procesados te advierten de que puede contener trazas de frutos secos, entre otros al¨¦rgenos. El origen est¨¢ en la f¨¢brica. Lo normal es que no solo elaboren un producto, sino varios. Entre uno y otro proceso, la maquinaria se limpia y desinfecta, pero siempre pueden quedar restos ¨ªnfimos escondidos en el mecanismo, incluso como polvo en suspensi¨®n. Part¨ªculas insignificantes e inocuas para la mayor¨ªa de la poblaci¨®n, pero potencialmente peligrosas para las personas al¨¦rgicas. La ley no determina qu¨¦ cantidad se considera como ¡®trazas¡¯. Para evitar contaminaciones cruzadas, los fabricantes suelen elaborar primero los productos sin ingredientes conflictivos y, en segundo lugar, los que llevan frutos secos u otros al¨¦rgenos. Y, por si acaso, advierten al consumidor desde la etiqueta.

Turr¨®n y pasteles de monjas

Adem¨¢s de comerla en crudo, en recetas de carnes o pescados, y en ensaladas diversas, la almendra es uno de los ingredientes cl¨¢sicos de reposter¨ªa. Buena muestra de ello es la torta de almendra, preparada con almendra pelada y triturada, huevos, az¨²car, harina, lim¨®n y canela. O los t¨ªpicos pasteles de monjas, a base de almendra con piel, calabazate, az¨²car, bizcocho rallado, agua, huevo, lim¨®n y canela. Tampoco hay que olvidar los dulces de almendra por antonomasia: el turr¨®n y el mazap¨¢n.