La ley que facilita edificar en suelo r¨²stico llegar¨¢ en medio a?o
Feij¨®o asegura que con esta medida se trata de "dar vida al rural"
La futura ley del suelo de Galicia que facilita edificar en suelo r¨²stico para "dar vida al rural" y flexibiliza, al incorporar los criterios del Plan de Ordenaci¨®n del Litoral (POL), la franja m¨ªnima de costa protegida --hasta ahora situada en la comunidad en 200 metros-- ser¨¢ aprobada en la C¨¢mara entre finales de 2015 y enero de 2016.
Lo ha ratificado este jueves el presidente gallego, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, quien ha comparecido con la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Ethel V¨¢zquez, despu¨¦s de que el Gobierno auton¨®mico diese en su reuni¨®n semanal luz verde a la remisi¨®n del texto al Consello Econ¨®mico e Social (CES), un paso que acerca a la norma al Pazo do H¨®rreo para su aprobaci¨®n final.
Entre las novedades del texto, que incorpora la figura de los planes b¨¢sicos para los ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes, V¨¢zquez ha especificado que tambi¨¦n avanza en la "protecci¨®n" de costas al unificar normas ya en vigor, de forma que se asume la directriz de la ley estatal de un m¨ªnimo de 100 metros de franja de protecci¨®n costera, pero con los criterios del POL.
Y es que el plan del litoral gallego, aprobado tambi¨¦n por el Ejecutivo de Feij¨®o, no se ci?e a franjas cerradas por metros, sino que, en funci¨®n de la zona, la protecci¨®n es de mayor o menor calado. En consecuencia, la Xunta no mantiene en la nueva norma del suelo "una franja fija de 200 metros" como hasta ahora, sino que ¨¦sta ser¨¢ "mayor" o "menor" en funci¨®n de la zona en cuesti¨®n y de lo que diga el POL.
V¨¢zquez ha incidido en el car¨¢cter proteccionista del plan del litoral, por lo que ha dado por hecho que, con car¨¢cter general, se ampl¨ªa la zona de protecci¨®n costera, al tiempo que ha defendido tambi¨¦n en los avances en la edificaci¨®n "con todas las garant¨ªas y exigencias" en el suelo r¨²stico.
"Potenciamos que se aproveche el suelo r¨²stico para los usos id¨®neos, como instalaciones de inter¨¦s general para las que se necesita mucho espacio como colegios, hospitales o universidades; tambi¨¦n cementerios y depuradoras", ha relatado la conselleira, para a?adir que se incluye como uso autorizable el de viviendas ligadas a explotaciones agrarias, con el fin de que quien trabaja en el rural "pueda vivir en ¨¦l".
De forma expresa, se reconocen tambi¨¦n las capacidades tur¨ªsticas de Galicia, de forma que, a trav¨¦s de las herramientas adecuadas y "con todas las garant¨ªas de dotaci¨®n de los servicios necesarios", se promueven las construcciones y las obras de rehabilitaci¨®n para usos tur¨ªsticos que sean potenciadoras del medio donde se localicen.
Eso s¨ª, para preservar los valores del entorno, las nuevas construcciones en suelo r¨²stico deber¨¢n ajustarse a varios requisitos. Por ejemplo, el volumen m¨¢ximo de la edificaci¨®n ser¨¢ similar al de las edificaciones tradicionales existentes, con una altura m¨¢xima de siete metros.
Asimismo, la norma determina que la superficie de la parcela debe ser, como m¨ªnimo, de 2.000 metros cuadrados; la construcci¨®n ocupar un m¨¢ximo del 20 por ciento del terreno; que se minimice el impacto visual y que se mantenga en su estado natural, como m¨ªnimo, el 50 por ciento de la parcela.
Tanto Feij¨®o como V¨¢zquez han esgrimido que, desde 2009, se ha pasado de 37 ayuntamientos gallegos con plan general adaptado a la legislaci¨®n vigente a un total de 83. Tambi¨¦n han incidido en la aprobaci¨®n del POL y de las Directrices de Ordenaci¨®n del Territorio (DOT).
Ahora, han destacado que la nueva ley del suelo tiene vocaci¨®n de permanencia y nace m¨¢s simplificada, toda vez que se reduce en un 31 por ciento el n¨²mero de art¨ªculos frente a la ley actualmente en vigor. Desde que el Consello aprob¨® el borrador de la ley en octubre, se someti¨® a consultas de 75 agentes y fue objeto de 30 encuentros sectoriales.
