Una fuga de dos presos en Tarragona pone en jaque a Xavier Martorell
Desde que en enero tom¨® posesi¨®n como director de Prisiones, siete internos se han evadido Los Mossos d'Esquadra hab¨ªan detenido a un tercer reo cuando intentaba escapar El Departamento de Justicia afirma que se trata de ¡°casos aislados¡±
Las c¨¢rceles catalanas est¨¢n de pega. En los ¨²ltimos cuatro meses, siete presos se han dado a la fuga. La ¨²ltima evasi¨®n se produjo ayer por la ma?ana en el centro penitenciario de Tarragona. Dos reos lograron escapar, mientras que un tercero fue atrapado en el intento por un agente de los Mossos d¡¯Esquadra. Los reclusos aprovecharon la confusi¨®n desatada en el complejo tras el suicidio de un cuarto preso en la enfermer¨ªa. El director general de Servicios Penitenciarios de la Generalitat, Xavier Martorell, culp¨® del suceso a un funcionario de la c¨¢rcel, que no activ¨® el protocolo de emergencia pese a observar c¨®mo los presos escalaban hasta el tejado para huir.
La reiteraci¨®n de estos episodios, sin embargo, ha puesto en la picota a Martorell. Su situaci¨®n al frente de Prisiones se vuelve cada d¨ªa m¨¢s insostenible. Y no solo por las fugas, que el Departamento de Justicia atribuye a ¡°episodios aislados¡± sin un nexo en com¨²n, sino tambi¨¦n por su presunta participaci¨®n en una trama de espionaje pol¨ªtico. En su etapa como jefe de seguridad del FC Barcelona, Martorell (Converg¨¨ncia Democr¨¤tica de Catalunya) orden¨® a una agencia de detectives que investigara a diversos cargos p¨²blicos y a pol¨ªticos rivales.
La huida de Tarragona arranc¨® a las 9.30, seg¨²n Martorell. Un recluso que estaba haciendo deporte en el patio afirm¨® que se sent¨ªa indispuesto por unas molestias en la espalda. Fue trasladado a la enfermer¨ªa. Pero all¨ª, para sorpresa de los funcionarios, se quit¨® la vida. El hombre at¨® los cordones de sus zapatos a una barra de hierro de la enfermer¨ªa y se ahorc¨®, seg¨²n fuentes judiciales.
En ese momento, tres presos que estaban en el patio del M¨®dulo 1 aprovecharon la confusi¨®n para ¡°activar su plan de fuga¡±, seg¨²n Martorell. Los presos se ayudaron mutuamente y aprovecharon algunos salientes de la pared para trepar hasta el techo de la c¨¢rcel, situado a unos 10 metros de altura. El funcionario les vio y observ¨® tambi¨¦n c¨®mo, despu¨¦s, se dirig¨ªan a su garita. La treparon, superaron las vallas y saltaron a un tejado a media altura. Desde all¨ª, saltaron a la calle. ¡°El funcionario que vio el pie que sobresal¨ªa no activ¨® el protocolo de seguridad¡±, afirm¨® el director, que atribuy¨® la fuga a un ¡°error humano¡± del funcionario. Tras 20 a?os de experiencia en su cargo, Justicia le ha abierto un expediente. Los sindicatos de prisiones lamentan que la Generalitat cargue las culpas sobre los trabajadores, en lugar de asumir que la falta de recursos provoca episodios como este.
Pese a que diversos internos presentes en las inmediaciones estaban observando la escena, seg¨²n Martorell, el funcionario no dio trascendencia a la visi¨®n y no notific¨® el incidente hasta pasados entre 5 y 15 minutos, cuando se lo coment¨® a otro compa?ero. En ese momento, los tres presos ya hab¨ªan logrado superar el per¨ªmetro de vigilancia de la c¨¢rcel. En la zona se encontraba un mosso que logr¨® neutralizar a uno de los reclusos en la calle. Tras golpearle, los otros dos lograron zafarse y escapar por la calle de Goya.
¡°El mosso se proteg¨ªa la cara porque lo estaban pegando. Tambi¨¦n le intentaron coger la pistola y trataron de robar un coche cercano¡±, afirm¨® Marta Ram¨ªrez, vecina de la prisi¨®n, que vio la escena mientras estaba estudiando en su casa.
Detenido uno de los presos en un camino a 15 kil¨®metros de la c¨¢rcel
Tanto las c¨¢maras de seguridad como las alarmas del complejo fueron inspeccionadas hace dos semanas, seg¨²n Martorell, y funcionaban bien. Los dos presos huidos cumpl¨ªan condena por robos con intimidaci¨®n. Uno es espa?ol y el otro, venezolano. Este ¨²ltimo ¡ªGuillermo G. S., de 38 a?os¡ª fue detenido horas m¨¢s tarde por los Mossos d¡¯Esquadra mientras caminaba en la vecina localidad de El Morell, a 15 kil¨®metros. El otro interno sigue en paradero desconocido. La Generalitat afirma que ignora si la evasi¨®n estaba ¡°organizada¡±, o si surgi¨® espont¨¢neamente a ra¨ªz del suicidio.
¡°Lo que no ha funcionado ha sido el factor humano¡±, concluy¨® Martorell, que se neg¨® a hablar sobre la posibilidad de presentar la dimisi¨®n.
En la c¨¢rcel de Tarragona hab¨ªa, ayer, 415 internos vigilados por 189 funcionarios, seg¨²n su director, Francisco Romero. Aunque casi est¨¢ acabada, la Generalitat sigue sin abrir la nueva prisi¨®n de Mas d¡¯Enric, en el Catllar, con capacidad para 1.000 reclusos. Hasta este centro deber¨ªan trasladarse los internos de la actual c¨¢rcel. Adem¨¢s, el complejo servir¨¢ para descongestionar la Modelo de Barcelona. El Ejecutivo catal¨¢n atribuye el retraso a la construcci¨®n de una depuradora y al acondicionamiento de los accesos del recinto.
Desde que Martorell asumi¨® el mando en Prisiones, el 7 de enero de 2013, se han registrado cinco incidentes ¡ªtres evasiones de c¨¢rceles y dos fugas durante el traslado de presos¡ª que han permitido escapar a siete internos. La semana pasada, un preso preventivo paquistan¨ª se fug¨® de la c¨¢rcel Modelo tras intercambiarse con su hermano durante un vis a vis en el centro. La polic¨ªa a¨²n le busca. En enero, otros dos reos con antecedentes por robos se dieron a la fuga de la c¨¢rcel de Figueres anudando unas s¨¢banas. Fueron detenidos unas horas despu¨¦s. Ese mismo mes, un hombre se escap¨® de la c¨¢rcel de Ponent, en Lleida, durante un traslado al hospital. Y un preso magreb¨ª tambi¨¦n se escap¨® en el hospital Cl¨ªnico descolg¨¢ndose por una tuber¨ªa desde una altura de seis pisos.
Justicia no cree que los incidentes tengan una explicaci¨®n conjunta, m¨¢s all¨¢ de la coincidencia temporal, aunque admite que puede haber ¡°cierto efecto mim¨¦tico¡± que contribuya a fomentar este tipo de incidentes.
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