Pol¨¦mica tras la suspensi¨®n de un recital en la Residencia de Estudiantes

El concierto de flamenco de la cantaora La Argentina, celebrado el pasado 6 de julio en la Residencia de Estudiantes, acab¨® pasado por agua. Y rodeado de cierta pol¨¦mica, seg¨²n denuncian varios de los asistentes, que lamentan un supuesto trato de favor a parte del p¨²blico.

La tormenta veraniega del pasado mi¨¦rcoles arranc¨® con poca intensidad. Poco a poco, la lluvia, los rayos y los rel¨¢mpagos fueron cogiendo fuerza y el concierto al aire libre, en el patio de la instituci¨®n, en el centro de la capital, tuvo que ser suspendido: ¡°Hab¨ªa mucho equipo electr¨®nico y no pudimos hacer otra cosa¡±, explican desde la instituci¨®n cultural, fundada en 1910 e inspirada por el ideario de la Instituci¨®n Libre de Ense?anza del pedagogo e intelectual Francisco Giner de los R¨ªos.

¡°Se par¨® el espect¨¢culo y nos refugiamos en el edificio principal¡±, relata uno de los asistentes, que prefiere no revelar su nombre. Tras el desconcierto inicial, un grupo de personas ¡ªal concierto asistieron unas 500, seg¨²n la organizaci¨®n¡ª fue invitado a entrar en otra estancia. ¡°Acudieron a otra sala [al sal¨®n de actos] y cerraron las puertas. Cuando intentamos entrar, las se?oritas que las guardaban nos dijeron que no se pod¨ªa¡±, explica una asistente.

La cantaora La Argentina, acompa?ada de sus palmeros y el guitarrista, tambi¨¦n accedi¨® a esa habitaci¨®n. ¡°Estaba all¨ª, nos pidi¨® unas sillas y de manera improvisada decidi¨® continuar con el repertorio que hab¨ªa preparado, ya que solo hab¨ªa interpretado parte del mismo¡±, explican desde la instituci¨®n, en cuyas habitaciones han residido Federico Garc¨ªa Lorca, Ortega y Gasset o Pedro Salinas, entre otros, y han dado conferencias personajes de la talla de Einstein o Marie Curie. ¡°Desde fuera, pod¨ªamos o¨ªr que el concierto continuaba. Preguntamos, pero ni aun as¨ª nos dejaron pasar¡±, asegura una persona de las que se quedaron fuera. ¡°Y eso que hab¨ªamos pagado nuestra entrada¡±, a?ade.

El concierto costaba 10 euros, pero no era una entrada al uso, sino una aportaci¨®n para ayudar a financiar las actividades culturales de la Residencia de Estudiantes.?¡°En ning¨²n momento se prohibi¨® a nadie entrar en el sal¨®n de actos¡±, aseguran desde la direcci¨®n del centro. ¡°De hecho, la cantaora dijo que iba a acabar su repertorio all¨ª y pidi¨® expresamente que entrara todo el que quisiera¡±, mantienen desde la Residencia. ¡°Era tarde, en torno a medianoche y mucha gente ya se hab¨ªa ido, pero no se vet¨® a nadie¡±, insisten. ¡°De hecho, en la Residencia no hemos recibido ninguna queja¡±.