Como resultado de este proceso de participaci¨®n, el texto incorpora ocho de cada 10 alegaciones formuladas desde distintos colectivos y organizaciones, entre los que destacan la Federaci¨®n Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) y el Colexio Oficial de Arquitectos de Galicia (COAG).
Con el objetivo de dotar a "todos" los municipios gallegos de normas urban¨ªsticas, la Xunta elaborar¨¢ a lo largo de 2016 un plan b¨¢sico auton¨®mico, que identificar¨¢ al conjunto de los 33.000 n¨²cleos de Galicia y delimitar¨¢ las diversas zonas de afecci¨®n sectorial.
Esta herramienta servir¨¢ de materia prima para elaborar los planes b¨¢sicos municipales, con los que la Xunta pondr¨¢ a disposici¨®n de los ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes que carecen de planeamiento y que tienen dificultades t¨¦cnicas y econ¨®micas para elaborarlo, un instrumento de ordenaci¨®n b¨¢sico, adaptado a sus necesidades.
La previsi¨®n es que la redacci¨®n de estos planes b¨¢sicos locales se lleve a cabo entre 2017 y 2020, y podr¨ªa beneficiar a los 56 municipios gallegos de menos de 5.000 habitantes que actualmente carecen de planeamiento. Los ayuntamientos que recurran a esta herramienta tendr¨¢n voz en la tramitaci¨®n de los planes b¨¢sicos, y emitir¨¢n informes determinantes.
En cuanto a los ayuntamientos de m¨¢s de 5.000 vecinos, conservar¨¢n la potestad exclusiva de redactar sus planes urban¨ªsticos, si bien tendr¨¢n tambi¨¦n medidas para "facilitar y agilizar" su tramitaci¨®n. As¨ª, los municipios pasar¨¢n a pedir a la Xunta un informe ¨²nico en vez de los diferentes documentos sectoriales que hasta ahora se piden por separado.
Con la nueva norma, la Secretar¨ªa Xeral de Ordenaci¨®n do Territorio e Urbanismo ser¨¢ la encargada de solicitar los distintos informes sectoriales y estos deber¨¢n emitirse en un plazo m¨¢ximo de tres meses o se entender¨¢n como positivos, lo que seg¨²n la Xunta reducir¨¢ en un 75 por ciento los tiempos de tramitaci¨®n auton¨®mica de los planes.
Adem¨¢s, "en una apuesta por la autonom¨ªa local", se les concede a los ayuntamientos de m¨¢s de 50.000 habitantes, es decir, a las siete grandes ciudades gallegas, la capacidad para aprobar definitivamente sus planes generales, contando con un informe preceptivo de la Administraci¨®n auton¨®mica.
Para contribuir a asentar la poblaci¨®n en el rural, la ley se mantiene inflexible al prohibir la construcci¨®n de nuevas edificaciones con fines residenciales en suelo r¨²stico, pero permite las nuevas viviendas vinculadas a explotaciones agropecuarias. Adem¨¢s, apuesta por la rehabilitaci¨®n.
Con tal fin, pasan a considerarse como edificaciones tradicionales todas las anteriores al a?o 1975 y en ellas se elevan los porcentajes de incremento de volumen permitidos en las obras de rehabilitaci¨®n, llegando hasta el 50 por ciento, siempre y cuando se respete la altura y la tipolog¨ªa existente y se introducen los usos artesanales, mediante actividades como los talleres de dulces o de jabones, queser¨ªas, cer¨¢micas, bodegas o conserveras.
En relaci¨®n con la delimitaci¨®n de los n¨²cleos tradicionales, se suprime el par¨¢metro fijo que establece en todos los casos la l¨ªnea perimetral en un m¨¢ximo de 50 metros desde las edificaciones tradicionales existentes y se ajuste el l¨ªmite a las infraestructuras y elementos naturales que haya en el lugar (tales como r¨ªos o carreteras).
La ley tambi¨¦n apuesta por el paisaje "como s¨ªmbolo identitario" de Galicia. As¨ª, como Feij¨®o ya hab¨ªa avanzado, se conceder¨¢n pr¨®rrogas ilimitadas a las licencias de edificaci¨®n condicionadas a que en primer lugar se remate el exterior de las construcciones, o en el caso de que las obras no est¨¦n iniciados.
La ley del suelo tambi¨¦n obliga a que las caracter¨ªsticas constructivas y est¨¦ticas de las edificaciones sean acordes con el paisaje rural.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.