Batalla clave por la Alta Garrotxa
Los bomberos centran sus esfuerzos en contener el incendio por el oeste El principal riesgo es que las llamas lleguen a una gran masa forestal de 20.000 hect¨¢reas "Si el fuego arranca ah¨ª, nos dar¨¢ muchos problemas", afirma un mando del cuerpo
Tras varias horas de tregua en las que el fuego ha dejado de avanzar, con el mediod¨ªa han llegado las horas cr¨ªticas en las que se dilucidar¨¢ si la tragedia sigue aumentando. De los dos flancos abiertos del incendio, solo el occidental preocupa a los Bomberos. Son unos 23 kil¨®metros de frente abierto que, con el cambio de direcci¨®n del viento, se han convertido en la cabecera de las llamas. Si ayer el fuego avanzaba a gran velocidad, hasta siete kil¨®metros por hora, espoleado por el fuerte viento de tramontana, este mediod¨ªa es ya viento de levante, la marinada, m¨¢s suave y h¨²medo.
Se trata de una buena noticia, pero no del todo. Las r¨¢fagas, de momento sin mucha fuerza, amenazan con reavivar y extender el incendio en el flanco oeste, el m¨¢s peligroso. All¨ª se est¨¢n concentrando los esfuerzos de muchos efectivos. ¡°La temperatura aumenta a estas horas y no tenemos el per¨ªmetro estabilizado¡±, explica con preocupaci¨®n Anna Mart¨ª, subdirectora operativa del Cuerpo de Bomberos. ¡°Trabajamos intensamente para que el incendio no se nos abra al oeste¡±, afirma, rodeada del frenes¨ª que se vive en el centro de control instalado en el Parque de Bomberos de Figueres.
El peligro en esa zona es enorme, y la ¨²ltima l¨ªnea de defensa la constituye el embalse de Boadella, en el municipio de Darnius. Si con la ayuda del embalse no se consigue detener el fuego, llegar¨¢ a la Alta Garrotxa, un ¨¢rea escasamente poblada pero muy boscosa, abrupta y de elevado valor natural. ¡°Si el fuego arranca ah¨ª, nos dar¨¢ muchos problemas¡±, reconoce Josep Mateo, subjefe del Parque de Bomberos de Figueres y, como todo bombero, experto en los caprichos del viento. El combustible de la zona est¨¢ ¡°muy caliente¡± y no abundan los campos de cultivo, que son un eficiente cortafuegos si est¨¢n bien arados. Es un ¨¢rea forestal y ¡°con muy mal apagado¡±, dice Mateo. Las pendientes y la escasez de caminos dificultar¨ªan mucho la labor de las fuerzas de extinci¨®n.
Desde el centro de control, el jefe de Bomberos observa la veleta: ¡°Ahora se mueve descontrolada. Es buena noticia, porque significa que el viento no tiene mucha intensidad¡±, explica. En el embalse tienen depositadas todas sus esperanzas las fuerzas de emergencias. En la Alta Garrotxa, unas 20.000 hect¨¢reas de bosque est¨¢n amenazadas. Todos esperan que el viento se al¨ªe con los habitantes de pueblos como Albany¨¤, Vall de Bianya o Sales de Llerca, en zonas ¡°muy dif¨ªciles de evacuar¡±, reconoce el director territorial de agricultura de la Generalitat en Girona, Jordi Aurich. ¡°Si llega a esa zona, ser¨ªa muy peligroso¡±, afirma Aurich mientras se?ala los peligros en el mapa. ¡°A pesar de todo, soy optimista¡±, dice Mateo. ¡°Tenemos que serlo¡±.
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