La ONG Cogami encadena despidos en otra empresa de discapacitados

A la par que la Rede Galega de Kioscos, en v¨ªa de liquidaci¨®n dejando en el paro a sus 95 trabajadores con minusval¨ªas, los despidos y bajas se suceden desde hace 14 meses en Hornos Lamastelle, otro centro especial de empleo de Galega de Econom¨ªa Social (GES), el grupo empresarial de la Confederaci¨®n Galega de Persoas con Discapacidade (Cogami), una ONG sin ¨¢nimo de lucro. Y todo ello pese al m¨¢s de un mill¨®n de euros que le entreg¨® en el ¨²ltimo a?o y medio la Conseller¨ªa de Traballo en subvenciones para cubrir ¡°el coste laboral de mantener centros especiales de empleo¡±.

Hornos Lamastelle es una panificadora sin ¨¢nimo de lucro con sede en Oleiros y tienda en el centro de A Coru?a que emplea a 65 personas, de las cuales el 95% son discapacitadas, muchas de ellas ps¨ªquicas. Especializada en la elaboraci¨®n de empanada gallega y con una facturaci¨®n de 472.000 euros en 2013, la crisis se desat¨® en octubre de ese a?o con el cese fulminante, muy contestado por la plantilla, del exgerente Ram¨®n Dourado. Desde entonces fueron enviados al paro otros 12 empleados, la mayor¨ªa por motivos disciplinarios. Hay que sumarle cinco m¨¢s que, hartos de presiones, acabaron por pedir el finiquito. En total cambi¨® una cuarta parte de la plantilla de este centro, donde se multiplican las denuncias de trabajadores por hostigamiento y acoso laboral tras negarse a firmar o apoyar al nuevo equipo directivo en su cruzada de demandas judiciales contra sus antecesores.

Las ¡°presiones y falta de respeto¡±, adem¨¢s de amenazas de despido, son constantes, asegura una docena de trabajadores en una carta enviada en julio de 2014 al presidente de Cogami, Anxo Queiruga. Las quejas de los empleados se repiten: sufren, dicen, insultos y toda clase de hostigamiento laboral por parte de los nuevos directivos. ¡°O est¨¢s con nosotros o contra nosotros¡± es la frase atribuida a la direcci¨®n que m¨¢s se repite. Tres empleadas de la tienda acabaron en el paro tras retractarse de una extensa denuncia que les obligaron a firmar sin leer contra el exgerente y la exjefa de producci¨®n, tambi¨¦n despedida. Era la presidenta del comit¨¦ de empresa que, tras las sonoras protestas organizadas por la plantilla contra el cese del exgerente, tambi¨¦n acab¨® por ser revocado y sustituido por uno nuevo, af¨ªn a la nueva direcci¨®n.

Una exdelegada laboral, que vio c¨®mo se le imped¨ªa en el ¨²ltimo momento presentarse a su reelecci¨®n y sufri¨® todo tipo de represalias y amenazas por negarse, como la mayor¨ªa de los despedidos, a firmar documentos en contra de los anteriores jefes, fue enviada a trabajar durante tres meses al ¡°zulo¡±, el peque?o cuarto donde se empaqueta la empanada congelada. Debido al fr¨ªo intenso, lo habitual es que haya rotaci¨®n entre los trabajadores en ese puesto.

Otra empleada de Administraci¨®n, ahora de baja por ansiedad, relata tambi¨¦n todo tipo de vejaciones, insultos y encargos imposibles de cumplir a la que la sometieron desde que se neg¨® a firmar denuncias contra el anterior equipo. ¡°Tonta, in¨²til, incompetente¡± son algunos de los calificativos que le dedicaban a diario. Algunos de ellos fueron tambi¨¦n los que profiri¨® el gerente actual en un fuerte enfrentamiento ocurrido en p¨²blico con una exempleada de la tienda. Gan¨® el juicio por despido improcedente, al igual que otra trabajadora. Son los ¨²nicos que de momento se han celebrado.

Hubo adem¨¢s en abril cinco despidos por motivos econ¨®micos. La direcci¨®n adujo en las cartas de despido que Hornos Lamastelle entr¨® en p¨¦rdidas, m¨¢s de 147.000 s¨®lo en el primer trimestre de este a?o que termina. Los exempleados, sin embargo, tienen otra versi¨®n. Aseguran que fueron enviados al paro tras denunciar irregularidades ante Inspecci¨®n de Trabajo por acoso laboral, amenazas y coacciones.

Ram¨®n Sestayo, consejero delegado de la sociedad GES y vicepresidente de Cogami, neg¨® en declaraciones a este diario que exista una d¨ªficil situaci¨®n laboral en la panificadora y la cadena de despidos que se suceden desde hace 14 meses. Sestayo echa las culpas de todo al ¡°sinverg¨¹enza¡± del exgerente, cuyo cese fulminante achac¨® a la traici¨®n de haber montado, con otros jefes de Hornos Lamastelle tambi¨¦n despedidos meses despu¨¦s, una empresa, Panificadora Mencer, ¡°para hacer competencia a Hornos Lamastelle¡±. El directivo de Cogami asegura que esa sociedad fue constituida en septiembre de 2013, y por eso Dourado fue despedido en octubre. Sin embargo, esa panificadora no se cre¨® hasta finales de noviembre, seg¨²n el Registro Mercantil. Sestayo tambi¨¦n neg¨® a este diario que las p¨¦rdidas fueran la causante de los despidos de abril.