Una mirada art¨ªstica a la locura
Una exposici¨®n en la Sala de Arte Joven aborda la psiquiatr¨ªa de forma cr¨ªtica
"A ver si te mando un d¨ªa un libro de art¨ªculos m¨ªos de psiquiatr¨ªa. Se llama 'Apuntes para una psiquiatr¨ªa destructiva", le dec¨ªa el poeta Leopoldo Mar¨ªa Panero (que pas¨® cuatro d¨¦cadas en centros psiqui¨¢tricos hasta su muerte en 2014) a Fernando S¨¢nchez Drag¨® en una entrevista televisiva en 1999. El libro, que se sepa, no existe, pero 18 a?os despu¨¦s da nombre a una exposici¨®n en la Sala de Arte Joven (C/ Avenida de Am¨¦rica, 13) que ofrece una mirada cr¨ªtica a la psiquiatr¨ªa.
La muestra, inaugurada este jueves, consiste en una decena de instalaciones, fotograf¨ªas y piezas de videoarte basadas en material, bien actual, bien del periodo entre la ¨²ltima d¨¦cada del franquismo y el inicio de la democracia, en el que se fragu¨® la reforma psiqui¨¢trica que puso fin a los manicomios en Espa?a con la Ley de Sanidad de 1986. Un di¨¢logo temporal que pretende "reabrir el debate sobre la enfermedad mental y su representaci¨®n" sin caer en el mito rom¨¢ntico -vehiculado por decenas de novelas y pel¨ªculas- de conectar arte y locura, explic¨® en la presentaci¨®n de la muestra su comisario, Alfredo Aracil. "Se trata de mirar el pasado para imaginar un futuro m¨¢s all¨¢ del presente hipermedicalizado en el que estamos.?El ¨²ltimo capitalismo ha generado otro tipo de confinamiento en espacios y, ahora, los manicomios est¨¢n dentro de nosotros y las camisas de fuerza son qu¨ªmicas", asegura Aracil, uno de los ganadores de la ¨²ltima edici¨®n de ¡®Se busca comisario', una iniciativa de la Comunidad de Madrid de apoyo a la creaci¨®n emergente.
El derecho a la tristeza o a la diferencia, la dificultad de categorizar locura y cordura o el imaginario de lo patol¨®gico son algunos de los temas que vertebran los trabajos de la exposici¨®n, que podr¨¢ visitarse hasta el 21 de mayo y va acompa?ada de una mesa redonda y un taller. Es el caso de los dibujos de personajes como esqueletos que efectu¨® el pintor jerezano Carlos Gonz¨¢lez Ragel, fallecido en 1969 en el sanatorio psiqui¨¢trico de Ciempozuelos. Una iconograf¨ªa, la de los los rostros chupados y las miradas huecas, que comparte con las im¨¢genes, expuestas al lado, del v¨ªdeo que tom¨® Carlos Osorio entre 1974 y 1975 en la Cerrada de Mujeres, como se denominaba al hospital psiqui¨¢trico de Oviedo.
Noem¨ª Iglesias aporta una instalaci¨®n que contiene el dossier de un paciente que recib¨ªa 18 medicamentos al d¨ªa en Grecia en 2007. Enfrente, una doble columna alberga las muestras de orina que se fue haciendo la propia artista tras ir tomando, uno a uno, la mayor¨ªa de esos f¨¢rmacos. "Hay un proceso de enajenaci¨®n, de reproducir en mi propio cuerpo todo lo que ¨¦l pas¨® y hacer un control exhaustivo. Es, en cierto modo, vivir su vida a trav¨¦s de la m¨ªa", explic¨® Iglesias en la presentaci¨®n.
La rara troupe, un colectivo articulado en torno al MUSAC de Le¨®n, ofrece por su parte un v¨ªdeo, a ratos l¨²dico, con el que pretende retratar la patolog¨ªa mental desde una dimensi¨®n est¨¦tica. Precisamente, buscar "un imaginario com¨²n" de la locura y "recuperar lo comunitario y lo asambleario" son dos de las recetas que propone Aracil para "enfocar el malestar de manera pol¨ªtica". "Culpamos a lo biol¨®gico, cuando perder el trabajo o no llegar a fin de mes tienen una carga ps¨ªquica que hay que combatir de forma pol¨ªtica. El ¨²ltimo capitalismo convierte en enfermo al que no es capaz de producir. A lo mejor no necesitamos tantos psiquiatras y s¨ª mejores sindicatos", concluye.
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