La Generalitat calcula que hay un mill¨®n de camas tur¨ªsticas ilegales

Catalu?a tiene m¨¢s camas tur¨ªsticas ilegales que legales. Casi el doble: un mill¨®n frente a 600.000, cuya ocupaci¨®n media es de solo el 58%. Y estas 600.000 plazas incluyen los campings, de modo que si se habla de camas estrictamente (330.000 entre hoteles y casas rurales), las ilegales triplican las legales. Este es el c¨¢lculo oficial que consta en el Plan Estrat¨¦gico de Turismo en Catalu?a 2012-2016 y directrices nacionales de turismo 2020 que el Gobierno catal¨¢n tiene previsto presentar en mayo.

El plan tambi¨¦n alerta de la ¡°obsolescencia¡± de ¡°una parte importante¡± de la oferta de alojamientos tur¨ªsticos y plantea la necesidad de reducirla. ¡°El principal reto es equilibrar la cantidad con la calidad¡±, adelant¨® ayer el consultor tur¨ªstico Joan Manuel Ribera, coordinador de los expertos que han elaborado el plan estrat¨¦gico.

Ribera intervino en una jornada sobre c¨®mo mitigar el efecto del turismo masivo en Barcelona organizada por la asociaci¨®n de fomento de iniciativas emprendedoras Up Social y el Departamento de Territorio y Sostenibilidad. El plan estrat¨¦gico, con todo, fue encargado por el Departamento de Empresa y Empleo, del que depende Turismo, durante la pasada legislatura, cuando el consejero era Francesc Xavier Mena.

Para la Generalitat es ¡°prioritario¡±, explica el consultor que ha coordinado el plan estrat¨¦gico, poner orden en el mill¨®n de camas tur¨ªsticas ilegales. ¡°Ilegales como oferta tur¨ªstica, no es que lo sean las viviendas¡±, precisa. Esta oferta no regularizada comprende desde apartamentos en Barcelona (que han originado una cruzada por parte de los hoteleros) hasta habitaciones alquiladas en viviendas particulares, pasando por el alquiler de segundas residencias cuando sus due?os no las utilizan, o mas¨ªas de lujo que se arrendan a 10.000 euros la semana.

Las plazas no regularizadas son desde apartamentos hasta mas¨ªas de lujo

En conjunto, unas 200.000 viviendas con una media de cinco plazas sobre las que la Generalitat no tiene ni control de calidad, ni de si cumplen con requisitos a nivel de sostenibilidad y que escapan a cualquier obligaci¨®n de pagar impuestos. La Ley de Turismo de la Generalitat incentiva la regularizaci¨®n a trav¨¦s de la ¡°comunicaci¨®n responsable¡±, por la que los propietarios u operadores deben notificar su actividad a sus ayuntamientos. A partir de estas comunicaciones, el Gobierno est¨¢ creando un registro para facilitar su regularizaci¨®n.

La Generalitat est¨¢ elaborando el Plan Estrat¨¦gico del turismo partiendo la magnitud del sector: Catalu?a recibe cada a?o 82 millones de visitantes (se cuenta en esta cifra tanto a los turistas extranjeros como a un barcelon¨¦s que visita Girona, por poner un ejemplo) que mueven 15 millones de euros. En realidad, considera el plan, ¡°el turismo no es un sector, sino la suma de todos los sectores econ¨®micos: transporte, cultura, ocio, restauraci¨®n, deporte, seguridad, comercio y sanidad¡±.

Por ello, una de las cinco directrices que plantea el plan estrat¨¦gico es que las pol¨ªticas relacionadas con el turismo deben capitanearse desde una direcci¨®n transversal. ¡°La direcci¨®n de turismo no tiene capacidad para incidir en aspectos como el transporte, pero deber¨ªa poder ser una voz¡±, entiende Ribera. Los otros cuatro ejes del plan son el turismo como proyecto de pa¨ªs; que Catalu?a es ¡°destino de destinos¡±; la importancia de las marcas tur¨ªsticas; y la excelencia, en cuestiones como la calidad o el conocimiento de idiomas.

Bajando a lo concreto, los 10 objetivos del plan estrat¨¦gico son aumentar el gasto diario por turista, los ingresos totales, los ingresos en temporada baja, la estancia media de los turistas, su satisfacci¨®n, el ¨ªndice de repetici¨®n, reducir la oferta obsoleta, potenciar las marcas, lograr un mayor equilibrio territorial y mejorar el uso tur¨ªstico del patrimonio.