Las naves de Sandok¨¢n desgastan por dentro al PSOE cordob¨¦s
La decisi¨®n de la Junta de anular la legalizaci¨®n de los almacenes de Rafael G¨®mez, que apoyaron los socialistas, deja en evidencia a la direcci¨®n provincial
Muchos pensaban que era imposible. La Junta jam¨¢s rechazar¨ªa un acuerdo salido del Ayuntamiento de C¨®rdoba y aprobado por los dos partidos que gobiernan en coalici¨®n en San Telmo: PSOE e IU. No se atrever¨ªa, por mucho que ese plan supusiese la legalizaci¨®n de m¨¢s de la mitad de una construcci¨®n, las cuatro hect¨¢reas de naves ilegales de Arenal 2000, que supuso una multa impuesta por el mismo Consistorio, de 24.6 millones.
Pero el mi¨¦rcoles, la Consejer¨ªa de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, que ostenta las competencias de urbanismo, public¨® una nota de prensa en la que anunciaba la impugnaci¨®n del proyecto de regularizaci¨®n de esas naves levantadas por la empresa de Rafael G¨®mez, Sandok¨¢n, y dejando con cara de p¨®ker, especialmente, a los socialistas cordobeses.
Muchos a?oran el tiempo en el que el PSOE de C¨®rdoba ten¨ªa como estandarte y n¨²cleo de su discurso la f¨¦rrea defensa de la legalidad en el caso las naves. Mientras la alcaldesa Rosa Aguilar, entonces en IU, escurr¨ªa como pod¨ªa la pol¨¦mica, el portavoz municipal socialista, Antonio Hurtado, clamaba por la demolici¨®n. Pero la marcha de Aguilar de la alcald¨ªa y su paso al PSOE bajo la direcci¨®n de la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas, comenz¨® a minar desde dentro la tesis que hab¨ªa servido de cemento a la identidad socialista en este tema. Y la extensi¨®n m¨ªnima de demolici¨®n que la Junta siempre hab¨ªa exigido se redujo de los 20.000 metros cuadrados a los 15.000. Algo por lo que no est¨¢ dispuesto a pasar ahora el Gobierno regional, que vuelve a exigir una mayor proporci¨®n de derribo.
Una legalizaci¨®n gestada por Rosa Aguilar
Fue con Rosa Aguilar en la alcald¨ªa de C¨®rdoba, todav¨ªa bajo las siglas de IU, cuando Rafael G¨®mez Sandok¨¢n empez¨® a construir las cuatro hect¨¢reas de naves ilegales 2005. De hecho, el constructor, que hoy es concejal y el l¨ªder del principal partido de la oposici¨®n en el Ayuntamiento, Uni¨®n Cordobesa, siempre recuerda que impuls¨® aquel inmenso inmueble con el permiso verbal de la regidora, algo que ella siempre ha negado. Sea o no cierto, es un hecho que la ¨²nica oposici¨®n f¨¦rrea que se encontr¨® entonces Sandok¨¢n fue la del PSOE y la Junta, que exig¨ªan la inmediata demolici¨®n de las naves.
La lucha llev¨® a la Junta a recurrir ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJA) la aprobaci¨®n del primer plan especial urban¨ªstico que legalizaba las naves y que hab¨ªa sido redactado por la propia empresa infractora, Arenal 2000, a petici¨®n del Ayuntamiento. El documento hab¨ªa sido aprobado en Pleno, con los votos de IU y PP y la oposici¨®n del PSOE. El TSJA tumb¨® aquel documento. Y todo volvi¨® a empezar.
Por eso comenz¨® a trabajarse en un nuevo plan especial que diera soluci¨®n al tema de las naves bajo los auspicios de la exalcaldesa Rosa Aguilar. Por la misma persona que, como regidora con IU, hab¨ªa soportado en primera persona los ataques de la Junta y el PSOE era, merced de una pirueta pol¨ªtica, consejera de Obras P¨²blicas desde 2010 en el Gobierno regional de Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n. Justo la misma cartera sobre la que reca¨ªa la pol¨¦mica de las naves.
As¨ª empezaron nuevos problemas. Su posici¨®n al frente de Obras P¨²blicas, buscando un acuerdo que acercase posturas y fuese ben¨¦volo a la hora de permitir que parte de las naves siguiesen en pie, chocaba frontalmente con la de la delegaci¨®n provincial de Obras P¨²blicas y, especialmente, su delegado, Francisco Garc¨ªa, que optaba por una demolici¨®n mayor.
