La nueva ¡®clase social¡¯: empleo m¨¢s RGI
Aumenta un 40% los trabajadores que completan su salario con ayudas sociales. Lanbide les otorga prestaciones para incentivar que sigan en su puesto de trabajo
El mito acusatorio de que el sistema vasco de protecci¨®n social lleva a muchas personas a la conclusi¨®n de que es mejor cobrar las ayudas que trabajar porque se gana m¨¢s dinero en el paro que con algunos empleos, no se sostiene. El argumento de que ¡°no merece la pena aceptar un empleo de 400 o 500 euros si en la RGI me dan 619¡±, tampoco.
En Euskadi se est¨¢ consolidando un nuevo tipo de trabajador, que viene a sustituir al inicialmente denostado, y a partir de 2008, anhelado, mileurista, y que refuta esa hip¨®tesis popular y a veces malintencionada.
Los nuevos hijos de la crisis y de la reforma laboral, adem¨¢s de trabajar, cobran una ayuda del sistema vasco de protecci¨®n social, como una manera de complementar sus ingresos hasta el entorno, escaso, pero m¨¢s digno, de los mil euros, y por otra, como una manera de premiar la actitud de trabajar de quien los firma, a?adiendo ingresos a su cartilla hasta superar en un 30% lo que ingresar¨ªa del sector p¨²blico sin ning¨²n tipo de empleo. Es lo que el Servicio Vasco de Empleo, Lanbide, denomina ¡°Est¨ªmulos al empleo¡±.
Menos conflicto, m¨¢s inversi¨®n
Cuando se dise?¨® la RGI se hizo pensando en la reincorporaci¨®n al empleo de quienes acced¨ªan a las ayudas sociales. Pero adem¨¢s hacerlo con la vista puesta en mantener una sociedad vasca estructurada, escolarizada al m¨¢ximo, y para preservarla de una delincuencia que tenga el origen en la pobreza. Todo ello convierte a Euskadi, en opini¨®n del director de Lanbide, en un territorio m¨¢s atractivo para la inversi¨®n extranjera que otros.
En Euskadi la tasa de abandono escolar est¨¢ en el 8%, cuando en Espa?a est¨¢ entre el 21% y el 24%, de las m¨¢s altas de Europa, y la UE se ha marcado para 2020 quedarse en un 10%. ¡°Nosotros ya estamos por debajo de esa tasa. ?Por qu¨¦?¡±, se pregunta. A rengl¨®n seguido responde que Euskadi tiene un buen sistema educativo, pero adem¨¢s la RGI influye al proteger y estructurar a las familias. ¡°Una familia sin ingresos no est¨¢ pensando en mandar a sus hijos a una escuela, y si lo hacen tienen m¨¢s riesgo de fracaso¡±, explica. Y ese es el primer paso hacia una sociedad con mayor nivel formativo, mayor calidad y protecci¨®n a la hora de acceder a los trabajos, m¨¢s calidad en los procesos productivos, y menos conflictividad social. ¡°Todo eso hace que adem¨¢s sea un pa¨ªs m¨¢s atractivo para la inversi¨®n¡±, concluye.
En abril de 2014 hab¨ªa 8.721 personas en Lanbide en esa situaci¨®n. El pasado viernes esa cifra hab¨ªa crecido casi un 40%, hasta los 12.181 expedientes.
¡°La precarizaci¨®n del mercado laboral est¨¢ provocando este tipo de situaciones. Lanbide les ayuda como una manera de incentivarles a que sigan trabajando y a aprovechar esas oportunidades aunque sean peque?as, de momento¡±, explica su director general, Adolfo Alustiza.
Un trabajador que cobra unos 400 euros de su empresa, y vive solo, tiene derecho ¡ªinfluyen algo las retenciones del IRPF y las cuotas a la Seguridad Social¡ª a una ayuda media a trav¨¦s de la Renta de Garant¨ªa de Ingresos (RGI) de 570 euros adicionales. Es decir, sus ingresos totales ascender¨ªan a final de mes a 970, pero adem¨¢s, por cobrar la RGI, tendr¨ªa derecho en caso de estar en situaci¨®n de alquiler a los 250 euros del complemento de vivienda.
