Condenado un traficante de drogas que degoll¨® a su exnovia en Nar¨®n

Un jurado popular ha declarado esta tarde a ?scar Ferre?o Fraga culpable del asesinato de Iria Garc¨ªa Bouza en junio del 2012. Fue un crimen terrible al que no le falt¨® ning¨²n detalle escabroso para multiplicar el dolor.?l, un camello ferrolano con varios juicios pendientes por robos, peleas y trafico de drogas y muchas visitas a la comisar¨ªa local donde era un personaje recurrente y siempre bajo sospecha. Ella, una chica joven, familiar y alegre de 28 a?os que repart¨ªa el pan hasta que se cruz¨® en su vida un mal hombre, diez a?os mayor, al que hab¨ªa denunciado cuatro d¨ªas antes de morir por maltrato, amenazas y colarse en su casa para acosarla.

No le sirvi¨® de mucho. El 25 de junio fallaron los protocolos de protecci¨®n y el condenado ignor¨® la orden de alejamiento de 200 metros que el juzgado hab¨ªa dictado contra ¨¦l tres d¨ªas antes para asesinarla. La mat¨® a cuchilladas. Pr¨¢cticamente la decapit¨® a plena luz del d¨ªa una tarde de verano delante de su casa, en la parroquia naronesa de Xuvia.

El veredicto considera a Ferre?o culpable de dos delitos: el asesinato de su expareja y otro por quebrantar la orden que le imped¨ªa acercarse a ella. El fallo del jurado se ley¨® a media tarde en la Audiencia Provincial de A Coru?a y cierra un juicio que arranc¨® el lunes.

Los dos hab¨ªan sido novios una temporada con tormentosas idas y venidas pero hac¨ªa meses que lo hab¨ªan dejado. Ella lo denunci¨® dos veces por acoso y amenazas. La primera en 2011 y otra vez el 21 de junio del 2012, cuatro d¨ªas antes de morir. La ¨²ltima ma?ana de su vida, Iria la pas¨® en la comisar¨ªa ferrolana donde acudi¨® para informarse de la medidas que se tomar¨ªan para protegerla del mismo hombre que la mat¨®.

?l la esper¨® agazapado sobre unos matorrales en el solar contiguo a su piso, en el n¨²mero 9 de la calle San Roque, donde sab¨ªa que ella sol¨ªa aparcar el para emboscarla a pocos pasos del portal poco despu¨¦s de las 15:30 horas de la tarde.

Los forenses testificaron esta semana que el asesino la atac¨® por detr¨¢s y que la degoll¨® con fuerza hasta seccionarle la aorta y las v¨¦rtebras del cuello. Huy¨® a pie por el sendero que bordea el r¨ªo Xuvia y corri¨® a refugiarse en los montes de Bri¨®n, donde su familia ten¨ªa propiedades, y donde lo encontr¨® la polic¨ªa de madrugada. No tard¨® mucho en admitir su culpa. ¡°Se me cruzaron los cables¡±, fue la explicaci¨®n que dio desde el banquillo de los acusados.

El juicio ha dejado al aire otros detalles espeluznantes de un crimen brutal que enmudeci¨® a toda la comarca. La chica ten¨ªa el m¨®vil en la mano y hablaba con su madre cuando le hundieron el cuchillo en el cuello y apenas alcanz¨® a gritar. Lo cont¨® su madre, tras el biombo tras el que prefiri¨® testificar para no verle la cara al asesino confeso de su hija cuando le toc¨® testificar esta semana.

Tanto el fiscal como la acusaci¨®n particular hab¨ªan pedido para Ferre?o una condena de 20 a?os de prisi¨®n. Su defensa aleg¨® que el crimen no fue premeditado y pidi¨® rebajarla como homicidio.

Se dio la paradoja de que nueve d¨ªas despu¨¦s de cometer el crimen, Ferre?o tuvo que comparecer en el juicio que ten¨ªa pendiente por violencia de g¨¦nero. La vista lleg¨® demasiado tarde. La mujer que lo denunci¨®, su exnovia, ya hab¨ªa muerto bajo su cuchillo.

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