Se abri¨® as¨ª una guerra dentro de los socialistas cordobeses entre los partidarios de Garc¨ªa y de Aguilar.
Ninguno de los dos tiene ahora cargos de responsabilidad en el Gobierno andaluz. Pero las naves de Sandok¨¢n siguen ah¨ª, el nuevo plan municipal ha sido tumbado y todo parece haber ca¨ªdo en un bucle de eterno retorno.
Rosa Aguilar podr¨ªa ser la m¨¢s afectada por este tropez¨®n, pero su figura pol¨ªtica se ha diluido y no tiene apenas peso en el partido desde que dej¨® de ser ministra de Medio Ambiente en el Ejecutivo de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. El que no puede eludir el desgaste pol¨ªtico que provoca esta decisi¨®n de la Junta es el portavoz municipal del PSOE y secretario general en la provincia de C¨®rdoba, Juan Pablo Dur¨¢n. Y ese desgaste vuelve a poner encima de la mesa la desestructuraci¨®n interna que sufre la formaci¨®n desde hace a?os y cuyas costuras se resienten siempre que se trata el tema de las naves de Sandok¨¢n.
"El partido est¨¢ roto", resume lac¨®nica una fuente interna. "En este tema est¨¢ claro que hay dos visiones. Una, liderada por Juan Pablo Dur¨¢n" y que defiende las decisiones que se han venido tomando pese a los cambios de criterio. "Y otra, que no tiene cabeza visible alguna, que ha sido muy cr¨ªtica y se ha opuesto a c¨®mo se han llevado las cosas", se?ala. ?Y es esta segunda voz discordante la corriente cr¨ªtica que ya ech¨® un pulso a la direcci¨®n provincial hace un a?o? "No", se?ala otro miembro de la familia socialista cordobesa. "Esto es algo distinto, m¨¢s t¨¦cnico. No tiene mucho que ver con aquel movimiento para sacar a Juan Pablo Dur¨¢n de la secretar¨ªa. Son simplemente voces que llevaban a?os alertando de que no se estaban haciendo bien las cosas con el tema de Sandok¨¢n".
En cualquier caso, la figura de Juan Pablo Dur¨¢n ha cambiado. "?l ten¨ªa el apoyo de la estructura regional del partido, pero el hecho de que no se le consultara, de que no se le advirtiera de la decisi¨®n de la consejer¨ªa y que se enterara por la prensa nos da pistas de que algo est¨¢ pasando", prosigue esta fuente del PSOE. La misma fuente recuerda que el consejero Luis Planas, tambi¨¦n cordob¨¦s, tampoco era una apuesta personal de Dur¨¢n para ese cargo. "Y eso ya se ha notado", destaca.
Al d¨ªa siguiente de conocer el bofet¨®n de la Junta, Dur¨¢n dio una de las ruedas de prensa m¨¢s duras de su carrera. Fundamentalmente, porque por primera vez sus cr¨ªticas, crudas y amargas, iban directamente dirigidas a sus colegas de la consejer¨ªa. "Incompleta, confusa y con lagunas jur¨ªdicas", as¨ª defini¨® la nota con la que la Junta anunciaba su decisi¨®n. Tambi¨¦n se preocup¨® por subrayar que tampoco la delegada del Gobierno andaluz en C¨®rdoba, Isabel Ambrosio, conoc¨ªa la decisi¨®n de la Junta y que, como ¨¦l mismo, se enter¨® por la prensa. Pero a pesar de todo, insisti¨® en que en ning¨²n momento se sent¨ªa desautorizado.
Y es que oficialmente, nada ocurre dentro del PSOE. Oficialmente, no existe un "cisma" dentro del partido, como dijo el viernes Isabel Ambrosio. Oficialmente, Dur¨¢n niega que "nadie" le haya dado "un varapalo". Pero extraoficialmente es otra cosa. Hay muchos militantes que aplauden bien fuerte la decisi¨®n de la Junta. Y todos tienen la sensaci¨®n de que este es solo un nuevo cap¨ªtulo en una lucha interna m¨¢s parecida a una lenta guerra de desgaste que no se resolver¨¢ de un solo golpe en una sola batalla.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
