El viejo nuevo rumbo de Winter
El icono albino de la guitarra el¨¦ctrica expone esta noche en Madrid a los 70 a?os su enderezada carrera musical aferrado a sus ra¨ªces como ¡®bluesman¡¯
Una noche inolvidable a los 17: ¡°Me acerqu¨¦ a B.B. King y le pregunt¨¦ si pod¨ªa tocar. Dud¨® al principio pero acept¨® e incluso me dej¨® su guitarra, a la que siempre llama Lucille. Recib¨ª una ovaci¨®n con la gente puesta en pie¡±. El adolescente de la simb¨®lica alternativa era Johnny Winter (Leland, Misisipi, 1944). Y en aquel club de p¨²blico afroamericano arranc¨® su leyenda. M¨¢s de cinco d¨¦cadas en activo del guitarrista y cantante albino resumidas ahora por primera vez en la caja True to the blues y expuestas en vivo este martes en el Teatro Lara madrile?o. ¡°Mi lema siempre ha sido el que titula la antolog¨ªa: permanecer fiel al blues¡±, sentencia.
Su ¨²ltimo trabajo re¨²ne m¨¢s de cinco d¨¦cadas en activo sobre el escenario
Winter sol¨ªa vivir como un hombre demediado: ¡°Llegu¨¦ a lamentarme de mis antiguas grabaciones orientadas al rock. Aunque ya he asumido el total de mi obra y comprendido la necesidad de mis compa?¨ªas de entonces. Y pese a que estoy feliz de que mi m¨²sica se considere sobre todo parte del idioma del blues, a¨²n sigo interpretando algunas piezas roqueras¡±.
En Madrid no faltar¨¢n temas de su inminente nuevo ¨¢lbum, Step back, continuaci¨®n del logro que represent¨® Roots en 2011: rastrear sus ra¨ªces en el g¨¦nero de los doce compases, por medio de est¨¢ndares y con hu¨¦spedes m¨²ltiples. ¡°El m¨¦rito fue en buena medida de mi guitarrista, Paul Nelson, productor del disco. Yo escog¨ª las canciones en 15 minutos; ¨¦l eligi¨® a los invitados, registr¨® sus partes y mezcl¨® todo de modo que sonara como si hubi¨¦ramos grabado juntos¡±. A Nelson le atribuye tambi¨¦n otros triunfos: ¡°Padec¨ª la gesti¨®n de mi anterior representante durante a?os. Ten¨ªa sus propios problemas con el alcohol y las drogas, pero yo viv¨ªa en tal nebulosa que no era capaz de advertirlo. Paul me sac¨® de ese caos¡±.
Ha compaginado temas propios con versiones de grandes grupos
Si Roots contaba con artistas como Susan Tedeschi o Vince Gill, en Step back van a aparecer, entre otros, Ben Harper o Eric Clapton. ¡°De todos los m¨²sicos brit¨¢nicos que abrazaron el blues, Clapton es mi favorito. Aunque Sonny Boy Williamson fue el que mejor los defini¨®: ¡®desean tocar el blues con ardor [so bad, en ingl¨¦s], y realmente lo tocan fatal [so bad tambi¨¦n en ingl¨¦s]¡¯¡±, bromea Winter. Su magia a las seis cuerdas y su particular brillo con la slide guitar superan su nivel como compositor. De ah¨ª que siempre compaginara los temas propios con abundantes versiones. Y entre los proveedores para sus discos, por cierto, ilustres ingleses: The Rolling Stones o John Lennon. Winter public¨® antes que ellos, los autores respectivos, sus covers de Silver train y Rock and roll people. ¡°Ambos me dijeron que quedar¨ªan geniales interpretadas por m¨ª, Lennon incluso me la pas¨® en una casete asegurando que encajaba m¨¢s conmigo. Y no lo dud¨¦¡±.
Seis cuerdas, siete vidas
Como est¨¢ haciendo Paul Nelson con ¨¦l, Winter contribuy¨® en los setenta a revitalizar la carrera de su ¨ªdolo, Muddy Waters, al producirle tres discos premiados en los Grammy. ¡°Una vez me invit¨® a su casa y cocin¨® gumbo para m¨ª vestido con delantal. Le echo mucho de menos¡±. A Waters le devolvi¨® a su sonido crudo, el mismo que Winter predica: ¡°Recargar los discos no le sienta nada bien al blues¡±.
Quiz¨¢ en parte a eso aluda el t¨ªtulo del reciente documental sobre sus altibajos y su retorno a la forma: Johnny Winter: down and dirty, de Greg Olliver, autor antes de Lemmy, el aclamado retrato del l¨ªder de Mot?rhead. "Greg nos sigui¨® durante dos a?os. Me encanta ir de gira, y ahora que he dejado de hacer las cosas malas que hac¨ªa y mi salud est¨¢ bien, disfruto de la vida. Voy a ser un bluesman hasta que me muera".
A Winter pertenece la versi¨®n definitiva del Highway 61 revisited dylaniano, igual que Jimi Hendrix inmortaliz¨® la can¨®nica de All along the watchtower, otro cl¨¢sico de Dylan. Pero el guitarrista niega que Columbia, sello que le lanz¨® en 1969 al estrellato, quisiera convertirle en un nuevo Hendrix: ¡°En realidad, pretend¨ªan que fuera m¨¢s como The Rolling Stones. Y mi salud se resinti¨® en un momento dado [desapareci¨® de la circulaci¨®n durante meses] porque traicion¨¦ mis ra¨ªces blues y eso me condujo a problemas con el abuso de sustancias. Pero el v¨ªnculo con Columbia result¨® muy fruct¨ªfero: propiciaron un ambiente creativo que permiti¨® que mi talento floreciera¡±.
Y esto nos conduce a su debut neoyorquino, cuando el genial y prematuramente malogrado Mike Bloomfield le invit¨® a subir con ¨¦l a las tablas. Entre el p¨²blico, ejecutivos de Columbia: ¡°Ese concierto le hizo a Clive Davis firmarme un contrato que contemplaba el mayor adelanto dado nunca a un m¨²sico en la ¨¦poca [600.000 d¨®lares]. Le debo mucho a Bloomfield, un gran guitarrista y una gran persona¡±. Poco antes, la revista Rolling Stone hab¨ªa puesto el nombre de Winter en el mapa con un reportaje sobre la emergente escena tejana. Y no mucho despu¨¦s, ya catapultado, actu¨® en el c¨¦lebre festival de Woodstock (su show por fin vio la luz en 2009, como parte de la caja The Woodstock Experience). ¡°Pese al caos de la organizaci¨®n, sab¨ªamos que iba a ser hist¨®rico. Aterrizamos en helic¨®ptero y tocamos en la medianoche del domingo. Recuerdo estar durmiendo sobre una bolsa de basura, que me despertara el promotor y verme a los cinco minutos sobre el escenario con mi hermano Edgar y el resto de la banda. Fue surrealista¡±.
Johnny Winter act¨²a el martes 13 de mayo en el Teatro Lara dentro del ciclo Leyendas con Estrella. 22.00. 25 euros.
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