Madrid solo cuenta con 24 puntos p¨²blicos de recarga de coches el¨¦ctricos
Los veh¨ªculos el¨¦ctricos necesitan conectarse en enchufes de viviendas dada la escasez de lugares de carga
En la Comunidad de Madrid hay 324 puntos de recarga para coches el¨¦ctricos, de los que ¨²nicamente 24 son p¨²blicos. Seg¨²n la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, en la regi¨®n hay registrados 5.313 veh¨ªculos de estas caracter¨ªsticas, lo que supone un punto de recarga por cada 16 coches y uno p¨²blico por cada 221. El Ayuntamiento de Madrid se ha comprometido a instalar 15 puntos m¨¢s para 2020. La mayor¨ªa de los usuarios tienen que cargar en sus veh¨ªculos en su propio garaje y, si no disponen de uno, alquilarlo.
Cada ma?ana, el taxista Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez baja al garaje que tiene alquilado y, antes de subir a su veh¨ªculo, lo desenchufa del cargador como si fuese un tel¨¦fono m¨®vil.Jorge Esquinca se conoce los puntos de memoria y, si tiene alguna duda, los busca en una aplicaci¨®n m¨®vil. Debido a que la bater¨ªa de su coche necesita tres horas para cargarse y en los postes solo se puede estar c¨®mo m¨¢ximo dos, tiene que moverlo de un punto a otro. Vive en Sanchinarro y al d¨ªa hace aproximadamente 100 kil¨®metros con un euro de gasto.
¡°Viajo con mi coche a Suiza. Antes de salir tengo que pensar donde voy a parar a recargar¡±, comenta. Las empresas IBIL y GIC gestionan los puntos de recargas p¨²blicos que hay en la capital. 22 son de carga semi-r¨¢pida (tres horas para cargar) y dos de carga r¨¢pida (20 minutos). Para utilizarlos, es necesario adquirir una tarjeta (bien de prepago, bien de contrato) que facilitan estas compa?¨ªas y pagar en los postes. El coste medio por Kilovatio (kw) es de 40 c¨¦ntimos en carga lenta y 50 en r¨¢pida.
Con su anterior veh¨ªculo, Rodr¨ªguez gastaba al mes una media de 400 euros en combustible, ahora paga una cuota fija de 33 euros a IBIL para cargar su coche por la noche. No obstante, opina que comprarse un veh¨ªculo de este tipo es ¡°una yincana a trav¨¦s de un pantano de arenas movedizas¡±. El taxista comenta que tuvo que ¡°luchar mucho¡± para que el propietario del garaje que alquila le permitiese poner un cargador, pese a que, seg¨²n asegura, ¡°la Ley de propiedad horizontal permite hacerlo¡±.
¡°Una persona que se va a comprar un coche el¨¦ctrico tiene que pensar que lo tiene que cargar en casa¡±, comenta Fernando Pina, delegado en Madrid de la Asociaci¨®n de Usuarios de Veh¨ªculos El¨¦ctricos. La entidad explica que los puntos p¨²blicos est¨¢n pensados para un uso espor¨¢dico, especialmente para turistas o trabajadores, como taxistas o empresas de reparto. ¡°El objetivo es que cada usuario disponga en su casa de un cargador o carga vinculada¡±, cuenta Pina. El coste de la instalaci¨®n de un punto de carga en un edificio oscila entre los 1.500 y 5.000 euros, dependiendo las condiciones constructivas del edificio que se quiera acondicionar, seg¨²n afirma ?ngel Ortega, responsable de ingenier¨ªa y operaciones de GIC.
El resto de puntos en la regi¨®n, unos 300, son propiedad de empresas privadas que no pueden vender la carga, por lo que la regalan a sus clientes.En su mayor¨ªa, est¨¢n situados en aparcamientos, supermercados, talleres e instalaciones de empresas privadas que se los ofrecen a sus empleados. ¡°Se necesita m¨¢s infraestructuras de recarga de oportunidad, aquellas que se instalan en el sector terciario y se utilizan mientras, se va al cine, a comer o a hacer la compra¡±, apunta Arturo P¨¦rez, gerente de la Asociaci¨®n Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Veh¨ªculo El¨¦ctrico (Aedive). Instalar un punto de carga r¨¢pida (a partir de 40 kw) cuesta unos entre los 45.000 euros y su coste anual es de 4.000 euros.
A trav¨¦s del plan MOVEA, el Estado ha concedido hasta el pasado mes de octubre ayudas de 5.500 euros para la compra de coches y 1.000 para la instalaci¨®n de puntos de carga. En lo que va de a?o, 2.271 coches el¨¦ctricos se han vendido en la regi¨®n, un 75% m¨¢s que en el mismo periodo de 2016, seg¨²n un informe de la Asociaci¨®n Nacional de Fabricantes de Autom¨®viles y Camiones.
Del mismo modo que un m¨®vil, las bater¨ªas de los coches el¨¦ctricos van perdiendo eficacia y, con el uso, se gastan antes y el tiempo de carga disminuye. ¡°Es como un m¨®vil con ruedas¡±, bromea Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez. Cambiar una bater¨ªa supone un coste de entre 5.000 y 8.000 euros, dependiendo del modelo. P¨¦rez, de Aedive, considera que el coste total de un coche el¨¦ctrico sigue siendo m¨¢s econ¨®mico que el de cualquier veh¨ªculo de combusti¨®n, ya que a la larga el motor el¨¦ctrico requiere menos gastos de reparaciones y el ahorro en combustible es hasta 10 veces menor.
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