La Guardia Civil intenta secar el r¨ªo para rescatar al barranquista muerto

Tercer d¨ªa de rescate en A Corga da Fecha. El cuerpo del barranquista de 38 a?os que desapareci¨® el s¨¢bado bajo la cascada de este escenario espectacular sigue atrapado tras una piedra, todav¨ªa no se sabe a qu¨¦ profundidad ni en qu¨¦ postura, a pesar de que ayer, estirando mucho el brazo, un agente del Equipo de Rescate e Intervenci¨®n de Monta?a (EIREM) de la Guardia Civil de Ourense logr¨® tocar una de las manos del cad¨¢ver. El hombre, de nacionalidad portuguesa, practicaba este deporte de riesgo con un grupo de amigos. Al descender esta cascada de fuerte ca¨ªda vertical, en el Fecha, estrecho pero caudaloso afluente del r¨ªo Caldo (municipio de Lobios, Ourense), dos de los barranquistas fueron empujados por la fuerza de la corriente hacia una brecha entre las rocas. Uno logr¨® salir con ayuda de sus compa?eros, pero el otro fue engullido por la grieta y qued¨® encajado bajo una piedra. El grupo pidi¨® ayuda aquel d¨ªa pasadas las diez de la noche y el domingo por la tarde la Guardia Civil localiz¨® al fin el cuerpo. Ayer, que no llov¨ªa, todos los intentos llevados a cabo a lo largo del d¨ªa, hasta las siete de la tarde, fueron en balde. Y hoy ha empezado a llover de nuevo en este enclave del Parque Natural do Xur¨¦s.

Con esta situaci¨®n, el caudal ha aumentado y el rescate se complica todav¨ªa m¨¢s en esta corriente que desciende desde lo alto de la monta?a salvando tramos de ca¨ªda escalonados. Los agentes van a probar a secar el r¨ªo para recuperar el cad¨¢ver y con este objetivo est¨¢n experimentando diferentes m¨¦todos. En el lugar, seg¨²n una portavoz del instituto armado en Ourense, se esperaba hoy la llegada de helic¨®pteros cargados con motobombas capaces de extraer todo ese volumen de agua que impide llegar al cuerpo a los equipos de rescate.

Pero despu¨¦s de la hora de comer y tras reunirse los miembros del EIREM, se ha decidido volver a intentarlo por la tarde subiendo otras herramientas hasta el lugar donde se halla el cuerpo, aproximadamente hacia el centro de la pared por la que discurre encajonado aquel tramo de cascada (con un salto en este punto de unos 70 metros de altura). Los especialistas han tardado mucho tiempo en llevar hasta ese punto planchas de hierro y pl¨¢sticos con el prop¨®sito de desviar el caudal y montar una suerte de parapeto que protegiese a los monta?eros de la fuerza con la que golpea el agua. Y de esta manera, pasadas las siete de la tarde, han logrado ver el cuerpo, tocarlo, e incluso hacer fuerza para intentar liberarlo de la roca.

Ayer se intent¨® la misma estrategia, el drenado del cauce y el desv¨ªo del agua a terrenos pr¨®ximos, pero los medios resultaron insuficientes. Se utilizaron bombas de achique de menor potencia, que fueron transportadas por tierra hasta este lugar de complicado acceso y desnivel muy pronunciado. Las motobombas que se planea emplear hoy solo pueden llevarse hasta A Corga da Fecha desde el aire. Mientras los agentes del EIREM de Trives, con ayuda del grupo de Cangas de On¨ªs, prueban nuevas formas de rescate, la familia del deportista fallecido aguarda noticias alojada en el balneario pr¨®ximo al lugar del accidente.