La comunidad gitana, de postgrado
La FSG beca a treinta chicos para que estudien un m¨®dulo universitario para ayudar a su etnia
¡°Parte de mi familia no me habla y me considera un traidor¡±, confiesa Clemente Carbonell Amador. Le han apartado. Le consideran ¡°un payo¡±. Alguien que no es digno de que se le dirija la palabra. Su error fue matricularse en Ingenier¨ªa T¨¦cnica Industrial siendo gitano. Un gitano de ojos azules que el pasado viernes asist¨ªa al acto inaugural en la sede madrile?a del Secretariado Gitano del curso de Diploma Universitario en Intervenci¨®n Social con la Comunidad Gitana. ¡°Estudiar no est¨¢ bien visto. A mi primo le obligaron a dejarlo con 16 a?os. Conozco muchos casos¡±, recita Clemente. ?l, no contento con proseguir sus estudios superiores ha decidido estudiar este m¨®dulo a distancia de la Universidad P¨²blica de navarra para ayudar a los chicos de su comunidad, entre otras cosas, para que puedan estudiar.
No es el ¨²nico. Se han matriculado otras 37 personas en la tercera edici¨®n de este t¨ªtulo. 30 de ellas, de etnia gitana. Algunas, como Lagarder Lanciu, ya trabajan con chicos con necesidades educativas especiales. De nacionalidad rumana, lanciu decidi¨® abandonar su pa¨ªs hace ocho a?os. ¡°Es que no me gustaban muchas cosas y, adem¨¢s, como soy gay no se me respetaba¡±, explica. ?l tambi¨¦n es gitano. Trabaja en un proyecto educativo de la Uni¨®n Roman¨ª y estima que el problema ¡°es el tr¨¢nsito de los ni?os a adolescentes, de Primaria a Secundaria¡±.
Miguel Laparra, soci¨®logo y director del curso, sostiene que es importante que los propios gitanos se especialicen en ayuda a su comunidad por la ventaja que supone conocer desde dentro sus peculiaridades. Aunque, precisa, la etnia gitana es muy diversa y su situaci¨®n es bastante distinta de un ¨¢rea geogr¨¢fica a otra. En cualquier caso, insiste, los casos de marginalidad y chabolismo ya son casi residuales. Pero, tambi¨¦n, los de gitanos que acceden a los estudios superiores. No pasan de los tres centenares en toda Espa?a.
¡°No s¨¦ si ser¨¢n tan pocos, pero el problema es que somos invisibles, porque no se nos identifica como gitanos, ni siquiera por parte de nuestra propia comunidad¡±, precisa Clemente Carbonell, que cree que el principal problema ¡°es que la formaci¨®n acad¨¦mica da libertad¡±. Carbonell insiste en que su ventaja como futuro trabajador social con gitanos es ¡°haber vivido y saber c¨®mo son los padres de los chicos, porque son iguales que los mayores con los que hemos crecido nosotros¡±. hasta la fecha, casi todas las personas que trabajan con esta comunidad no son de etnia gitana. ¡°Y a veces lo hacen mejor, porque los gitanos no lo ven de manera imparcial¡±.
Gitanos en Madrid
En la Comunidad de Madrid viven unas 60.000 personas gitanas, el 10% de todas las que viven en Espa?a.
El curso admite a 30 estudiantes gitanos becados por la Fundaci¨®n Secretariado Gitano para formarles en el trabajo con su propia comunidad.
El grueso de la comunidad gitana, seg¨²n Laparra, escolariza a sus hijos peque?os en los estudios primarios. Tambi¨¦n accede sin miedo a los servicios ciudadanos a los que tiene derecho. Pero el salto que a¨²n no han dado es el del acceso a las ense?anzas superiores.
Sara, licenciada en psicolog¨ªa, no es gitana. Tambi¨¦n se ha matriculado en el curso por su inter¨¦s en la cultura de estas personas. ¡°A veces el problema es el de la resistencia de una cultura minoritaria sometida a la presi¨®n de otra mayoritaria¡±, tercia en el debate. ¡°Nosotros hemos perdido nuestra identidad, pero ellos tienen la actitud de la resistencia¡±, insiste.
La Fundaci¨®n Secretariado Gitano es quien beca a los 30 estudiantes de esta etnia para que puedan hacer el curso, para el que no es necesario tener una titulaci¨®n previa.
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