Historia en im¨¢genes de tres ciudades
La Virreina acoge una retrospectiva del holand¨¦s Gerald van der Kaap
La curiosidad por conocer a las personas y entender las diferencias entre j¨®venes de distintas ¨¢reas geogr¨¢ficas es la marca de f¨¢brica del artista holand¨¦s Gerald van der Kaap. Ahora puede verse una retrospectiva de su obra en el Palau de la Virreina de Barcelona. Amsterdam, Bangkok, Xiam¨¦n es una muestra ecl¨¦ctica que incluye fotograf¨ªa, material audiovisual y diversos documentos que acompa?an y contextualizan los trabajos de Van der Kaap en las tres ciudades indicadas en el t¨ªtulo. La selecci¨®n de obras, sacada de fondos la fundaci¨®n Hans Nefken, podr¨¢ visitarse hasta el 31 de agosto.
Pese a estar formada por retratos y entrevistas, la primera parte de la exhibici¨®n no tiene ¨¢nimo de documental period¨ªstico. Esta sala recoge una parte del trabajo del artista en Bangkok, ciudad donde emprendi¨® un proyecto dirigido a eliminar el estigma del Sida entre los j¨®venes. Las fotograf¨ªas muestran chicas con uniformes universitarios y est¨¢n intercaladas con fragmentos de las entrevistas que Van der Kaap les realiz¨®; ¡°aunque las im¨¢genes y los textos no se corresponden¡±, explica el artista, quien aclara que tanto la puesta en escena y vestuario de las fotograf¨ªas como el conjunto del montaje es una obra de ficci¨®n.
El popurr¨ª incluye un remix en m¨²sica electr¨®nca de La pasi¨®n seg¨²n Mateo, y una recreaci¨®n de esta misma obra de Bach llevada a cabo por estudiantes de un instituto del norte de Amsterdam. El artista comenta que al venir a Barcelona se interes¨® por el paradero de Enrique Irazoqui, el anarquista vasco que interpret¨® a Jesucristo en la versi¨®n de Pasolini de Il vangelo seccondo Matteo de 1964; lo encontr¨® instalado en el Cap de Creus, donde mantuvo una larga conversaci¨®n con ¨¦l que termin¨® en un video retrato de seis minutos tambi¨¦n expuesto en la muestra.
La mayor sala de la exhibici¨®n queda reservada a Xiam¨¦n, ciudad del sur de China que Van der Kaap recorri¨® con su c¨¢mara a lo largo del a?o 2002. Las estampas fotogr¨¢ficas juegan aqu¨ª con los l¨ªmites entre la imagen documental y la ficci¨®n; una de ellas, que muestra a dos ni?as chinas bes¨¢ndose, es una recreaci¨®n exacta de un momento que captur¨® el artista de forma espont¨¢nea en las calles de Xiam¨¦n. Otras tienen un car¨¢cter marcadamente simb¨®lico, como la del ni?o sentado en una caja en medio de la calle. "Tom¨¦ la foto pensando que era algo simp¨¢tico, pero al pasar por el mismo lugar unas horas despu¨¦s el peque?o segu¨ªa all¨ª y vi que ten¨ªa la pierna atada con un candado de bici", explica el autor: la imagen, puntualiza Van der Kaap, es del mismo a?o en que el pa¨ªs entr¨® a formar parte de la Organizaci¨®n Mundial del Comercio.
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