Si fueran dos personas en la familia, Lanbide le completar¨ªa con 753 euros, (753 m¨¢s 400 del salario), m¨¢s el derecho al complemento de vivienda. Y si fueran tres, adem¨¢s de los 400 euros de su contrato, ingresar¨ªa 810 euros mensuales adicionales de Lanbide, m¨¢s la ayuda por la vivienda. En este ¨²ltimo caso, los ingresos familiares ascender¨ªan a 1.460 euros, cuando su contrato le da 400. ¡°Merece la pena hacer el esfuerzo de trabajar¡±, concluye Alustiza.
Pero si su salario fuera de 600 euros, el sistema vasco de protecci¨®n le incentivar¨ªa mensualmente con 392 euros, precisamente para eso: dignificar su vida, estabilizar las familias, facilitar que sus hijos, en caso de tenerlos, sigan escolarizados y no sufran las consecuencias del hambre y la pobreza, y esa unidad familiar disponga de un paraguas econ¨®mico temporal.
El l¨ªmite son los 1.030 euros. Con un salario de esa cuant¨ªa, el trabajador tendr¨ªa derecho a cinco euros de RGI. Una cantidad simb¨®lica, pero por el hecho de cobrarla le abre la puerta a los 250 euros del complemento de vivienda.
Este tipo de ayudas de ¡°est¨ªmulo al empleo¡± no tienen, sin embargo, car¨¢cter indefinido. Se pueden solicitar durante tres a?os en total, aunque s¨ª se pueden interrumpir y retomar, si en un momento concreto el contrato del trabajador mejora y no necesita la RGI. ¡°De hecho, esas ayudas est¨¢n dise?adas para dos a?os m¨¢s una pr¨®rroga de un a?o m¨¢s, pero pr¨¢cticamente en todos los casos la pr¨®rroga es un hecho, y consideramos el ciclo de tres a?os¡±, indica Alustiza.
El fen¨®meno creci¨® tras la reforma laboral del Gobierno de Mariano Rajoy, y se empieza a disparar ahora que el mercado se reactiva, pero en la mayor¨ªa de las ocasiones con contratos temporales y parciales, adem¨¢s de poco remunerados.
Estos trabajadores cohabitan en las empresas con los supervivientes de los ¨²ltimos siete a?os de la crisis, pero agarrados a las condiciones que les proporciona un minijob.
Muchos de ellos los firman mujeres, tienen pocas horas sobre el papel, aunque la jornada real es m¨¢s larga, y el salario es reducido. ¡°Que no merece la pena trabajar porque se cobra m¨¢s con las ayudas sociales es una leyenda urbana. El hecho es que el sistema vasco piensa en las personas, y tiene un impacto sustancial en el bienestar social de los vascos, evitando la pobreza e igualando las condiciones de miles de trabajadores. Se venda como se venda, esa mejora del bienestar general repercute de manera fundamental en la cohesi¨®n social¡±, asegura Alustiza.
Los datos
Aut¨®ctonos. Entre los 65.362 beneficiarios de la RGI este mes de enero, los aut¨®ctonos con empleos precarios suponen ya el 61%, mientras que apenas llega al 9% el de los perceptores procedentes del Magreb. Tambi¨¦n son numerosos los pensionistas (26%) que cobran una parte de la RGI para completar su pensi¨®n. M¨¢s del 58% de quienes la reciben son mujeres, un ¨ªndice que va en ascenso.
Formaci¨®n. En julio pasado hab¨ªa 2.576 universitarios que recib¨ªan ayuda. Sin embargo, una aplastante mayor¨ªa de los beneficiarios carec¨ªan, a mediados del a?os pasado, de una formaci¨®n m¨¢s all¨¢ de la ense?anza obligatoria. M¨¢s de 10.000 perceptores no ten¨ªan ning¨²n estudio.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.