Las tijeras del Partido Popular
No hay ninguna naci¨®n que haya salido de la crisis aplicando recortes
El dirigente del Partido Popular andaluz Juan Ignacio Zoido ha puesto una vez m¨¢s como ejemplo a seguir por Andaluc¨ªa los recortes de Rajoy en el Gobierno central y los de Cospedal en Castilla-La Mancha, una propuesta que me parece muy negativa por varias razones.
En primer lugar, porque ser¨ªa aplicar en Andaluc¨ªa medidas que no han tenido efecto positivo. Desde que Rajoy y Cospedal recortan gasto en sanidad, educaci¨®n, dependencia, igualdad o en otras inversiones hay casi 65.000 desempleados m¨¢s en la comunidad manchega y 300.000 en Espa?a, la tasa de paro nacional ha subido 1,6 puntos y 7,1 en Castilla La Mancha y han empeorado la actividad econ¨®mica en general y casi todos los indicadores de condiciones de vida de la poblaci¨®n.
En segundo lugar, porque el gasto social andaluz est¨¢ por debajo del que nos corresponde por nuestro nivel de riqueza. Si estuvi¨¦semos gastando en exceso ser¨ªa l¨®gico disminuirlo, pero hacerlo cuando estamos por debajo de la media europea en algo tan esencial para el desarrollo econ¨®mico es una barbaridad.
En tercer lugar, los recortes que propone Zoido para Andaluc¨ªa ser¨ªan muy negativos porque hay ya evidencias sobradas que demuestran que un recorte de un euro en una econom¨ªa como la andaluza provoca una disminuci¨®n del ingreso total de entre 1,5 y hasta dos euros. Eso significa que los recortes que se hagan siguiendo su propuesta producir¨ªan sin duda menos actividad, cierres de empresas, m¨¢s desempleo y hasta mayores dificultades para hacer frente al pago de la deuda. Incluso una instituci¨®n tan ortodoxa como el Fondo Monetario Internacional est¨¢ llamando la atenci¨®n sobre los peligros del ajuste fiscal europeo que Zoido quiere aplicar con mayor intensidad a¨²n en Andaluc¨ªa.
En cuarto lugar, los recortes que imponen Cospedal y Rajoy, y que Zoido quiere que apliquemos en nuestra tierra, son, en el mejor de los casos, pan para hoy y hambre para ma?ana. No hace falta ser un genio de la econom¨ªa para saber que debilitar el sistema educativo y el capital social en general, o las inversiones p¨²blicas que necesita el capital privado y la sociedad en su conjunto para crear riqueza, es la forma m¨¢s directa y segura para llegar al fracaso. ?C¨®mo vamos a facilitar la creaci¨®n de empresas o que haya m¨¢s y mejores emprendedoras y emprendedores en Andaluc¨ªa si baja el nivel formativo de la gente al recortar los recursos dedicados a educaci¨®n?
La realidad es muy clara: no hay ni una sola naci¨®n en el mundo que haya progresado y alcanzado altos niveles de competitividad y bienestar, o que haya salido de una crisis como la presente aplicando el tipo de recortes en el gasto que propone Zoido para Andaluc¨ªa. Y de hecho, es por hacerlos por lo que no conseguimos salir de ella.
Desde ning¨²n punto de vista se puede afirmar que los tijeretazos que propone realizar vayan a mejorar nuestra situaci¨®n. Solo tendr¨¢n un efecto seguro: cuando se debiliten los servicios p¨²blicos esenciales se ir¨¢ dando entrada a las empresas privadas para que hagan negocio. En todos los lugares del mundo donde se han hecho estos recortes ha ocurrido lo mismo. Naturalmente, Zoido y el Partido Popular est¨¢n en su perfecto derecho de erigirse en promotores de los grupos de poder empresarial que presionan para que se recorte el gasto en servicios p¨²blicos, pero lo que no me parece decente es dar gato por liebre.
El mejor y m¨¢s urgente y necesario servicio que puede hacer Zoido y su partido a Andaluc¨ªa es reclamar clara y p¨²blicamente que el Gobierno central no discrimine a nuestra tierra en el reparto de los recursos generales, que nos d¨¦ aire en lugar de asfixiarnos, e ir de la mano del Gobierno andaluz a pedir un tipo de pol¨ªtica distinta, que anteponga el sentido com¨²n y se base en los principios de actuaci¨®n que sabemos que est¨¢n siendo exitosos en otros sitios, en lugar de empe?arse en hacer recortes que nos empobrecen y solo sirven para que unos pocos ganen todav¨ªa m¨¢s dinero a costa de los dem¨¢s.
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