El alcalde de Alcanar: ¡°Escogieron este lugar porque est¨¢ muy poco transitado¡±
El municipio recibe con sorpresa la relaci¨®n de una explosi¨®n en el pueblo con el atentado de Barcelona
La urbanizaci¨®n Montecarlo est¨¢ a pocos kil¨®metros de Alcanar (Tarragona), el ¨²ltimo pueblo de Catalu?a en la frontera con Valencia. A un lado queda el mar y al otro una gran f¨¢brica de cemento que se asienta en el paisaje bajo el duro sol de las Tierras del Ebro. Esta urbanizaci¨®n solitaria y calurosa est¨¢ en el punto de mira de los Mossos d¡¯Esquadra porque una explosi¨®n de gas que aconteci¨® el pasado mi¨¦rcoles por la noche puede tener relaci¨®n con el atentado que sacudi¨® la Rambla de Barcelona el jueves por la tarde.
El alcalde de Alcanar, Alfons Montserrat, se?ala una casa de tejas rosadas: ¡°La casa que explot¨® por manipulaci¨®n de gas est¨¢ justo debajo de esa, pero no ver¨¢s nada, est¨¢ totalmente en ruinas¡±. La polic¨ªa cient¨ªfica y los Mossos d¡¯Esquadra, adem¨¢s, impiden el paso por medidas de seguridad. Este chalet, propiedad del Banco Popular, fue ocupado hace unos meses por al menos dos personas hasta que el mi¨¦rcoles por la noche una deflagraci¨®n acab¨® con la vida de uno y dej¨® herido al otro.
Al principio, las autoridades se centraron en la b¨²squeda de m¨¢s supervivientes despu¨¦s de la explosi¨®n, y trabajaron con la hip¨®tesis de que los ocupantes de la casa manipularon unas veinte bombonas de gas butano y propano para comercializarlo. Tambi¨¦n barajaban la posibilidad de que el chalet fuese un laboratorio de droga. No obstante, las noticias del atentado en la Rambla de Barcelona y una segunda explosi¨®n en la casa de Alcanar obligaron a los Mossos a cambiar de estrategia: reforzar el per¨ªmetro de seguridad, activar el dispositivo de b¨²squeda de explosivos en el chalet y trabajar con la hip¨®tesis de que el atentado en Barcelona est¨¢ conectado ¡°de forma clara y con pocas dudas¡±, seg¨²n el jefe de los Mossos d¡¯Esquadra, Josep Llu¨ªs Trapero, con lo sucedido en este pueblo de Tarragona.
¡°Escogieron este lugar porque est¨¢ muy poco transitado¡±, asegura el alcalde, que ya asume la conexi¨®n yihadista del suceso. Con un gesto con los brazos expresa la soledad que rodea el lugar, interrumpida estos d¨ªas por las tareas de los Mossos d¡¯Esquadra y de los medios de comunicaci¨®n. En la urbanizaci¨®n Montecarlo tienen residencia de verano unas cien personas, la mayor¨ªa procedentes de la comarca o de Francia. ¡°Pero muy pocos vienen m¨¢s de dos o tres semanas al a?o¡±, detalla Montserrat. La zona, muy seca y al lado de una carretera que conecta Alcanar con la playa, est¨¢ poblada por chalets de dos pisos y caminos de tierra en los que apenas hay farolas.
¡°Ning¨²n vecino los conoc¨ªa¡±, asegura Jordi Bort, teniente de alcald¨ªa. Una se?ora francesa con sus dos hijas atraviesa el operativo policial con la toalla en la espalda, dispuesta a ir a la playa. Est¨¢ de vacaciones en la urbanizaci¨®n, pero no presenci¨® la explosi¨®n. ¡°Nunca supe quien viv¨ªa en esa casa¡±, asegura. Aunque algunos vecinos han afirmado en las ¨²ltimas horas que sospecharon de los movimientos en la casa, ni el Ayuntamiento ni los Mossos d¡¯Esquadra registraron ningun aviso ni denuncia al respecto. ¡°Ahora todo el mundo quiere decir que ya lo sab¨ªa, pero aqu¨ª nadie sospechaba nada, nos ha sorprendido a todos¡±, a?ade Bort.
El teniente de alcalde fue quien gestion¨® el realojo de las familias de las casas colindantes en hoteles de la zona. La explosi¨®n de la noche del mi¨¦rcoles hiri¨® a seis vecinos adem¨¢s de matar a uno de los ocupantes de la casa y herir a otro, que est¨¢ detenido en el hospital de Tortosa donde ingres¨® por su estado de salud. No se teme por su vida, y los Mossos esperan a que se le d¨¦ el alta. Los bomberos desalojaron cinco viviendas de la urbanizaci¨®n, tres de ellas por afectaciones estructurales a ra¨ªz de la deflagraci¨®n y las otras por la ampliaci¨®n del per¨ªmetro de seguridad. ¡°Esperamos que puedan volver pronto¡±, afirma.
¡°Estuvieron casi un a?o, ven¨ªan, descargaban cosas...¡±
Partrick Vinaros, un vecino franc¨¦s de la urbanizaci¨®n, asegura que hab¨ªa visto pasar alguna vez a los ocupantes a lo largo de los ¨²ltimos meses. "Estuvieron casi un a?o, eran magreb¨ªes con barba larga. Ven¨ªan, descargaban cosas...". A ¨¦l le explot¨® el plato en el que com¨ªa cuando hubo la deflagraci¨®n. Fue a ayudar sus vecinos de la casa de al lado, seis personas que salieron a salto de mata de la casa contigua a la de los ocupantes. Partrick frecuenta a la urbanizaci¨®n desde hace m¨¢s de veinte a?os. En el hotel de al lado, el Montecarlo, tambi¨¦n se not¨® la explosi¨®n, estallaron todos los cristales, y hoy ya los hab¨ªan reemplazado.?
Eric Groby vive al lado de la casa que explot¨®: "Fue horrible, una fuerte explosi¨®n, mucho humo y polvo, est¨¢bamos en la terraza". Un vecino, tambi¨¦n franc¨¦s, Martial Muliardo, lleg¨® y ayud¨® a desalojar las casas del lado: "Ten¨ªamos miedo de que volviera a ocurrir".
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