N¨²?ez y su hijo entran en prisi¨®n para cumplir una condena de dos a?os

El ex presidente del FC Barcelona Josep Llu¨ªs N¨²?ez y su hijo mayor, del mismo nombre, ingresaron la tarde del domingo en la c¨¢rcel de Quatre Camins, en el municipio de La Roca del Vall¨¨s (Barcelona), para cumplir los dos a?os y dos meses que le ha impuesto la justicia por el caso Hacienda, un macroproceso iniciado hace 15 por sobornar a inspectores de la Agencia Tributaria para obtener ventajas fiscales, seg¨²n informan fuentes penitenciarias.

El tambi¨¦n constructor y promotor inmobiliario y su hijo dieron cumplimiento as¨ª al requerimiento de la Audiencia de Barcelona, que el pasado 6 de noviembre le dio un plazo de diez d¨ªas para ingresar en la c¨¢rcel tras desestimar el ¨²ltimo recurso presentado por Nu?ez.

La Audiencia de Barcelona orden¨® el ingreso en prisi¨®n del empresario y e hizo lo propio con su hijo con id¨¦nticos argumentos: ninguno de los dos ha dado "la menor muestra de arrepentimiento y contrici¨®n".

Los N¨²?ez hab¨ªan solicitado la suspensi¨®n de la pena de prisi¨®n a la espera de que el Gobierno tramitara su petici¨®n de indulto. Los magistrados, sin embargo, se han negado a ello porque, en su opini¨®n, las probabilidades de que les sea concedida la medida de gracia son pr¨¢cticamente nulas. El auto esgrime un reciente comunicado del Grupo N¨²?ez i Navarro en el que padre e hijo se presentan ante la opini¨®n p¨²blica "poco menos que como v¨ªctimas de una injusticia".

Los magistrados reiteran que la pena debe cumplirse por la ¡°gravedad¡± de los hechos. La conducta de N¨²?ez no fue ¡°ocasional, puntual o epis¨®dica¡±, sino que se prolong¨® en el tiempo porque ¡°soborn¨®¡± a inspectores de la Agencia Tributaria ¡°durante a?os¡±. El auto es contundente en sus manifestaciones: ¡°No nos hallamos ante una persona marginal o marginada, sino ante personas que utilizaron su excelente y privilegiada inserci¨®n social y poder econ¨®mico empresarial para delinquir¡±, se?ala.

N¨²?ez ¡ªal que el Tribunal Supremo rebaj¨® la condena de seis a dos a?os por dilaciones indebidas¡ª fue condenado por un delito de cohecho por el que, adem¨¢s de la c¨¢rcel, se le impuso una multa de 1,5 millones de euros e inhabilitaci¨®n para cargos p¨²blicos durante siete a?os.

La Audiencia resalt¨® ¡°la prevalencia del inter¨¦s p¨²blico en la pronta ejecuci¨®n de una sentencia que es firme y que debe ejecutarse cuanto antes¡±.

Los argumentos esgrimidos por la defensa en el recurso de s¨²plica fueron desestimados uno a uno. La defensa aleg¨®, por ejemplo, que hab¨ªa habido dilaciones indebidas tras la sentencia del Supremo. Pero la Audiencia lo rechaza de plano y recuerda que la defensa de N¨²?ez ha usado ¡°de forma prolija los recursos e incidentes procesales¡± y eso es, a la postre, lo que ha retrasado el proceso. Lo que deber¨ªa prevalecer, se?alan los magistrados, es el ¡°inter¨¦s p¨²blico¡± de que una sentencia firme se ejecute ¡°cuanto antes¡±. Tampoco cree que la edad de N¨²?ez (83 a?os) o su posible mal estado de salud deba servir para suspender la ejecuci¨®n de la pena. En cualquier caso, ser¨¢ Instituciones Penitenciarias el organismo que valorar¨¢ su estado a partir de ahora.